El consorcio European Technology Platform for High Performance Computing es el responsable de una nueva iniciativa llamada Mont-Blanc que trata de crear un supercomputador a base de combinar la potencia de procesadores móviles.
La idea nació en el Barcelona Supercomputing Center, uno de los lugares más espectaculares en los que se han puesto en marcha instalaciones dedicadas a la supercomputación. La iniciativa cuenta con 22 millones de inversión hasta septiembre de 2016, y ya ha desvelado un primer prototipo de servidor blade que contiene procesadores Samsung Exynos 5.
El consumo de este tipo de sistemas sería entre 1/15 y 1/13 parte de la energía que se consume normalmente en procesadores utilizados en sistemas de computación, aunque claro, su potencia no será tampoco comparable. Jean-François Lavignon, presidente de esta plataforma, aclaraba que los procesadores x86 y su combinación con modernas GPUs seguirán dominando la famosa lista Top500, pero la supercomputación ARM podría ser una "sabia inversión" de cara al futuro.
Hace tiempo que estamos viendo cómo más y más fabricantes de servidores comienzan a diseñar y producir máquinas basadas en micros ARM, y ahora ese salto parece también dirigido a tareas más exigentes. Es más que probable que el primer supercomputador exaflop llegue de la mano de micros x86 -de momento nos movemos en rendimientos por debajo de los petaflops- pero puede que los procesadores ARM planteen una alternativa de futuro notablemente interesante.
Vía | IEEE Spectrum
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