Este fabricante se reserva fuerzas para la futura presentación del LG G4: no lo veremos en el Mobile World Congress 2015, pero sí que estarán allí los nuevos integrantes de sus gamas de entrada y gama media, cuatro smartphones que heredan algunas características singulares de los gama alta.
LG los presentó el pasado lunes: se tratan de los nuevos LG Joy, Spirit, Leon y Magna, cuatro productos diferenciados tanto por las diagonales de pantalla (4'3, 4'5, 4'7 y 5) como por las especificaciones hardware. Hemos tenido la oportunidad de conocerlos en directo, y os ofrecemos una primera toma de contacto con esta renovación de esas gamas.
Gama media con sabor a gama de entrada
Sin conocer los precios definitivos de los productos no podemos de momento valorar si la relación precio/prestaciones es la que podríamos esperar de un dispositivo de uno u otro grupo, pero desde luego por especificaciones todos los miembros de esta nueva hornada de terminales de LG tienen un hardware que tildaríamos de modesto.
En LG no obstante hacen bien el trabajo de tratar de aportar valor adicional a estos dispositivos: cada modelo va mejorando de forma clara al anterior tanto en su sensación en mano como en su hardware. El peor parado es desde luego es el LG Joy, un producto muy básico que ni siquiera es capaz de integrar Lollipop -la excepción del grupo- y que no debería tener un precio superior a los 100 euros.
A partir de ahí las cosas mejoran: los Leon de 4,5 pulgadas ya integran la tradicional botonera trasera de LG, mientras que los Spirit de 4,7 pulgadas suman a esa botonera un perfil curvo para su pantalla 720p. No nos conformaríamos con menos de estos dispositivos salvo que el precio de los Leon sea realmente bajo. Por último están los Magna, que son una versión prácticamente idéntica a los anteriores pero con pantalla de 5 pulgadas. Los Leon y los Spirit, por cierto, contarán con versiones 3G y LTE, mientras que el Magna de momento solo estará disponible en 3G (como el Joy) y no queda claro si ofrecerá también versión 4G.
Mejoras también en el software
Una de las novedades de estos dispositivos es su lanzamiento con Android 5.0 Lollipop salvo en el citado caso del LG Joy. Aquí LG ha adaptado varias de las mejoras que han debutado con el LG G3 por ejemplo: es el caso de la toma de selfies con un gesto de la mano, o de la llamada "Vista rápida", una función que permite que con el teléfono bloqueado mantengamos un dedo sobre la pantalla un instante para luego arrastrarlo hacia abajo, lo que hará que aparezca una vista rápida de la hora y las notificaciones pendientes.
En mano la sensación del policarbonato con ese acabado metálico simulado -menos efectivo que en el G3, desde luego- es buena, sobre todo si contamos con uno de los modelos con esa ligera pero apreciable curva en el contorno. Todos estos dispositivos son gruesos para los cánones actuales -solo el Spirit baja hasta los 9,9 milímetros- y esos recortes hardware también se notan en la calidad de las pantallas, que en estas primeras impresiones nos han dejado la sensación de tener unos colores algo pálidos que no las hacen destacar especialmente.
A falta de un análisis más prolongado y sobre todo de conocer los precios a los que LG pretende comercializar dichos terminales, la conclusión es definitiva: todos estos modelos compiten con propuestas cada vez más ambiciosas en la gama de entrada. Aquí LG tiene algunos argumentos a su favor: la botonera trasera, esa curva de los Spirit y los Magna y algunas mejoras software tratarán de hacer válida la propuesta de una LG que probablemente será eclipsada en este MWC por los nuevos terminales franquicia que presentarán algunos de sus rivales.
Más información | LG
En Xataka Móvil | LG no puede esperar al MWC 2015 y nos enseña su nueva gama media: Joy, Spirit, Leon y Magna
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