El mes de abril ha dejado estampas de lo más atípicas en la primavera de 2023. El mes se cerró con un fenómeno tan propio del verano como las temperaturas que hemos sufrido los últimos días: un reventón húmedo, unido a una fuerte tormenta de verano que dejó una tromba de agua en la región de Murcia.
Un reventón húmedo. Pero, ¿qué es exactamente un reventón? Tal y como explica la Agencia Estatal de Meteorología, AEMET, se trata de corrientes convectivas de aire, es decir, vientos que se generan a diferencias entre las temperaturas en las masas de aire situadas en distintas zonas de un área.
La característica principal de éstas es que la corriente de aire se desplaza en vertical hacia el suelo. Los reventones (downbursten inglés) suelen generarse en cumulonimbos, un tipo de nube también de estructura vertical y que tiende a causar precipitaciones y tormentas.
Los reventones suelen tener una duración relativamente corta (entre 5 y 30 minutos) y pueden ser de varios tipos: húmedos (como en el caso del reciente en Murcia) en el que la humedad de la nube es arrastrada hasta el suelo en forma de precipitación; secos, en cuyo caso la humedad desplazada hacia el suelo se topa con una masa de aire seco que evita que alcance el suelo como precipitaciones, e incluso cálidos.
Balance de daños. Uno de los principales damnificados de este fenómeno fue el festival Warm Up, celebrado en la capital de la región. Numerosos conciertos tuvieron que ser cancelados y los asistentes tuvieron que buscar refugio de la lluvia en la zona.
Según reportan los medios locales, las lluvias generaron desperfectos en las infraestructuras que se saldaron con cortes de luz. A esto hubo que añadir la caída de árboles. Por fortuna no ha habido que lamentar víctimas mortales, como sí ocurriera en verano de 2022 cuando una fuerte racha de viento asociada a un reventón tirara abajo parte de los decorados del festival Medusa ceñebrado en Cullera, Valencia.
Tormentas de verano… en primavera. La meteorología del mes de abril ha sido cualquier cosa menos convencional. Un mes tradicionalmente lluvioso ha sido testigo de un preocupante situación de sequía. Las lluvias de este último fin de semana ni responden a los patrones habituales de lluvias primaverales ni servirán para aliviar una situación que lleva meses gestándose.
Las tormentas, eso sí, han venido acompañadas de una bajada significativa de las temperaturas, sin duda una buena noticia tras unos días bajo la amenaza del denominado “horno ibérico”.
Más calor y estabilidad. Todo indica que mayo se avecina con la misma tendencia que se ha observado en las últimas semanas de abril. Es decir, con estabilidad y temperaturas más cálidas de lo habitual en distintas zonas. Mañana miércoles, por ejemplo, será la zona del cantábrico oriental la que presencie temperaturas superiores a la media.
Imagen | NWS Phoenix, Wikimedia Commons
Ver 11 comentarios