Este monitor pertenece a una especie muy poco frecuente. Y es que en la liga en la que compite apenas participan unos pocos dispositivos. Para él la ergonomía y la polivalencia lo son todo, lo que lo coloca como una opción diferente. En cierto modo, incluso, singular. De hecho, el único monitor que hemos analizado y que se le parece un poco es el Space Monitor 32" 4K UHD de Samsung, y no es tan flexible como este UltraFine Ergo de LG.
Cuando pruebo un monitor suelo comenzar mi análisis diciendo que su corazón es su panel, pero en esta ocasión esta afirmación no es del todo precisa. La matriz LCD IPS de 31,5 pulgadas y con resolución 4K UHD de este dispositivo condiciona profundamente su calidad de imagen, pero no es el componente que lo hace diferente. Su apuesta es otra, y en ella los elementos que marcan la diferencia son una peana y una rótula muy poco convencionales.
De hecho, gracias a ellas pone en nuestras manos una flexibilidad y unas posibilidades que lo alejan diametralmente de la mayor parte de los monitores para ofimática y creación de contenidos que podemos encontrar en el mercado. Podemos utilizarlo para jugar, pero en este escenario de uso no se siente del todo cómodo porque está limitado por un refresco de 60 Hz y un tiempo de respuesta de 5 ms, entre otros factores. Lo suyo es la productividad. Ahí es donde se siente cómodo. Donde pretende aportar valor. Veamos si lo consigue.
LG UltraFine Ergo 32UN88A: especificaciones técnicas
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características |
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panel |
LCD IPS 4K UHD de 31,5 pulgadas, 10 bits, 60 Hz y relación de aspecto 16:9 |
resolución |
3840 x 2160 puntos |
retroiluminación |
LED periférica con atenuación global |
brillo típico |
350 nits |
brillo máximo |
380 nits |
cobertura dci-p3 |
95% |
contraste nativo |
1000:1 |
tiempo de respuesta |
5 ms |
ángulos de visión |
178º / 178º |
hdr10 |
Sí |
amd freesync |
Sí |
conectividad |
2 x HDMI 2.0, 1 x DisplayPort 1.4, 1 x jack de 3,5 mm, 2 x USB 3.0 y 1 x USB-C |
sonido |
Estéreo Potencia de salida total: 5 vatios |
consumo típico |
55 vatios |
consumo en reposo |
0,5 vatios |
dimensiones |
714,3 x 641,1 x 406,8 mm (con peana) |
peso |
10,3 kg (con peana) |
precio |
LG 32UN880-B - Monitor UHD polivalente (Panel IPS: 3840 x 2160p, 16:9, 350 CD/m², 1000:1, DCI-P3 > 95%, 60 Hz, 5 ms), Negro
Así se sube la apuesta en términos de ergonomía y polivalencia
Antes de meternos en harina e indagar en las peculiaridades de este monitor merece la pena que dediquemos un momento a repasar algunas de las características que condicionan con más claridad su rendimiento. Los paneles IPS destacan por resolver la colorimetría con mucha suficiencia, y también por entregarnos unos ángulos de visión amplios. Sin embargo, su relación de contraste nativo suele ser modesta, y este monitor respeta a pies juntillas estas premisas, como podemos ver en las especificaciones que hemos recogido en la tabla que publicamos encima de este párrafo.
Por otro lado, su capacidad de entrega de brillo máxima también es moderada (según LG alcanza picos de 380 nits), por lo que no podemos esperar que nos ofrezca una experiencia sorprendente cuando trabajamos con contenidos HDR. Sin embargo, a pesar de su modestia en este ámbito, y de que, como hemos visto, no es la opción más atractiva para jugar, está preparado para lidiar con contenidos HDR10 y es compatible con la tecnología de sincronización adaptativa FreeSync de AMD. En cualquier caso, estas no son ni muchos menos todas sus credenciales. Lo mejor aún está por llegar.
La fotografía que hemos elegido para la portada de este artículo desvela una de las bazas más claras que tiene este monitor: la posibilidad de rotar el panel sobre su eje central para colocarlo en vertical. En la mayor parte de los escenarios de uso es preferible mantenerlo en horizontal, pero hay ciertas tareas en las puede ser apetecible colocarlo en vertical, especialmente si trabajamos con varios monitores y nos interesa que al menos uno de ellos nos muestre la información de esta forma.
Esta opción puede ser interesante si nos dedicamos al desarrollo de aplicaciones, y también si necesitamos editar fotografías en vertical, entre otras posibilidades creativas en las que esta orientación del panel tiene sentido. Además, como veremos más adelante, actuar sobre la colocación del panel es pan comido y no requiere apenas ningún esfuerzo gracias a la peculiar y muy bien pensada rótula que LG ha puesto a punto para este monitor.
En la siguiente fotografía de detalle podemos ver que LG no ha descuidado el diseño de este monitor. Sus marcos son muy finos (el superior y los laterales miden solo 9 mm), y aunque el recinto está fabricado completamente en policarbonato no transmite la sensación de ser frágil. Le habría sentado bien tener el perfil de aluminio porque es un material más elegante, y este monitor no es barato, pero al menos el plástico que ha utilizado esta marca es de buena calidad.
Y, por fin, llegamos al que sin duda es uno de los elementos distintivos de este monitor: el brazo y la rótula que nos permiten ajustar la posición del panel con una flexibilidad impactante. De hecho, en este ámbito no tenemos prácticamente ninguna limitación. Podemos ajustar la altura de la pantalla con una amplitud de 130 mm; pivotar el panel 90 grados para colocarlo en vertical; inclinarlo +/-25 grados; girarlo en horizontal con una amplitud máxima de 280 grados; y, por último, acercarlo y alejarlo a la posición desde la que lo observamos con un recorrido máximo de 180 mm.
Su flexibilidad es sobresaliente, pero lo mejor de todo es que sus numerosas opciones de ajuste pueden tener un impacto beneficioso en nuestra salud desde un punto de vista ergonómico. Y es que no solo nos invitan a adoptar una postura confortable; también le permiten encajar como un guante tanto en nuestro escenario de uso habitual como en el espacio de trabajo en el que necesitamos colocarlo. Y es algo que hasta ahora muy pocos monitores nos proponen.
El sistema que han ideado los ingenieros de LG para garantizar que el monitor no se desestabilizará cuando estemos manipulando el panel para, por ejemplo, colocarlo en vertical o acercarlo a la posición desde la que lo observamos, es muy ingenioso. En la siguiente imagen podemos ver que han recurrido a una abrazadera metálica que lo fija con mucha firmeza al borde de la mesa en la que lo hemos colocado. Además, este sistema tiene una consecuencia muy positiva: el brazo ergonómico apenas ocupa espacio sobre nuestra mesa, por lo que esta solución es menos intrusiva que las peanas tradicionales.
Una vez que lo hemos instalado podemos colocar el cable de alimentación, el USB y el cable HDMI o DisplayPort que transporta la señal de vídeo en el interior del pilar metálico que sostiene el brazo ergonómico. De esta forma evitaremos que queden a la vista, y, de paso, nuestro escritorio estará más recogido. Eso sí, este monitor incorpora un transformador de alimentación voluminoso al que no nos queda más remedio que buscar un hueco en algún lugar (podéis verlo en la esquina inferior derecha de la siguiente fotografía).
Si nos ceñimos a la conectividad este monitor cumple, pero no impresiona. Incorpora dos entradas HDMI 2.0, una DisplayPort 1.4, dos puertos USB 3.0, una salida para auriculares en formato jack de 3,5 mm, y, por último, un puerto USB-C que es capaz de entregar hasta 60 vatios de potencia para permitirnos cargar la batería de otros dispositivos.
Habría sido una buena idea que contase con una entrada DisplayPort adicional, aunque la tentación de pedirle también que las entradas HDMI implementen la norma 2.1 se desvanece si tenemos en cuenta que este panel 4K UHD trabaja con una frecuencia de refresco de 60 Hz.
Ponemos a prueba su calidad de imagen
Para analizar la calidad de imagen de este monitor recurrí a Eizo Monitor Test, una herramienta gratuita muy útil no solo para comprobar cómo resuelve un dispositivo de visualización el color, sino también cuáles son sus ángulos de visión, si su nitidez está a la altura, si la retroiluminación es completamente homogénea o si tiene algún píxel defectuoso, entre otras prestaciones.
Como he mencionado unos párrafos más arriba, una de las principales bazas de los monitores que recurren a un panel IPS es lo bien que resuelven la colorimetría, y este UltraFine Ergo no nos ha defraudado en este ámbito. Según LG nos propone una cobertura del 95% del espacio de color DCI-P3, por lo que es una opción interesante para aquellos usuarios que necesitan utilizarlo para retoque fotográfico o edición de vídeo. Además, viene bien calibrado de fábrica, aunque es posible sacarle aún más partido recurriendo a una herramienta de calibración profesional.
La prueba de patrones geométricos de Eizo Monitor Test no debe poner en apuros a ningún monitor actual de cierta calidad, y esta propuesta de LG ha salido bien parada de este primer reto. Su elevada resolución (como hemos visto el panel es 4K UHD) le ayuda a resolver sin problema las curvas, y, además, apenas adolece de ruido de alta frecuencia, por lo que el primer punto se lo anota este monitor.
El panel de la unidad que hemos analizado no tiene ningún subpíxel defectuoso. Las imágenes a pantalla completa de los tres colores primarios son muy útiles para identificar los subpíxeles que permanecen fijos y no reproducen correctamente la componente de color que les corresponde, pero también son valiosas para percibir si el sistema de retroiluminación consigue distribuir la luz de una manera homogénea por todo el panel. E incluso para identificar si se producen fugas de luz. En el siguiente test pondremos a prueba con más precisión estos dos apartados.
El siguiente test expone el panel a un patrón uniforme de color gris, y confirma lo que hemos observado en la prueba anterior: la retroiluminación LED periférica con atenuación global de este monitor no consigue distribuir la luz de una forma absolutamente uniforme por todo el panel. Hay una ligera pérdida de intensidad en los márgenes de la matriz, así como una leve fuga de luz que se aprecia con más claridad en las esquinas.
No obstante, es algo que pasa desapercibido en un escenario de uso tradicional y que solo percibimos cuando recurrimos a una herramienta de análisis. De hecho, prácticamente todos los monitores IPS que hemos probado adolecen de fugas de luz de más o menos intensidad, sobre todo en las esquinas, debido a la forma en que estos paneles bloquean la luz que emite el sistema de retroiluminación.
Por otro lado, los ángulos de visión que nos propone este panel IPS son muy amplios. Según LG alcanzan los 178 grados tanto en la dimensión horizontal como en la vertical, y nuestras pruebas lo confirman. De hecho, esta es una de las bazas más claras que tienen los paneles IPS frente a los VA (los TN compiten en una liga inferior si nos ceñimos a su calidad de imagen global): el color apenas se degrada incluso aunque miremos la matriz desde un ángulo muy escorado.
Como he mencionado unos párrafos más arriba, este no es un monitor diseñado para entregarnos lo mejor de sí mismo con videojuegos. Su panel IPS tiene un tiempo de respuesta algo elevado (5 ms), y, además, trabaja a una frecuencia de refresco que se les puede quedar corta a los jugadores exigentes (60 Hz).
Es perfectamente válido para jugar ocasionalmente si nuestra exigencia en este escenario de uso es moderada, pero no es la mejor opción para los usuarios avanzados que juegan con frecuencia. Lo suyo, como hemos visto, es la productividad. Y también la creación de contenidos.
LG UltraFine Ergo 32UN88A: la opinión de Xataka
Este monitor es un soplo de aire fresco. En un mercado en el que abunda el «más de lo mismo» nos propone algo diferente que no encaja con todos los perfiles de uso, pero que sin lugar a dudas puede tener un impacto positivo en el día a día de muchos usuarios. Como hemos visto, su baza más contundente es lo bien que resuelve la ergonomía gracias a su flexibilidad a la hora de manipular la posición del panel.
También puntúa a su favor la precisión con la que ejecuta la colorimetría. No iguala el rendimiento en este ámbito de algunos monitores profesionales, como, por ejemplo, los de EIZO, pero en su rango de precio es una opción que merece la pena tener en cuenta para retoque fotográfico y edición de vídeo (sobre todo si tenemos la posibilidad de calibrarlo de una forma meticulosa).
En lo que se refiere a su construcción no tiene un acabado lujoso. Su recinto, como hemos visto, es íntegramente de policarbonato, pero, eso sí, el pilar y el brazo responsables de su ergonomía son muy robustos. Nada que objetar en este terreno. Por último, la retroiluminación LED periférica no consigue distribuir la luz de una forma completamente homogénea, pero apenas se nota si no utilizamos una herramienta de análisis de la calidad de imagen.
Como hemos comprobado a lo largo de este artículo, este monitor no es perfecto. Su acabado no impresiona, y su calidad de imagen, aunque es notable, tiene varias pequeñas carencias que la alejan del sobresaliente. Aun así, estas debilidades no empañan la que sin duda es su virtud más contundente: una ergonomía casi perfecta a la que resulta difícil renunciar una vez que la has probado.
LG 32UN880-B - Monitor UHD polivalente (Panel IPS: 3840 x 2160p, 16:9, 350 CD/m², 1000:1, DCI-P3 > 95%, 60 Hz, 5 ms), Negro
Este monitor ha sido cedido para este análisis por LG. Puedes consultar nuestra política de relaciones con las empresas.
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