Entre las cosas que ya no son lo que eran las camisetas de algodón ocupan un lugar destacado.
Eso es porque tenemos pruebas físicas: casi todos tenemos alguna prenda de algodón de hace años con mejor aspecto que una recién comprada. ¿Por qué pasa esto? Por el desarrollo tecnológico. Como cualquier industria, la textil persigue ser más eficaz, conseguir más con menos. Lo que se sacrifica en el proceso es la calidad. Sin embargo, no todo está perdido y esas magníficas camisetas de antes se pueden encontrar todavía, si sabes qué buscar (y cuando acabes de leer este artículo lo sabrás).
En el caso del tejido de algodón, la calidad está determinada por dos variables:
- La materia prima.
- El proceso de hilado.
Empecemos por la materia prima. Las mejores variedades de algodón son Sea Island, egipcio, egipcio americano y Pima. Sus fibras superan 32 milímetros de longitud, y son finas y resistentes. Pese a ello, su volumen de producción es ridículamente bajo en proporción a los volúmenes internacionales: tan sólo un 3%. El problema es que crece despacio y sus cosechas son reducidas.
El 90% de la producción mundial de algodón pertenece al tipo American Upland. Dentro de esta variedad hay distintos niveles de calidad, en función del grosor y longitud de las fibras, pero estas no suelen superar los 25 milímetros.
El problema es el hilado
En función de la calidad de la fibra, se utiliza un proceso de hilado u otro, provocando que los tejidos mejoren o empeoren muchísimo.
La gran mayoría de las camisetas publicitarias o las de marcas de fast fashion utilizan un hilado llamado "open end". ¿En qué consiste? Se trata de una una tecnología desarrollada en los años ‘60 en Checoslovaquia, creada específicamente para aprovechar el algodón de baja calidad, de fibra corta. Es muy parecida a la fabricación del algodón de azúcar: las fibras dan vueltas en un tambor gigante y si empiezas a tirar de un cabo, se van enrollando a su alrededor, creando el hilo.
Una camiseta hecha con algodón "open end" tiene un tacto menos suave, se rompe antes y hace bolitas a los pocos lavados. ¿La explicación? Si aumentamos mucho la foto de un hilo de este tipo, vemos que parece una madeja enredada, con muchos cabos que sobresalen. Son justamente estos cabos los que forman las bolitas.
El problema no es sólo la utilización de algodón de fibra corta. Es que, además, en el proceso se daña aún más: con la rotación del tambor, cualquier imperfección de su superficie funciona como una cuchilla, troceando las fibras. Para mejorar la calidad de este hilado se han empezado a utilizar tambores de acero quirúrgico. Su superficie es muy lisa, lo que reduce las roturas.
Así se fabrican, por ejemplo, las camisetas Fruit of the Loom marcadas con el sello Belcoro.
Mejorando el "open end"
El siguiente nivel de calidad son los hilos ring spun. En su fabricación se utilizan fibras de longitud media y una tecnología más antigua, que imita el hilado manual: el algodón se carda para eliminar impurezas y para alinear las fibras que luego se retuercen y estiran. El resultado es un hilo liso, uniforme, con poco cabos que sobresalgan. Un tejido realizado con estos hilos es mucho más resistente, apenas hace bolitas y tiene un tacto agradable. Lo utilizan marcas como Gildan, Russel o Anvil.
Pero el nivel máximo de calidad en los tejidos para camisetas es el algodón peinado ring spun. Para este tipo de tejido se reservan las fibras de mayor calidad, las más largas. Además de seguir la tecnología antigua de hilado, este algodón incluye un paso adicional después del cardado, el peinado.
En este proceso se eliminan todas las fibras más cortas, descartándose hasta un 15% del algodón. Un tejido de este tipo es resistente, tiene una superficie más lisa y uniforme y es más suave al tacto. Son fáciles de identificar, porque en la etiqueta interior suele poner "algodón peinado" o "combed cotton". Sin embargo una pérdida del 15% de algodón no puede hacer otra cosa que encarecer el material, así que son también las más caras.
Las marcas que utilizan este tipo de tejido son American Apparel, Sol’s, Bella & Canvas.
Aún así, conviene no fiarse ciegamente de las marcas. No todas las camisetas de un productor se hacen con el mismo algodón. Lo que no es muy relevante para la calidad de una camiseta es el dato que muchos utilizamos: el peso del tejido. Una camiseta gruesa, con un peso alto, de tejido open end, tendrá peor calidad y aguantará menos que una camiseta fina de algodón peinado. Comparar el peso del tejido tiene sentido sólo dentro de la misma calidad.
Así que si buscáis una camiseta de algodón como las de antes, lo ideal es preguntar por el tipo de algodón que utiliza. Si os dicen "algodón peinado", es lo mejor que se puede encontrar. Si os dicen "ring spun", conseguiréis una calidad muy superior a la que estáis acostumbrados. Si os dicen: "¿Qué algodón? Algodón 100%", podréis soltar todos estos datos y diferenciar entre las camisetas de mala calidad y las que durarán toda una vida.
Una versión previa de este artículo se publicó en abril de 2016.