Se nos fue 2017, y lo hizo sin uno de los anuncios oficiales más esperados: Google no dijo ni pío de Fuchsia, el sistema operativo secreto que abandona el kernel Linux y que parece plantear una alternativa llamativa a Android y a Chrome OS.
Esta plataforma nos enseñó su aspecto hace unos meses, pero desde entonces ha habido muy pocas noticias al respecto. Ahora sabemos que Fuchsia ya se puede instalar en los nuevos Pixelbook, aunque esta opción está por ahora solo orientada a desarrolladores: el sistema operativo sigue estando muy verde.
Mucho camino por recorrer aún
Es curioso que Google haya decidido ofrecer esa opción a los desarrolladores, porque Fuchsia parecía destinado a móviles e incluso convertibles de gama de entrada en las capturas que habían aparecido de la interfaz.

De hecho su orientación inicial parecía la de productos embebidos, wearables y soluciones para la Internet de las Cosas, pero este descubrimiento parece plantear una versatilidad aún mayor. Google ha publicado la documentación para que los interesados puedan probar esta plataforma en esas máquinas, pero el proceso no es trivial.
De hecho instalar Fuchsia hace necesaria dos máquinas: un anfitrión y un invitado o dispositivo destino, y durante el proceso se usa una memoria USB que sufre un proceso "destructivo" (no sabemos si eso significa que se formatea y ya no se puede reutilizar nunca más).
Esa instalación da una buena idea de lo preliminar que sigue siendo todo en esta plataforma de la que Google sigue sin hacer comentarios y que quizás (o quizás no, ya vimos cómo acabó Andromeda) conozcamos oficialmente en la próxima conferencia para desarrolladores Google I/O de mayo de 2018.
Vía | The Verge
Más información | ChromeUnboxed
En Xataka | 5 razones para comprar un Pixelbook y otras 7 para no hacerlo
Ver 11 comentarios
11 comentarios
carlosgraph7
Al parecer apunta a un SO destinado a todo tipo de dispositivos y eso me encanta, quizá un día aparezca un SO digno de competir con Windows 10 en escritorio porque sabemos que Linux solo triunfa en servidores (entre otras cosas) y macOS tiene su cuota pero es un sistema cerrado a su nicho de usuarios como iOS.
Se que será un camino largo y pedregoso en ese apartado ya que me imagino que Microsoft no se quedara de brazos cruzados para no repetir lo que le pasó con Windows Phone.
cs122
Lo del proceso destructivo quiere decir que borrará completamente la memoria USB. Pero no pasa nada, al acabar la instalación volvéis a hacer la tabla de particiones, creáis una partición primaria en el formato que más os guste, y se queda como recién comprada.
Para los más "apañaos", se puede crear una copia de seguridad con dd o cualquier utilidad parecida.