Turquía se sube al carro de los vehículos eléctricos con dos coches y una marca propia: TOGG

La movilidad eléctrica está en boca de todos. Algunos de los principales fabricantes mundiales ya tienen sus apuestas en el mercado, sean coches 100% eléctricos o híbridos enchufables, por lo que no es de extrañar que otros países quieran subirse al mismo carro. Es el caso de Turquía, que no ha querido dejar pasar 2019 sin presentar TOGG, su marca nacional de coches eléctricos que dará sus primeros frutos, si todo va bien, en 2022.

TOGG (Türkiye’nin Otomobili Girişim Grubu) es, realmente, un consorcio de cinco empresas (Anadolu Group, BMC, Kok Group, Turkcell y Zorlu Holding), su CEO es Gurcan Karakas, ejecutivo de Bosh, y su COO es Sergio Rocha, CEO de General Motors Korea. La marca llegará al mercado con dos coches, cuyos prototipos han sido presentados en Gebze por el presidente Erdogan. Hablamos de un SUV y un sedán.

3.700 millones de dólares

El consorcio cuenta con una inversión de 3.700 millones de dólares con los que pretenden producir unos 175.000 vehículos eléctricos al año. En el caso del SUV, TOGG ha creado la plataforma modular del vehículo, mientras que el diseño de la carrocería llega de la mano de Pininfarina.

Según explican en su web, habrá dos modelos que se diferenciarán en la autonomía, ya que el más básico tendrá un rango de "más de 300 kilómetros" y el más potente "más de 500 kilómetros". También explican que tendrá carga rápida de 150 kW y que "alcanza el 80% de carga en menos de 30 minutos".

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En cuanto al rendimiento, y siempre hablando del SUV, ya que del sedán no se ha desvelado información, habrá opción de tracción trasera (RWD) con un solo motor eléctrico o sistema de tracción total (AWD) con un segundo motor eléctrico colocado en la parte delantera. La versión RWD tendrá 200 CV y pasará 0 a 100 km/h en 7,6 segundos, mientras que el SUV con tracción total ascenderá a 400 CV y pasará de 0 a 100 km/g en 4,8 segundos.

La web también deja ver que el vehículo tendrá conducción autónoma nivel 2+ "con sistemas avanzados de asistencia a la conducción, incluido el piloto de tráfico lento". Afirman desde TOGG que la arquitectura del coche permite adoptar el nivel 3 o más de conducción autónoma y que, dado que cuenta con conectividad, podrá recibir actualizaciones OTA. Por el momento son solo palabras, así que toca esperar a que llegue 2022 y los coches vean la luz. En los próximos 15 años, TOGG planea lanzar hasta cinco modelos diferentes.

Aunque lo que tenemos ahora mismo son imágenes del prototipo, pueden verse algunos detalles del interior, como la abundante presencia de pantallas tanto en el salpicadero como para sustituir a los espejos retrovisores. También parece que habrá un sistema de entretenimiento en la pantalla del copiloto y en la parte superior.

El sedán del TOGG, del que solo se han mostrado imágenes

En una primera fase, TOGG será una marca nacional, si bien aspira a convertirse en una marca internacional. Explican en Electrek que la fábrica en la que se producirán estos vehículos se ubicará en Bursa, está programada para estar lista en 2021 y dará empleo a más de 4.000 personas. La inversión de 3.700 millones de dólares se invertirá durante 13 años y, de acuerdo a al presidente turco, también se quiere desarrollar una infraestructura de puertos de carga que estaría lista para 2022, justo a tiempo para los coches.