En la actualidad, entre el 5 y el 7% de los dispositivos de Apple se fabrican en India, pero el país asiático confía en que el gigante de Cupertino aumentará su producción hasta alcanzar el 25%. Este movimiento respondería a uno de los esfuerzos del fabricante del iPhone para reducir su gran dependencia de China, país en el que ha confiado, a través de Foxconn y otros socios, durante muchos años.
La noticia nos llega desde Nikkei Asia, que recoge las declaraciones del ministro de comercio indio. Piyush Goyal ha dicho que Apple es “otra historia de éxito”, y ha destacado la creciente apuesta de la compañía por su país. Recordemos que India está tratando de convertirse en una alternativa cada vez más atractiva para alojar parte de la producción de las grandes compañías tecnológicas.
Apple empieza a cruzar las fronteras chinas
Durante décadas, Apple ha confiado en las capacidades industriales del gigante asiático para fabricar en masa varios de los productos de su catálogo. Sin embargo, el panorama actual del país ha empezado a poner en riesgo los planes de la compañía. Basta recordar que a finales del año pasado apareció un inesperado anuncio que anunciaba retrasos en la entrega de los iPhone 14.
Si bien los planes la firma estadounidense de ir alejándose de China tienen larga data, todo parece indicar que por estos tiempos están acelerándose. Y, precisamente, las declaraciones de Goyal sostienen esta hipótesis, aunque, desafortunadamente, no especifica cuándo se alcanzaría ese supuesto 25% de producción dentro de las fronteras India. Apple, como de costumbre, no ha hecho comentarios.
De acuerdo a Financial Times, Tim Cook es una piedra angular en la relación entre Apple y China. Fue él mismo el que en sus tiempos como director de operaciones de la compañía sentó las bases de la actual cadena de suministros con el país, pero es ahora él mismo el que debe asumir el reto de la diversificación de esta pieza tan elemental.
Ahora todo parece indicar que la decisión de ir mudando gradualmente su producción a otros países está tomada, pero los desafíos que se avecinan son enormes. No se trata simplemente de replicar los procesos de ensamblaje en otros países, pues intervienen una gran cantidad de factores clave que China ha tiene muy bien apuntalados.
Por ejemplo, la disponibilidad de componentes de otros socios de fabricación, el acceso a una gran fuerza laboral de trabajadores y salarios que se encuentren dentro de los márgenes que la compañía está dispuesta a pagar. Además, socios locales y apoyo político para convertir determinados lugares en enormes ciudades-fábrica que servirán para albergar a miles de trabajadores.
Toca esperar para saber si Apple será capaz de consolidar sus lazos con India, país que, por cierto, prepara incentivos financieros para que eso suceda. La compañía, que fabrica allí teléfonos desde 2017, empezó a fabricar el iPhone 14 en una línea de producción en Chennai. Con el tiempo sabremos qué otros dispositivos empezarán a fabricarse dentro de las fronteras de este país.
Imágenes: Naveed Ahmed | Apple
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