Estamos rodeados de radiaciones, desde la que se reciben en la radio que escuchamos, la del microondas, la conectividad WiFi, la señal de televisión … ¿me detengo ya? Pero sin duda, si en los últimos años un tipo de radiación ha estado en el ojo del huracán, ésta ha sido la de las antenas de telefonía y los teléfonos en general. Hoy ha saltado la alarma con el anuncio de un grupo de expertos de la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC) que ha puesto el foco en el tipo de radiación electromagnética que soportamos por el uso de los teléfonos móviles y los tumores cancerígenos, especialmente uno cerebral, los gliomas.
Este organismo dependiente de la OMS, tras una semana debatiendo en Francia y estudiando informes antiguos, ha colocado a la radiación electromagnética dentro del grupo 2B de productos con potencial cancerígeno. En ese mismo grupo están por ejemplo el café o las fibras acrílicas, y se trata de productos “posiblemente” cancerígenos y sobre los que se debe seguir investigando.
Ni confirman ni desmienten
El simple hecho de que un grupo de trabajo relacionado con la OMS haya dado este paso es significativo, pero hay que recoger la información con cautela pues el informe solo indica que puede existir cierto riesgo de cáncer pero afirman que todavía tienen que analizar la relación. No confirman pues que el uso de teléfonos móviles aumenten la posibilidad de padecer algún tipo de cáncer pero tampoco lo desmienten.
Los informes y experiencias en los que se han basado para elaborar este comunicado no abarcan un periodo suficiente para sacar conclusiones, y los resultados no se excluye que sean provocados por otros productos, pero afirman que los datos son suficientes para, al menos, estar alerta y que se siga investigando y estudiando esos efectos en humanos.
En Xatakamóvil | La OMS cree posible que el uso de móviles pueda estar relacionado con ciertos tipos de cáncer.
Más información | PDF IARC.
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