Esta espectacular montaña de cristal es 'The Helix', el nuevo cuartel Amazon

Amazon ha desvelado por fin el aspecto del que será el edificio HQ2, su segundo gran cuartel general. El espectacular edificio parece una gran hélice doble o una montaña de cristal, y se espera que comience en 2022 y esté completado a principios de 2025.

La torre de 106 metros de altura, bautizada como 'The Helix', ha sido descrita por Amazon como un "bosque en una espiral vertical" y cuenta con una serie de pasarelas exteriores con árboles y plantas que llegan hasta la parte superior del edificio.

Podrá ser visitado por turistas algunos fines de semana

Aunque el cuartel general está dedicado a que los empleados de la empresa tengan allí su lugar de trabajo, la intención es la de que cualquiera pueda visitar parte de las instalaciones.

Así, algunos fines de semana al año se abrirá el acceso a este complejo con espacios interiores y exteriores para equipos de trabajo, que incluirá otros tres edificios de oficinas en la zona con un total de 260.000 metros cuadrados de espacio para oficinas.

Ese singular edificio estará además rodeado de un gran espacio abierto accesible a todos los públicos en el que se planea construir tanto un parque público con locales y restaurantes como un anfiteatro para conciertos al aire libre o también para mercadillos.

Como explican en Fast Company, la polémica ha rodeado al HQ2 desde que se anunciara este proyecto en septiembre de 2017. Amazon convocó una especie de concurso para elegir la "afortunada ciudad" que sería nuevo hogar de este cuartel general.

Arlinton (cerca de Washington D.C.) fue la ciudad que se llevó la palma, pero no sin que hubiera una gran polémica tras cancelar el proyecto que podría haber situado esta sede en el barrio de Queens, en Nueva York.

Cada edificio de esta nueva sede ha sido diseñado bajo el estándar LEED Platinum, lo que que entre otras cosas implica que toda su energía será proporcionada por una granja solar situada al sur de Virginia.

Además no habrá accesos en coches privados (ni siquiera eléctricos) en superficie, y se ha ideado toda una estructura subterránea para todos los coches privados y transportes públicos.

En el exterior la idea es la de que todo sea un gran espacio peatonal  que puedan compartir indistintamente los empleados de Amazon, los habitantes de la zona y otros visitantes.

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