Había rumores de que Microsoft ya estaba preparando una o varias competidoras en el terreno de las consolas de próxima generación, y que a su ambicioso Project Scorpio que rivalizará con el Project Neo de Sony se le unirían modelos más modestos. Una de ellas parece tener ya nombre y diseño definitivo.
La nueva Xbox One S (por "Slim") podría ser anunciada en la charla que Microsoft prepara para mañana en el E3, y las primeras imágenes de la consola ya se han filtrado. Más delgada, más refinada y potente, será la consola que dará por primera vez soporte claro a los contenidos 4k/UHD. Eso sí, de juegos 4K nada.
Una Xbox One más refinada, pero no especialmente ambiciosa
Así lo han indicado fuentes cercanas a Microsoft con las que se han puesto en contacto en Ars: la Xbox One S presentará su interfaz en 4K si el usuario tiene una TV que soporte esa resolución, y aunque también ofrecerá soporte para contenidos en streaming con esa calidad, no dispondrá del hardware necesario para poder reproducir juegos 4K.
Parece que otra de las mejoras que se anunciarán es el soporte de la tecnología HDR que junto a las 4K es la gran novedad de los televisores de última generación, y la consola contará además con un soporte para su colocación en vertical, y un mando de control más "refinado".
Todo apunta por tanto a que nos encontraremos ante una versión mejorada de la Xbox One actual que, eso sí, no será la apuesta más ambiciosa de la firma en este terreno. Parece que este modelo estará disponible para reserva muy pronto, así que todo queda abierto para una consola aún más potente para 2017 como se rumoreaba.
Vía | Ars Technica
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