Las CPU de ARM se encuentran en todo tipo de dispositivos gracias a su acuerdo con otros fabricantes, desde los coches hasta los móviles. Pero hay un sector donde todavía no tienen una presencia destacada, el de los portátiles y ordenadores de gama alta. Ahora, a una semana que Apple lance sus primeros portátiles con chipsets ARM, la compañía presenta los nuevos Cortex-A78C. Su diseño de CPU de gama alta enfocada para portátiles con Windows.
Los nuevos Cortex-A78C están basados en los núcleos Cortex A78 presentados en mayo de este año y enfocados al mercado móvil. Su primera CPU de alto rendimiento está enfocada para portátiles 'Always-On', en referencia a esos portátiles con gran nivel de autonomía y diseño ultrafino.
No es rival para Intel o AMD, pero es un primer paso
Todavía es pronto para que la mano de Nvidia intervenga, pero sí es una representación de cómo ARM quiere trasladar su éxito con los procesadores para móviles al terreno de los portátiles, dominado principalmente por Intel y AMD.
Junto con una caché de 8MB L3, la CPU está diseñada para lidiar con procesos que requieran una elevada carga, significativamente por encima de lo que ofrecen los smartphones más potentes. A nivel de GPU, los Cortex-A78C son compatibles con la GPU Mali-G78.
Los Cortex-A78C no apuestan por la configuración big.LITTLE utilizada en las versiones para móviles. En su lugar incorporan versiones de ocho o seis núcleos principales para conseguir ofrecer una buena experiencia en lo que ellos llaman "inmersión digital", en referencia a tecnologías como la realidad virtual o aumentada.
ARM insiste que estas nuevas CPU Cortex-A78C están preparadas para ofrecer un buen rendimiento en portátiles, pero la competencia lleva bastante más recorrido. Es el caso de Intel o AMD, pero incluso Qualcomm con su Snapdragon 8cx Gen 2 ofrece grandes resultados. Habrá que esperar a la semana que viene para conocer qué ofrece Apple, pero teniendo en cuenta los resultados de su chip A14, es muy probable que el rendimiento de estos Cortex-A78C se quede corto en comparación.
Si bien, no es el hardware lo que más problemas presentan estos chipsets ARM, sino el software. Pues la emulación de aplicaciones x64 todavía no está plenamente operativa.
Las esperanzas de ARM para intentar hacerse un hueco en el mercado de portátiles pasan por Cortex-X1, la futura CPU que llegará a principios de 2021 y estrena nueva arquitectura. Hasta la fecha, ARM siempre se ha fijado en la eficiencia de sus núcleos. Con el nuevo Cortex-A78C el mensaje ya ha cambiado. Un inicio que quizás se queda corto, pero anticipa la firme intención de ARM de apostar por el segmento de los ordenadores. Veremos si fabricantes como MediaTek, Huawei o Samsung, que trabajan con ARM en smartphones, también deciden acompañar a ARM en esta transición.
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