Si has hecho clic en este artículo, es porque te acabas de comprar un coche híbrido por primera vez o (más probablemente) estás pensando en comprarlo. Ya nos han dejado claro que el futuro está en el coche eléctrico, pero quizás no todo el mundo puede dar el salto aún. En este sentido, el coche híbrido es una excelente puerta de entrada para conocer los beneficios de la electrificación en los vehículos.
Las cifras no engañan, y las cifras de ANFAC muestran un crecimiento del mercado de los electrificados de entre el 50% y el 70% en los últimos meses. Quizás a nosotros nos falta conocer algunas claves de lo que supone conducir un vehículo híbrido. Renault cuenta con una magnífica sección de FAQs y un completísimo glosario, pero vamos a tratar de resolver las principales dudas en el siguiente artículo.
Tipos de híbridos según su nivel de electrificación
Un vehículo híbrido es aquel que cuenta con dos formas de tracción, la térmica (combustibles) y la eléctrica, aunque (como veremos más adelante) podrá tener más de dos motores. Teniendo esto claro, podemos diferenciar tipos de híbridos, en función del nivel de electrificación o tecnología que usan:
- Híbrido ligero, microhíbrido o mild hybrid (MHEV): vehículo térmico que cuenta con un pequeño motor eléctrico que le asiste en fases de arranque y/o aceleración, y alimentado a su vez con una pequeña batería de tracción de entre 12 a 48 V.
- Híbrido puro, no-enchufable o hybrid electric vehicle (HEV): vehículo híbrido cuyos motores (térmicos y eléctricos) pueden funcionar de manera conjunta y/o por separado. La batería de tracción que alimenta el motor eléctrico se recarga durante la marcha, sin necesidad de enchufarlo a la red eléctrica. También son conocidos como híbridos auto-recargables.
- Híbrido enchufable o plug-in hybrid electric vehicle (PHEV): similar al anterior, pero con una batería de tracción de mayor capacidad que, además, podemos cargar enchufándolo a la red eléctrica.
Todos los tipos de híbridos tienen sus ventajas y se adaptan a diferentes tipos de necesidades. Actualmente Renault cuenta con una de las ofertas electrificadas más amplias del mercado, en las que destaca su gama E-Tech full hybrid (híbridos puros) por versatilidad y competitividad. Además, sirven como escalón previo a la tecnología E-Tech 100% eléctrica, en la que Renault fue pionera en el mercado.
Tipos de híbridos según la configuración de sus motores
- Híbrido en serie: la única función del motor de combustión es cargar la batería, careciendo de conexión con las ruedas. Es el motor eléctrico el encargado de mover el vehículo.
- Híbrido en paralelo: el principal encargado de mover el vehículo es el motor de combustión, ayudado por el motor eléctrico.
- Híbrido serie-paralelo: gracias a incorporar un motor eléctrico adicional, el vehículo puede funcionar en serie o en paralelo, maximizando la eficiencia en todo momento. Esta es la tecnología que utiliza Renault en su gama E-Tech full hybrid.
Cómo se conduce un coche híbrido
Si tantas configuraciones y funciones nos abruman, no hay nada que temer: lo normal es que sea el propio vehículo quien se encargue de gestionar sus motores automáticamente. Algunos vehículos híbridos (especialmente los enchufables) sí ofrecen la opción de hacerlo de forma manual, y escoger nosotros nuestra opción preferida. Ojo, porque nuestro criterio no siempre es el mejor.
En el caso de la tecnología E-Tech full hybrid de Renault, son una caja de cambios multimodo inteligente y un sistema de gestión de energía (heredada de la Fórmula 1) los que determinan en todo momento el funcionamiento más eficiente según la marcha en cada situación. Además, la función de conducción híbrida predictiva optimiza la batería según el trayecto que estemos realizando. Así, los híbridos de Renault arrancan siempre con el motor eléctrico, y pueden circular en ciudad de esta forma hasta el 80% del tiempo.
Si el conductor necesita la máxima potencia disponible, el vehículo combina ambos motores de forma automática para conseguir un rendimiento excepcional. Tan solo debemos acelerar y frenar según nuestras necesidades, la tecnología se encarga del resto.
Cómo se recarga un coche híbrido
Los coches híbridos se recargan durante la circulación, gracias a la energía aportada por el motor térmico, y sobre todo a la famosa “frenada regenerativa”. Este proceso se produce tanto en fase de desaceleración (cuando levantamos el pie del acelerador) como cuando frenamos. El motor eléctrico actúa como generador, recuperando la energía cinética para cargar la batería.
Para aprovechar al máximo la frenada regenerativa, es recomendable realizar una conducción suave y sin brusquedades, alargando en lo posible tanto la fase de desaceleración y de frenado. El sistema regenerativo de la tecnología E-Tech de Renault es el que consigue la mejor relación entre consumo y prestaciones del mercado, aprovechando toda su experiencia en el desarrollo del monoplaza híbrido en la Fórmula 1. Tanto los híbridos puros (HEV) como los enchufables (PHEV) utilizan este sistema.
En cualquier caso, no tenemos que preocuparnos de quedarnos sin batería, un coche híbrido puede circular como uno térmico de toda la vida. Sí tendremos que vigilar el nivel de combustible, pues un híbrido no puede circular con el tanque vacío. En este sentido, los híbridos puros no cambiarán nuestros hábitos diarios, aunque sí nos harán disfrutar de la experiencia de conducción de los eléctricos.
Cuánto se ahorra con un coche híbrido
Utilizar un coche híbrido nos supondrá un evidente ahorro en consumo de combustible. Un híbrido puro común puede reducir el consumo en un 25-30% respecto a un térmico equivalente, aunque uno con tecnología E-Tech full hybrid puede alcanzar hasta el 40% de ahorro en combustible. En el caso de los híbridos enchufables, el ahorro puede llegar hasta el 75% si cargamos regularmente la batería en un punto de carga. En nuestro bolsillo, notaremos más este ahorro cuanto más tengamos que coger el coche.
Un híbrido puro común puede reducir el consumo en un 25-30% respecto a un térmico equivalente, aunque uno con tecnología E-Tech full hybrid puede alcanzar hasta el 40% de ahorro en combustible
También ahorraremos gracias al menor coste de mantenimiento que requieren los híbridos. El motor térmico no requiere de un cuidado distinto al de un coche común, aunque sus piezas sufrirán menos desgaste y tendrán una mayor vida útil. Por su parte, el motor eléctrico es técnicamente más sencillo, con menos líquidos y piezas móviles para su funcionamiento. En cuanto a la batería de tracción, no requiere de ninguna intervención, y suele contar con garantías ampliadas; la de Renault es de las más prolongadas, de ocho años o 160.000 kilómetros.
Como vemos, son muchas las ventajas que nos puede ofrecer un coche híbrido, y el considerable ahorro en combustible y mantenimiento compensa el mayor precio que tienen este tipo de vehículos. Pero no olvidemos que el verdadero fin del coche híbrido es acercarnos a la electrificación total de la movilidad, esto es, reducir las emisiones contaminantes y alcanzar una movilidad sostenible en el largo plazo.