El cambio climático es una dura realidad y, a veces, puede parecer que no haya esperanza para el futuro del planeta: deforestación, sequías, incendios, contaminación imparable. Muchas veces, sin embargo, nos olvidamos de que hay personas que restauran día a día la tierra con diferentes proyectos. Ahora, una herramienta de mapeo interactivo nos muestra los lugares del planeta donde hay personas conservándola.
Restor te permite ver todo: desde cuánto carbono se almacena en el suelo hasta la lluvia y qué especies podrían crecer. O que en Teruel y Las Rozas de Madrid se están llevando a cabo iniciativas inauditas.
La herramienta. Su artífice: Thomas Crowther, ecologista de ETH Zurich. Ha creado Restor, una herramienta de mapeo que muestra en qué parte del mundo la gente está haciendo este tipo de restauración. Piensa en el meme de "nature is healing", pero ahora en serio.
La plataforma destaca las victorias ecológicas que muestran qué cambios pueden lograr las personas comprometidas, como una organización sin fines de lucro que planta árboles en el Bosque Atlántico de Brasil para restaurar un ecosistema que ahora es el hogar de 170 especies de aves o cómo se conserva la Laguna del Cañizar, en Aragón.
Cómo funciona. Utilizar el mapa es muy sencillo. Basta con entrar a restor.eco/map y hacer click en los pines que aparecen en el mapa de nuestro planeta para conocer los diferentes paisajes que la gente está restaurando. Puedes abrir uno de esos proyectos y ver todo tipo de información, como quién lo está ejecutando y qué se está haciendo con la tierra. En la pestaña "predicciones globales", se ven estimaciones del área cubierta por árboles, la diversidad de la vida silvestre y el carbono almacenado en el suelo de cualquier zona determinada.
También puedes ver cómo ha cambiado el área con el tiempo extrayendo imágenes satelitales de alta resolución. Por último, puedes dibujar tu propia área en el mapa para estimar, por ejemplo, cuántas especies de animales viven en el bosque detrás de tu casa o cuánto carbono hay en el suelo. Y, si tienes un ecosistema que estás conservando, puedes compartirlo.
En todo el mundo. Hasta el momento, hay más de 76.000 zonas de conservación en Restor, lo que muestra cómo las personas en todas partes están trabajando incansablemente para preservar la naturaleza. Debido a que el sitio, que se basa en Google Earth Engine, utiliza imágenes satelitales, también se puede ver cómo cambia la vegetación en el transcurso de esos proyectos. "Nunca hemos sabido dónde está ocurriendo toda la conservación y restauración en nuestro planeta. Es la primera vez que podemos comenzar a visualizar un movimiento de restauración global", explicaba el creador.
En la sabana de Tanzania, los miembros de las aldeas locales han ayudado a restaurar los bosques de acacias, que proporcionan leña y madera, así como un hábitat para hienas, chacales y otros animales. En España, por ejemplo, vemos que hay puntos reparándose en Valladolid, Córdoba, Maderuelo, Palencia, Vic, y muchas zonas más.
El valor de medir lo recuperado. Un problema con la avalancha de noticias ambientales negativas (incendios, contaminación, etc) es que la gente se vuelve insensible. No es ningún secreto que estamos llegando a un posible punto de ruptura con el cambio climático y aunque ciertamente no sirve de nada pretender que estos problemas no existen, Restor es un recordatorio de que tampoco ayuda simplemente darse por vencido.
El potencial de restauración es enorme. Los desarrolladores de Restor explican que si el proceso se gestiona bien a nivel mundial, esto podría evitar más del 60% de las extinciones de especies, secuestrar casi 300.000 millones de toneladas métricas de CO2 y aumentar la seguridad alimentaria de más de 1.300 millones de personas.
En un estudio anterior, el laboratorio de Crowther estimó que mil millones de hectáreas de tierra, fuera de las ciudades, teóricamente podrían reforestarse. Incluso dentro de las ciudades, hay espacio para restaurar la naturaleza. En el mismo mapa, cualquiera puede usar la herramienta para ver el potencial de su propio patio trasero o un parque local. Es decir, la gente puede despertarse una mañana y decir: "Ostras, hay carbono en mi vecindario. Quizás podría ser parte de todo esto".