2.719 casos en lo que llevamos de año (324 solo en la última quincena). Justo tras la detención de una enfermera que fingía poner vacunas, pero las tiraba a la basura; Italia está viviendo toda una epidemia de sarampión que está hospitalizando a cuatro de cada diez niños afectados.
Y el problema tiene un nombre: los movimientos antivacunas. El 89% de todos los casos no estaban vacunados y un 6% más solo habían recibido la primera dosis de la vacuna. Es hora de llamar a las cosas por su nombre: estamos ante un atentado organizado contra la salud pública. Y tenemos que buscar soluciones.
La verdadera epidemia es la pseudociencia

A los 2719 enfermos italianos hay que sumar más de 500 casos en Alemania y hasta 6.434 enfermos (y 6 muertes) en Rumanía. Al calor del crecimiento de los movimientos antivacunas, enfermedades que creíamos (casi) olvidadas están protagonizando un regreso alarmante, siniestro y peligroso.
La reciente muerte de un niño con otitis por haber sido tratado con homeopatía, nos ha recordado el daño que pueden hacer ese tipo de pseudoterapias. Pero en el caso de las vacunas es incluso más sangrante porque no solo se pone en peligro uno, sino que se pone en peligro a todos los demás y, especialmente, a los más indefensos.
Haciendo el trabajo sucio a la enfermedad

La obligatoriedad de las vacunas sigue siendo un tema muy polémico, sobre todo, por los problemas éticos y sociales que presenta. ¿Qué se debe hacer con los niños que no están vacunados? ¿Se les debe dejar sin escolarizar? ¿Debemos retirarles la custodia (y la patria potestad) a sus padres? ¿Debemos obligarlos físicamente a ser vacunados?
Pese a eso, el Gobierno Italiano no tuvo más remedio que legislar en este sentido el 19 de mayo pasado haciendo obligatorias una docena de vacunas para todas las escuelas del país. Otros países, como Alemania, obligan a las guarderías a informar de los padres que no vacunan a sus hijos.
Países como España y buena parte de América Latina tienen legislación más que suficiente para combatir la pseudociencia, pero la voluntad política para aplicarla (o por desarrollar instrumentos más efectivos) brilla por su ausencia. Y es que no debemos llevarnos a engaño, movimientos como el de los antivacunas crecen en las grietas de la sociedad hasta convertirse en un problema realmente importante.
Junto con los retos tecnológicos, organizativos y humanos, la medicina tiene que resolver también los retos éticos que está surgiendo: cómo salvarle la vida a alguien que hace todo lo posible para que no puedas ayudarle. Y puede ser el reto más grande de todos.
Imágenes | European Commission
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Renato
Si es que antes de la medicina moderna y las vacunas se vivía muy bien ¿verdad?
Tenemos unos extremos en la estupidez humana que es increíble, por un lado los hipstersorganicos anti-vacunas y por el otro los que se tragan antibióticos como si de chucherías se tratase.
adry_fab
En mi pequeño país tercermundista son obligatorias las vacunas, por lo que muchas enfermedades infantiles han sido erradicadas, pero leer que los países del primer nivel ya no quieren vacunar a sus hijos me suena una reverenda tontería. Sólo porque mis hijos, los hijos de los vecinos o de mi ciudad no se enfermen, no significa que no deba vacunarlos, prefiero que sufran un momento por una inyección a que mueran por una mala decisión.
oletros
A cada uno de esos idiotas, por ser muy suave, se les debería recordar los resultados de enfermar de polio o viruela.
euromobel
¿De verdad hay gente en el siglo XXI que duda de la eficacia de las vacunas? Pero, ¿estamos locos, o qué?
Guiru
Yo les haría pagar íntegramente el precio del tratamiento a las personas afectadas o en su defecto a sus tutores legales. Y haría pagar indistintamente que tengan mutua o seguridad social, no tenemos que pagar todos las negligencias de los demás.
No creo que se deba obligar a nadie pero si persuadirles con el miedo del dinero.
eduardogoffard
En América del sur existen pocos ejemplares trogloditas; pero los hay. Felizmente la legislación se adecua para proteger a los inocentes.
Elaphe
Lo que no me me cabe en la cabeza es que a estas alturas se nos obligue por ley, por ejemplo, a ponernos el cinturon de seguridad cuando vamos conduciendo, pero no se obligue a los padres a vacunar a sus hijos. Es de risa.
josefrikardo
Podemos hablar de los avances que nos esperan en el futuro, de domótica, de coches eléctricos, de drones, de robots que nos ayudan a hacer las tareas del hogar, de conquistas de planetas, de la cura contra en cáncer... pero todo, absolutamente todo se puede desvanecer hasta el punto de irnos todos al carajo por cuatro gilip0ll#$ que "no creen en las vacunas".
Gracias.
Delujo
Ojalá no hubiera vacunas...
Mejoresescorts
Ojalá no hubiera vacunas. Creo que nos hacen más daño que ayudan..
chaosburn
Ser un Antivacunas es una postura radical, pero no es del todo incomprensible, me explico:
Yo tengo la suerte de que mi suegro es farmacéutico y me va comentando: "esta vacuna nueva no se la pongas ni de coña, no hay suficientes estudios y se sospecha que puede provocar tal y tal otra cosa..." Pero claro hay gente que ve que hay vacunas que se están poniendo por presiones comerciales y no dispone de esta información, o directamente no entienden un estudio con un montón de jerga técnica ¿y qué hacen ? tomar una postura antivacunas en general ante la incapacidad para discriminar las que de verdad podrían ser peligrosas.
antinwo
Es normal que no vacunen a los niños cuando descubrieron que los estaban envenenando con sustancias como mercurio en vacunas adulteradas. El problema es por que las elites nos usan como conejillos de indias y los gobiernos no los castigan severamente como deberian. Asi que el que unos padres no vacunen a sus hijos creo que estan en pleno derecho de ello.
matiasdiaz1
Cuánto te habran puesto para escribir hoy 3 de junio en el International Vaccine Injury Awareness Day que unos pocos miles de casos de sarampión que no revisten mayor gravedad, en una población de 900 millones de europeos, son un problema de salud pública y una "epidemia"
International Vaccine Injury Awareness Day
June 3
Light this virtual candle to express your support for the International Vaccine Injury Awareness Day and commemorate all the vaccine injured children and adults throughout the world.
trobador1969
Llamemos a las cosas por su nombre. Pero también seamos un poco objetivos a la hora de recoger información, manipularla a nuestro antojo y luego soltar alguna parida.
Las vacunas son un gran avance, como lo es lo ha sido la medicina China, complementaria y moderna occidental… en su justa medida. Y todo, en su justa medida, informado y dispuesto a escuchar, otras realidades diferentes a la que conocemos, es un buen punto de inicio para combatir la ignorancia.
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Ignorante es aquel que se lo cree todo.
Ignorante es aquel que cree que sabe más que el otro.
Ignorante es el que ignora lo mucho que desconoce.
Estoy sentando las bases para decir que soy un ignorante igual que los 500 Millones de personas que utilizamos la homeopatía con éxito, pero me ofende que alguien me llame así, simplemente porque no comparto sus ideas.
Si queremos curarnos una infección, posiblemente la mejor solución sea usar un antibiótico genérico de amplio espectro. Además de eliminar la infección, eliminará gran parte de la flora bacteriana y debilitará al sistema inmunológico. Siempre es mejor eso que morir de otitis, pero, ¿cuantas muertes por otitis hay en el mundo? Y ¿cuantas muertes hay por el uso y abuso de los fármacos? Hay quienes aseguran, y no solo ignorantes, que la primera causa de muerte en el mundo por causa directa o indirecta es precisamente la medicina química moderna.
HOMBRE!! Antes vivíamos hasta los 30 años, con suerte!!
Antes, ni siquiera sabíamos que lavarse las manos es fundamental para nuestra higiene.
Antes la esperanza de vida de un recién nacido era muy baja. Por lo que la media de edad bajaba drásticamente.
Sin embargo las personas adultas, a salvo de epidemias, vivían muchos años. Y sí, las epidemias causaban estragos!!
La ciencia descubrió pequeños seres microscópicos que desconocíamos hasta la fecha y fue suficiente con aplicar una buena higiene, de la que carecía una gran mayoría, para acabar con gran parte de los temidos virus.
Y llegó la industria química, y nos dijo, “nosotros somos los que vamos a curaros” y la gente, los creyó. Les creímos de tal modo que somos incapaces de salir a la montaña y coger un poco de romero para hacernos una infusión o usar simplemente vinagre sobre la piel… preferimos ir al médico y le confiamos nuestra salud con los ojos cerrados.
… Y la medicina moderna cura? -Sí! A menudo te cura la acidez de estomago, por ejemplo. Pero ese medicamento que se vende por miles de millones en todo el mundo, “ahora” después de 20 años descubren que inhibe la absorción de vitaminas… Ohhhhh!!! No pasa nada, le pincharemos Vitaminas y problema arreglado!!
-Si? Todas las vitaminas? No sería mejor probar con algún remedio que funcione de verdad si estropearte el resto del cuerpo.
Este es solo un ejemplo, que he vivido en mis carnes, pero hay tantos ejemplos como personas que visitan a su médico de cabecera.
¿No duermes? Somníferos
¿Baja autoestima? Antidepresivo
Depresión? Antidepresivo
Inseguridad? Antidepresivo
Y cuando usted deje de tomárselo, venga que si eso, ya….
Curamos el síntoma, no el desequilibrio.
Curamos al “enfermo” de modo individual, no como un ente que forma parte de un conjunto sistémico.
Los médicos reconocen un análisis y descuidan la importancia de, por ejemplo, las emociones que tanto afectan en nuestra salud.
Matar a cañonazos las moscas de la infancia, afectará a la calidad de vida en la madurez.
Debilitar el sistema inmunológico de los padres, generación tras generación, va a debilitar la especie humana en poco tiempo
… Pero eso no importa. No he cogido el sarampión y odio a los anti vacunas.
Buenas noches!