En junio de 2016 hablábamos de GPD WIN, un curioso mini-ordenador de bolsillo basado en Windows 10 y con controles para videojuegos. Aquel proyecto vuelve ahora a resurgir, pero lo hace con una segunda versión notablemente más potente y prometedora.
El llamado GPD WIN 2 estará también basado en Windows 10 y adopta ese formato concha con los controles para videojuegos y el teclado QWERTY, pero lo hace con un hardware interno renovado que permitirá jugar a títulos bastante exigentes sin aparentes problemas. El próximo 15 de enero se iniciará la campaña de financiación colectiva en IndieGogo que determinará si el producto acaba siendo una realidad o no.
Especificaciones prometedoras
En esa hoha de especificaciones de la GPD WIN 2 destaca la pantalla de 6 pulgadas en formato 16:9 y con resolución 720p que está protegida por un cristal Gorilla Glass 4, pero el verdadero protagonista es el procesador, un Intel Core m3-7Y30 al que acompañan 8 GB de RAM y 128 GB de capacidad en una tarjeta M.2 que además podremos sustituir.
La consola cuenta con dos nuevos sticks analógicos con soporte de vibración desarrollados por ALPS Japan, mientras que la batería está formada por dos unidades de 4.900 mAh que según el fabricante permiten usar esta consola entre 6 y 8 horas, aunque no se especifica si es un uso intensivo o un uso menos exigente de la consola.
La conectividad también está bien surtida, ya que contamos con un conector USB-C, toma de auriculares, un conector USB 3.0, una ranura para tarjetas Micro SD y un conector Micro HDMI.
Los juegos de Windows en formato portátil
Los responsables de la consola han publicado varios vídeos y pruebas del prototipo que tienen en funcionamiento. En esos vídeos se puede ver cómo es posible usar esta consola para jugar sin problemas a títulos como 'GTA5', 'Bayonetta' o 'Need for Speed: Rivals'.
A esos vídeos les acompañan varias pruebas de rendimiento que revelan como ese nuevo procesador —en el que se incluye una GPU Intel HD Graphics 615— se comporta realmente bien en varios juegos a esa resolución 720p, aunque no se dan demasiado datos sobre le nivel de detalle utilizados para evaluar estos juegos.
Los responsables de la GPD WIN 2 destacan la capacidad no solo de ejecutar aplicaciones y juegos nativos de Windows 10, sino también emuladores de varias consolas como la PSP ,la NeoGeo o la Nintendo 64 sin aparentes problemas.
La consola, eso sí, no estará disponible a corto plazo: sus desarrolladores pondrán en marcha una campaña de crowdfunding el próximo 15 de enero que pondrá la consola a un precio de 599 dólares, 100 dólares más barato de su precio en tiendas cuando aparezca finalmente (si la campaña tiene éxito, claro). Si todo va bien, las primeras consolas llegarán a sus compradores en el mes de agosto de 2018.
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