Durante un tiempo, inmediatamente posterior al estreno de Gran Hotel Budapest, una parte de Internet se obsesionó con la geometría y la simetría de los planos de Wes Anderson. La perfección recargada y pastel del director, siempre centrando el plano, fue objeto de análisis en magníficos vídeos y otros productos informativos. Pero el hype simétrico de Anderson no tenía nada de especial: la geometría siempre ha dominado el cine y la ficción televisiva.
Geometry shots, un blog que también es cuenta de Twitter, página de Facebook y cuenta de Instagram, se dedica a revelar la geometría secreta detrás de otros grandes planos de la historia del cine y la TV. En ella podemos explorar cómo las composiciones triangulares encuadran la acción de forma provocativa o cómo la composición de rectángulos es útil para narrar en un plano diferentes historias.
Hay de todo: desde Trainspotting hasta películas tan antiguas y aún fascinantes como Metrópolis. Punto de fuga, lienzos segmentados donde cada elemento de la acción se despliega a sus anchas, planos vertebrados por una imagen diagonal, etcétera. Todo tiene sentido geométrico, pese a que en numerosas ocasiones no seamos capaces de apreciarlo dado el natural ritmo de la narración audiovisual. Un ejercicio divertidísimo.