Las gafas de realidad virtual de Oculus Rift han sido tradicionalmente asociadas al mundo de los videojuegos, pero sus aplicaciones pueden ir más allá. Lo demuestra el proyecto del ejército noruego, que está experimentando con el uso de este dispositivo para conducir sus tanques.
El sistema consta de cuatro cámaras con objetivos especiales que ofrecen una vista de 185 grados y que colocadas en la parte delantera y trasera del tanque permiten obtener una visión de 360 grados. Esas cámaras están conectadas a Oculus Rift, y el seguimiento del movimiento de estas gafas permiten que el operador tenga una perspectiva global de su entorno aun estando dentro del tanque.
Tanques 2.0
La idea es evitar que el operador -que no tiene por qué ser el piloto- con las Oculus Rift pueda gestionar situaciones peligrosas sin tener que abrir la escotilla superior del tanque. Los propios responsables del proyecto comentaban cómo la idea se ha heredado de los propios videojuegos:
Con nuestro software, se pueden añadir elementos a los que estamos acostumbrados en los videojuegos. Podremos tener un mapa, mostrar la orientación, cuánta inclinación hay, la velocidad... esto es muy útil cuando tienes que tener cerradas todas las escotillas.
No todo son ventajas, no obstante. A la sensación de vértigo producida por Oculus Rift se une el hecho de que la imagen "es más estresante para los ojos, ya que es una imagen sintética". La idea, comentaba uno de los responsables del Combat Lab encargado del proyecto, es la de no usarlo en trayectos largos, en los que se conduce mirando por la escotilla, como tradicionalmente, porque "es más natural para ti y no te cansarás tan rápido".
El sistema ha sido diseñado por la empresa Making View y utiliza componentes tradicionales, como un PC, cámaras económicas y el propio equipo Oculus Rift. Y por lo que parece, tanto sus creadores como el ejército son optimistas respecto al futuro. "Pronto tendremos gafas lo suficientemente buenas como para convertir esto en un concepto operacional".
Oculus Rift más allá de los videojuegos
Esta es una prueba perfecta de cómo Oculus Rift quiere salirse también del tradicional encasillamiento de los videojuegos para aportar soluciones en muchos otros campos. Lo afirmaba Mark Zuckerberg, que en su reciente conferencia ya hablaba del futuro de Oculus tras la adquisición de la empresa.
Según Zuckerberg, "tras los juegos, haremos que Oculus sea una plataforma para muchas otras experiencias. Imagínate contemplar un juego como en una grada, estudiar en una clase con estudiantes y profesores de todo el mundo o tener una consulta con el médico cara a cara... simplemente poniéndote las gafas en tu casa".
La aplicación de la realidad virtual a otros campos es de hecho algo que se viene haciendo desde hace tiempo, pero Oculus Rift ha vuelto a poner de manifiesto la versatilidad de un campo que podría aplicarse, como ya hemos indicado en otras ocasiones, en proyectos ambiciosos como el que están desarrollando en la NASA para controlar sus robots en misiones espaciales.
Los sistemas de realidad virtual también se pueden utilizar para el entrenamiento de pacientes con prótesis de alguno de sus miembros, asistir al parto o servir para el control de drones especializados. El campo del cine parece también otro de los segmentos en los que los desarrolladores de Oculus quieren plantar su semilla, y puede que pronto podamos disfrutar de experiencias de cine mucho más inmersivas. Las posibilidades parecen casi ilimitadas.
Vía | CNET
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