Ya no tiene vuelta atrás. A partir del viernes muchos de los panes que llevamos comiendo durante casi 40 años no podrán seguir haciéndose. Y es que el 8 de abril entra en vigor la normativa que limita las cantidades máximas de sal en la panadería. Una normativa que el Gobierno tuvo que retrasar tres años para permitir que los panaderos pudieran adaptar sus recetas y empaquetados. ¿Qué impacto tiene esta norma en nuestro día a día? ¿Qué tiene el Gobierno en contra de la sal?
La nueva "Ley del pan". El boom del pan artesano de los últimos años pilló a la normativa que había regulado su calidad desde 1984 fuera de juego. Mientras su consumo se desplomaba de los 57 kilos per cápita en 1998 a los 31,8 de 2018, la industria se lanzó a hacer un uso (muchas veces torticero) de términos como "artesanal" o "masa madre". Por eso, en 2019, el Gobierno aprobó una nueva normativa que clarificaba definiciones y ordenaba la oferta panadera del país.
El nuevo texto cambiaba la definición legal del pan, de sus variedades, y, también, los impuestos que se le aplicaban. Es decir, supuso una pequeña revolución para panaderías, panificadoras y fabricantes en general. No obstante, hubo una cosa que se quedó pendiente.
La última de las medidas que entra en vigor. En el último momento, el Consejo de Ministros incluyó una limitación de la cantidad de sal que se puede emplear para elaborar el pan común. Se trataba, como digo, de una modificación que no estaba en los borradores anteriores y, por eso, pilló a la industria con el pie cambiado.
La nueva norma de calidad del pan permitía un máximo de 13,1 g de sal por kilogramo de pan común (si se analiza mediante determinación de cloruros) o 16,6 g de sal por kilogramo (si se analiza mediante determinación de sodio total). Pero, para evitar que "se produjera una afección al consumo de pan y favorecer que el sector productor pudiera ir modificando las recetas", el Gobierno aplazó tres años su entrada en vigor. Ese plazo caduca el viernes.
¿Qué tiene el Gobierno en contra de la sal? Más que contra la sal, contra su consumo desmedido. Para hacernos una idea, en nuestro país consumimos una media de sal de 9,7 gramos / persona / día, casi el doble que el recomendado por la OMS. Este es uno de los principales factores implicados en el origen de la hipertensión arterial, las enfermedades coronarias y los accidentes cerebrovasculares.
El enorme problema de la sal oculta. Reducir la ingesta de sal se ha demostrado como una de las maneras más sencillas y rentables de reducir la incidencia de todas esas enfermedades. Sin embargo, es muy difícil. Se calcula que entre el 70 y el 75% de la sal consumida procede de alimentos procesados fuera del hogar. Es lo que se denomina "sal oculta" porque los individuos no son conscientes de las cantidades que están consumiendo.
No sirve la concienciación. De hecho, no se trata solo de una cuestión de formación. El equipo barcelonés de la doctora Isabel Roig lleva años estudiando el impacto del conocimiento sobre los efectos de la sal en la salud y su consumo. Sus conclusiones son que, independientemente del conocimiento que tengan los consumidores, el consumo final de sal es muy homogéneo. Por ello, antes que campañas de concienciación, parece que las medidas más efectivas deben centrarse en el control de esa "sal oculta" que impide un control efectivo del consumo de sal.
Un paso hacia la trasparencia alimentaria. Hemos discutido mucho sobre ultraprocesados y sobre las iniciativas que, desde la administración pública, se están impulsando para corregir los efectos perversos de la "invasión" de estos productos en nuestra dieta cotidiana. Este del pan es solo un paso más en una lucha complicada, pero sanitariamente bastante necesaria.
Imagen | Jeremy Bezanger
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dwanii
Estupenda noticia. Ojalá más gente se anime a "reeducar" su paladar. Realmente se disfrutan muchísimo más todos los alimentos, sin tanta azúcar ni sal.
bernardo.ravinelli
Y digo yo, ¿no es más razonable tratar al consumidor como lo que debe ser, un individuo responsable de su salud y su vida en lugar de tratarle como lo que al político le interesa: un ser irresponsable e infantil cuya vida debe regular el estado?
No es muy dificil encontrar información sobre el consumo de sal, o azucar o grasas que se considera aceptable según tu edad, salud y nivel de actividad física (o preguntar a tu médico que tampoco es tan dificil) y exigir un etiquetado que refleje de manera legible y clara las cantidades de tales ingredientes en los ultraprocesados y dejar que sea el consumidor el que, según sus preferencias de compra, fuerce a la industria alimentaria a cambiar sus recetas.
Y si la publicidad te "incita" a consumir ciertos productos que presenta como "sanos" pero cuyo etiquetado deberías interpretar como no recomendable para tu salud entonces igual la culpa no la tiene la industria sino tu que te dejas convencer por que quieres consumirlo diga lo que diga el etiquetado de ingredientes.
Yo no soy consumidor habitual de procesados y ultraprocesados pero si mañana me apetece comer una pizza con su ketchup o salsa barbacoa cargada de azucar y su masa cargada de sal, acompañado de un doble batido pues me lo como y punto y no necesito al gobierno regulando cuanta sal o azucar voy a tomar en esa comida. Eso si, no me zampo ese menu semanalmente, ni mensualmente tampoco. Es algo ocasional y mi salud me lo permite. Soy responsable y elijo que y como consumir.
Usuario desactivado
Las recomendaciones de la OMS también dicen que con un filetito de cerdo a la semana ya estamos cumplidos con la carne, y dos ya es un derroche.
Pues no. Al final, va a pasar como con el resto: tendremos que añadirle sal al pan como lo hacemos a la mantequilla, pediremos las hamburguesas dobles o triples porque cada vez son más chicas, y le añadiremos azúcar al cacao porque cada vez tiene menos azúcar.
pedroteapple70
Que se dejen de tonterías con la sal y que limiten el azúcar. Eso sí que malo, más que la sal y la grasa. Meten azúcar a todo y en cantidades industriales.
1coma21gigovatios
Todo lo que comemos está procesado, ultraprocesado como la leche. Las frutas y verduras tienen pesticidas. Toda la bollería tiene cantidades desmedidas de azúcar.
Sr_Truhan
Como le gusta a este gobierno imponer sus ideas, decirnos qué debemos o no comer, lo que debemos o no pensar y lo que se puede considerar o no socialmente aceptable. Y por supuesto, solo es correcto y admisible lo que vaya en la línea de su corriente de pensamiento, en cuanto te salgas de ahí ya eres facha, intransigente y un peligro para la democracia (que hay más democrático que descalificar y censurar a todo aquel que no piensa igual que tu, ¿verdad?).
Y por supuesto, ante la duda, le subimos impuestos a todo lo que no nos gusta; las bebidas azucaradas (incluidos los zumos, sí, eso que bebíamos de niños de TODA LA VIDA, y que por lo visto debe ser veneno puro), al pan (puro veneno también, ¿que hay más peligroso para la salud que el pan? ¿A quién se le ocurrirá comer eso?), a la gasolina (puro lujo, es sabido que solo los millonarios usan coche y solo para su disfrute, las mercancías, ambulancias, transportes varios, etc... llegan a su destino por arte de magia), a las carreteras que son "deficitarias" (total solo se recauda en impuestos directos al automóvil y a los combustibles DIEZ VECES MÁS que el presupuesto total destinado a carreteras de todo el estado), etc, etc... podría seguir todo el día.
Pero, eh, que hay que pagar la sanidad y las pensiones (menos del 50% en total de los PGE) y que los ciudadanos en general somos TONTOS y absolutamente inútiles y no sabemos lo que podemos o no. comer o lo que nos conviene más o menos en nuestra alimentación. Hay que coaccionarnos y prohibirnos, como a niños pequeños, para que no comamos lo que no nos conviene....
Y no os olvidéis, hay que hacer un "cordón sanitario" a VOX, que son turbo-fascistas, malos malísimos, no representan a nadie (solo a un 20% aproximadamente de la población, casi nada) y son antidemocráticos, y aplaudir las maravillosas medidas de este gobierno, que defiende al trabajador (los camioneros, conductores en general, los que pagamos la luz, los que cobran un sueldo, los autónomos, etc, etc, no son trabajadores, son FACHAS TODOS y son ricos, porque este gobierno solo le iba a subir impuestos a los ricos....) y es defensor a ultranza de la democracia (siempre y cuando esta coincida con sus ideas, sino ya eres fascista, aunque tu no lo sepas).
A seguir aplaudiendo, focas, en breve nos tendrán comiendo insectos, vistiendo harapos y desplazándonos andando o en bicicleta, como el la añorada China comunista mientras ellos sigan viviendo a todo trapo, con sus trajes de marca, sus coches oficiales y sus jets privados, y vosotros seguiréis aplaudiéndolos y justificándolos, porque son de los "vuestros".
Si es que no se puede ser más tonto...
pathan64
El Gobierno mete sus narices en todo. Se acabó comer pan de verdad. Ahora será "saludable".
samuelafernandez
Esta medida es del gobierno de 2019, y el plazo máximo para implantar la norma acaba ahora, lo pone bien claro en la noticia, pero aquí la gente matándose porque es una norma restrictiva social comunista del
gobierno bolivariano. Así nos va…
Virutas
Para soso este gobierno. Ni comer tranquilos nos van a dejar...
Usuario desactivado
Más que la sal, lo que tendrían que limitar es el azúcar que le echan a todo y luego nos preguntamos cómo es posible que cada vez haya mas obesidad y diabetes.
Aunque más que prohibir, soy partidario de que se pongan las cosas bien claras y grandes en el embase.
Otra cosa que habría que regular es a lo que se le puede llamar chocolate, porque hay alguna marca que vende cosas con chocolate y el sabor a cacao no se lo encuentras por ninguna parte, es básicamente azúcar negra.
jlmartin
Pues le echare un poco mas de sal al pan y listos, a mi el pan, de siempre, me ha parecido soso y siempre le echo un poco de sal, así que le echare un poco mas, llevo de siempre echando un poco de sal al pan, si bien es cierto que tampoco soy un gran consumidor de pan, y no tengo ni hipertensión(mas bien todo lo contrario) ni enfermedades coronarias.
La conclusión de la OMS es que vivir mata.
psicoactivo
ya están los bots derexones con la bilis a tope...
ahora resulta que van a prohibir la sal...
ya nos prohibieron la carne ...
tb las bebidas azucaradas....
ah, no!! que al final no prohíben...eso es lo q cuenta Faxascal y sus acólitos
están informando, legislando o grabando sobre productos que se sabe (cientificamente) que son malos para la salud si no se consumen con precaución y/o conocimiento...no están prohibiendo y puedes seguir comiendo lo que quieras...
en este caso del pan...hay una norma o ley que dice la cantidad de sal que debe llevar por cada kg de masa y parece ser que nos cuelan un extra...pero que malos son estos socialcomunistas
celduques.ulrikvonca
Como el pan deje de saber más o menos a lo que lleva sabiendo toda mi vida... yo corto cabezas.
petote
Claro que sí! Este es precisamente el mejor momento para preocuparnos por la cantidad de sal que tiene el pan. Ya puestos, que regularicen la cantidad de capas que debe tener el papel higiénico.
elpeina
En vez de educar lo mejor es prohibir, que grande es este gobierno tan majo. Ahora el pan va a estar malo de sabor y las panaderías venderán menos
Busindre
Todo es cuestión de educación. Una asignatura de medicina y salud, no estaría mal en los colegios.
Por otro lado, no salgo de mi asombro cómo personas con tratamiento contra la HTA, añaden sal a sus comidas, argumentando que como ya se toman la pastilla, pueden seguir comiendo como siempre.
vanaxmi
Me parece una buena idea, pero vamos, que con el tabaco no se mete el gobierno sea del color que sea.
¿Será por la burrada de pasta que saca en impuestos?, por sugerir algo...
nicolashurtadofernandez
Tanta gente que llora por esto. Un salero y listo!. Otros critican que el gobierno se mete en sus vidas.. claro si el gobierno tiene que asumir millones y millones de todos, en salud pública por enfermedades totalmente evitables (obesidad, díabetes, hipertensión.....y un largo etc). El que quiera comer cantidades excesivas de sal, azúcar..., fumarse una cajetilla diaria, que se pase a un sistema 100% privado de salud y que después de viejo (o quizás no tanto) no ande llorando por atención médica pública.
iln
Llevamos tanto tiempo obedeciendo con "es por tu salud" que se nos ha olvidado lo que es la libertad y el libre albedrio. Eso va a mas.
No se a que se debe tanta tonteria con la "mayoria de edad" a los 18 años, si realmente nunca somos mayores y siempre tenemos que obedecer a papa.