Tras una espera larga, el primer fruto de la alianza entre Nokia y Microsoft, el Nokia Lumia 800, sale a la venta hoy. Y para que tengas toda la información que necesitas sobre este nuevo terminal con Windows Phone, aquí va el análisis de Xataka.
El Nokia Lumia 800 que hemos estado probando las dos últimas semanas se ha convertido en lo que Nokia buscaba sin lugar a dudas: un teléfono avanzado que da gusto tocar, mirar y usar.
Si a esos ingredientes puramente hardware, donde Nokia ha demostrado por qué es referente en este aspecto, le sumamos la gran experiencia de usuario de Windows Phone para el consumidor que quiere entrar en el mundo de los smartphones para las tareas más comunes (correo, redes sociales, navegación web, juegos, aplicaciones potentes …), hay futuro en esta alianza.
Nokia Lumia 800, diseño perfecto
Con el referente del Nokia N9 en el horizonte, el diseño del Nokia Lumia 800 ya sabíamos que no iba a pasar desapercibido. Tras las reticencias inicias por un peso y grosor que nos han parecido superiores a los que nos imaginábamos por las fotos de estudio de Nokia, ya puedo decoros que, para mi, el Nokia Lumia 800 es el teléfono mejor diseñado que ha pasado hasta ahora por mis manos.
Los argumentos que os pongo encima de la mesa son claros: compacto, buenos materiales, diseño de una sola pieza y la pantalla que está perfectamente integrada en el teléfono.
Cuando Nokia nos presentó hace dos semanas su Lumia 800, insistieron en que buscaban que este primer teléfono con Windows Phone llegara ser un icono, un modelo que la gente reconociera por la calle y en la mano de sus usuarios con solo mirar sus formas y diseño, al estilo del iPhone (aunque eso lo añado yo de mi cosecha). Y lo han conseguido.
El Nokia Lumia 800 está fabricado en plástico de excelente calidad, construido de una sola pieza, con una gran sensación de terminal de gama alta. Un detalle lo confirma: los modelos en colores no se limitan a una capa de pintura sobre la carcasa sino que toda ella está fabricada con un polímero de ese color.
Ese material plástico es muy agradable de tocar, y supone un acompañante perfecto de las formas redondeadas y suaves de la carcasa, lejos de aristas o ángulos rectos que nos atacan las manos en otros teléfonos de gama alta, por mucho materiales nobles que usen. El Nokia Lumia 800 es de esos teléfonos que mantienes en la mano girándolo y moviéndolo con los dedos … y disfrutas.
Con el Nokia Lumia 800 en la mano podemos decir que nos hemos encontrado con lo que esperábamos. Tan solo debemos decir que mirando las imágenes de estudio de los terminales cuando se presentaron, el teléfono parecía más delgado y ligero, y en mano, las primeras sensaciones nos dejaron con una idea diferente al menos en lo que respecta al peso, pero que ya os adelantamos que con el uso diario esa idea se esfumó. Esa sensación solo estaba justificada por lo compacto del terminal.
La perfección hubiera llegado de la mano de un grosor y peso menor, pero seguramente estaríamos hablando de un teléfono que costaría no pensar que es un prototipo del futuro.
Un detalle final en la parte del diseño se lo merece la funda que Nokia incluye en su Lumia 800. Aunque sería mejor definir este accesorio como una segunda piel porque realmente encaja como un guante en el teléfono – al principio puede resultar un poco complicada de poner y quitar precisamente por esa exactitud en las medidas – y cuesta distinguir un terminal con o sin ella puesta. La protección es básica pero suficiente para un teléfono que se ve robusto y resistente.
Mínimas y diferentes conexiones
Bastante relacionado con el apartado del diseño tenemos a las conexiones del Nokia Lumia 800. Como estás comprobando en las imágenes, son las justas.
En la parte superior encontramos dos trampillas de acceso curioso pero efectivo (nos parecen mejor opciones que las móviles de plástico) que da acceso al puerto microUSB para la recarga del teléfono (solo lleva este modo de recarga, aunque viene con adaptador de corriente en la caja) y mediante un pequeño deslizamiento, a la ranura para tarjeta microSIM. Sí, Nokia ha apostado por este tipo de tarjetas para su Lumia 800. Según nos dijeron en la presentación del teléfonos, es una apuesta decidida porque realmente creen que el mercado va en ese camino.
La situación en esa ranura especial de la tarjeta SIM no es casualidad. Nokia no la ha colocado ahí para evitar quitar la batería cuando queremos cambiar de tarjeta sino simplemente porque no hay batería que retirar.
Parte del diseño compacto y de una sola pieza lleva consigo sacrificar la posibilidad de que el usuario pueda cambiar la batería. Este es un aspecto controvertido pero creemos que una apuesta que se acabará imponiendo para beneficio del diseño y grosor de los futuros terminales.
Sobre los controles Windows Phone, están en la parte inferior de la carcasa, justo debajo de la pantalla, y son de tipo táctil, no físicos. Ya en el lateral encontramos los cuatro únicos botones físicos.
El reparto es curioso, con los dos superiores para el control de volumen, el de abajo del todo para la cámara de fotos y el que queda, como botón de encendido y bloqueo. Pero sin una sola señal que lo identifique como tal, lo que, nada más abrir el Nokia Lumia 800, supone un pequeño desconcierto para el consumidor que estará un buen rato pulsando botones en busca de aquel que encienda su flamante nuevo terminal. Lo decimos con conocimiento de causa.
Nokia Lumia 800, análisis en vídeo
A continuación puedes ver el análisis en vídeo del Nokia Lumia 800:
Nokia Lumia 800 y una pantalla a seguir
Con los competidores en iOS y Android presumiendo de pantalla (en calidad, en tamaño o en ambos aspectos como el Galaxy Nexus), el Nokia Lumia 800 ha optado por mantener unas dimensiones contenidas pero darle una calidad superior a la misma.
Con el mercado potencial que quiere abarcar Nokia con este terminal, las 3.7 pulgadas nos parecen un tamaño perfecto. Además, al no poder contar con más resolución que los 480×800 píxeles, de momento aumentar la diagonal no da tantos beneficios como pueda parecer.
Donde sí que ha buscado dar todo lo que tenía Nokia ha sido en el tipo de pantalla. El Nokia Lumia 800 cuenta con una pantalla de tipo AMOLED (contraste y colores vibrantes) pero reforzada por la tecnología ClearBlack, que le da una profundidad asombrosa, hasta el límite de que, con pantallas completamente negras, cuesta distinguir dónde acaba la pantalla.
Esa tecnología ClearBlack se combina de forma estupenda con una ligera curvatura de la pantalla, de tipo Gorilla Glass, consiguiendo una buena visualización en exteriores y evitando bastante los reflejos. Además, la curvatura facilita la integración de la pantalla en la carcasa y la sensación de una sola pieza en el Lumia 800.
Rendimiento, conectividad y batería
Con un procesador de 1.4 Ghz, 512 MB de RAM y Windows Phone 7 Mango en las entrañas, no teníamos ninguna duda del buen rendimiento que nos iba a dar el Nokia Lumia 800. No las tengas tú tampoco porque este teléfono de Nokia mueve con fluidez la interfaz Metro y se basta para lo que quieras hacer con el terminal.
En conectividad, debes saber que no puedes ampliar mediante tarjetas de memoria de ningún tipo la interna de 16 GB que nos ofrece el Lumia 800. La excusa es la de siempre: la nube. Con Skydrive y las redes sociales integradas en Windows Phone deberíamos tener suficiente y creo que así será para la inmensa mayoría de consumidores, aunque una ranura para microSD nunca viene mal.
Tampoco hay salida HDMI en este teléfono, así que los vídeos que grabemos con su cámara tendremos que traspasarlos de otra manera al televisor.
El Nokia Lumia 800 es un teléfono HSDPA Cat10 a 14.4 Mbps, con WiFi de tipo n, bluetooth 2.1 con aplicación sencilla para traspasar contactos entre teléfonos pero, sorpresa, todavía no es NFC. Desde Nokia aseguran que no hay un chip escondido que activarán posteriormente y que habrá que esperar a próximos modelos para conseguir la combinación de NFC y Windows Phone en teléfonos Nokia.
Durante las llamadas que hemos realizado de prueba, la comunicación ha sido muy satisfactoria, con sonido claro tanto en emisor como receptor, y sin problemas aparentes de cobertura.
Sobre la batería, te recordamos que estamos ante un teléfono de los llamados avanzados, y que por lo tanto, la autonomía es el valor más completo de analizar. En nuestras pruebas, con un uso habitual de correo, navegación, fotos y llamadas más bien esporádicas, el Nokia Lumia 800 ha llegado a casi 24 horas sin necesidad de ser recargado.
Hoy en día, en un smartphone, la cifra que creo que debe cumplir siempre es la de poder llegar al momento de la noche sin estar sufriendo las últimas horas.
Nokia Lumia y su cámara de fotos
Mucho se esperaba de la cámara del Nokia Lumia 800. Su sensor retroiluminado, la apertura f2.2 y la óptica Carl Zeiss conformaban sobre el papel una combinación muy jugosa que en nuestras pruebas ha cumplido cuando las condiciones de luz eran las adecuadas.
En ese caso se aprecia una buena definición y reproducción de colores, pero como podrás comprobar en la comparativa en la que la incluimos, cuando las condiciones se complican, la cámara del Nokia Lumia 800 sufre, y es un aspecto que deben mejorar. Teniendo a la mejor cámara – Nokia N8 – en casa, esperamos una mejora sustancial para próximos modelos.
Mañana analizaremos Windows Phone Mango bajo el cuerpo del Nokia Lumia 800
El teléfono ha sido cedido para la prueba por parte de Nokia España. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas
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