Llevamos años desarrollando cámaras y aún no hemos sido capaces de imitar todas las extraordinarias funciones de un ojo humano. La lista de obstáculos para crear un auténtico ojo electrónico se hace hoy un poco más corta gracias a una Investigación del Instituto tecnológico de Ingeniería Mecánica de Georgia.
El desarrollo, dirigido por Joshua Shultz y Jon Ueda, trataba de crear un sistema motorizado para que una cámara fuera capaz de moverse con la misma rapidez y agilidad que un ojo humano.
La diferencia de esta investigación respecto a otras ateriores es que hasta ahora se había intentado motorizar la cámara a base de microservos. Shultz y Ueda, en cambio, han utilizado tiras de material cerámico piezoeléctrico que reaccionan contrayéndose ante los impulsos eléctricos exactamente igual que cómo lo haría un músculo biológico.
Este concepto ‘celular’ de los mecanismos que mueven un sensor es de especial interés para el desarrollo de cámaras de alta velocidad y precisión con las que dotar a robots que desempeñan tareas especialmente delicadas o complicadas, como robots cirujanos o autómatas de cadenas de montaje.
Vía | Science Blog
Más información | Georgia Tech
Ver 7 comentarios