Cada año cientos de ofertas se amontonan en nuestros grupos de Telegram, nuestras páginas web de consulta y nuestros foros de conversación. El Black Friday ha logrado posicionarse como un acontecimiento social, un punto de conversación para ir programando las compras de Navidad o para, simple y llanamente, concedernos un capricho por unos euros menos.
Los primeros informes ya empiezan a arrojar datos interesantes: una media de 189 dólares gastados, un crecimiento del 9% respecto al año pasado y ofertas algo menos potentes que las del año pasado pero en más familias de productos. En España, este año, el Black Friday se ha saldado con vencedores típicos: el videojuego FIFA 20, robots de limpieza, cepillos orales, tablets, bebés llorones, smartwatches, planchas del pelo y, sin hacer apenas ruido, un smartphone de nuevo cuño.
realme se lleva el gato al agua
Con sede en Madrid recién inaugurada, la gran sorpresa de este Black Friday 2019 ha sido, sin duda, la irrupción de realme. Aunque en Europa es un fabricante poco conocido, parte del gigante BBK Electronics —es decir, comparte tecnología con Oppo, OnePlus o Vivo— esta firma con apenas año y medio de vida que ha logrado crecer en un 808% y actualmente opera en más de 20 mercados.
En el primer trimestre del año ya había conseguido colocarse entre las 10 primeras marcas del mundo con mayor crecimiento. En el segundo, en el Top 7. Datos históricos que desafían cualquier convencionalismo y que van camino de sumar 20 millones de usuarios en todo el mundo.
El fabricante aterrizó su flota de teléfonos en Amazon España y la respuesta no se hizo esperar: el realme X2 Pro, el flagship de la marca, fue el móvil más vendido en Amazon el día 25 de noviembre, cuando comenzó la semana del Black Friday. Unas ventas que se han mantenido, como podemos ver en el siguiente enlace, con algunas ofertas ya agotadas.
Unas cifras que muy probablemente se repitan durante las vacaciones de Navidad. ¿La razón? Descuentos del 7 al 12% y casi cinco estrellas entre las valoraciones de los usuarios.
Una serie de teléfonos que oscilan entre la gama media premium y la gama alta asequible con especificaciones como su cámara cuádruple de 48MP, la CPU Snapdragon712 AIE del realme 5 Pro o la pantalla superAMOLED de 6,5 pulgadas y refresco de 90Hz en el modelo X2 Pro. Veamos más a fondo las particularidades de esta familia.
La oferta de realme 5 Pro
realme 5 Pro es el teléfono más equilibrado de la flota, algo por encima de su versión normal —un teléfono a valorar por quienes busquen su primer smartphone— pero con especificaciones muy atractivas. Su precio básico va desde los 199€ con 4GB de RAM hasta los 249 con 8GB de RAM. Gracias a las ofertas hemos podido ver el terminal por menos de 200€ en su versión alta y por 179€ en su edición más básica.
Un terminal, decíamos, que además monta un Snapdragon 712 AIE, un procesador a la altura de los tope de gama de hace dos años y con un benchmark en la línea de un 835, con el que podemos jugar a 'Call of Duty: Mobile', 'Sniper Fury' o 'Fortnite' sin preocuparnos lo más mínimo —a lo que sumar la aplicación HyperBoost 2.0—. En Amazon, por ejemplo, cuenta con valoraciones positivas de forma unánime.
Los devotos de la fotografía se van a llevar una sorpresa cuando vean que por esos precios el realme 5 Pro incorpora una cámara cuádruple de 48MP con Inteligencia artificial, lente macro con gran angular de 119º, lente para retratos y una cámara frontal con sensor Sony de 16MP, gran apertura y compatible con AI.
Aunque su mayor valor tal vez no sea ese, sino su sistema de carga VOOC Flash Charge 3.0 con el que obtenemos el 100% de batería en hora y media (1h38min), cuatro veces más rápido que una carga estándar. Esto le confiere una usabilidad extra lo que, al fin y al cabo, es un factor determinante.
realme X2 y X2 Pro: la gran sorpresa del año
Y si el realme 5 Pro podría situarse en el bronce de un podio invisible, el realme X2 y su versión Pro deberían sentarse sobre la plata y el oro. Estos terminales suben la apuesta pero también entran en ese terreno donde la competitividad es, si cabe, más feroz.
El primero, sin la coletilla del “Pro”, se basa en el chipset Snapdragon 730G, 8GB de RAM, una batería de 4.003 mAh y un sistema de carga rápida mejorado que llena un 70% en 30 minutos. A esto debemos sumar sus 6,4 pulgadas con una relación de espacio del 91.9% y una cuádruple cámara con un sensor Samsung GW1, un sensor gigantesco (de 1/1.72) con el mayor número de píxeles de toda su flota, por menos de 300€.
En cuanto a la versión Pro, el flagship de la marca, las ofertas están volando y esos datos hablan por sí solos: el procesador sube hasta las nubes, hasta el Qualcomm Snapdragon 855+, la pantalla AMOLED Full HD de contraste 2000000:1 con tasa de refresco de 90 Hz es perfecta para el multimedia y la cámara es una cuádruple de 64MP con zoom híbrido 20X —y algoritmos antidistorsión, super macro para las imágenes de corto alcance (2.5 cm), etc—.
Por menos de 500€ y los dos años de garantía oficial del fabricante. Un terminal muy robusto que acabará bajo el árbol de muchos hogares.
Una realidad más allá del Black Friday
El mercado del smartphone es uno de los territorios tecnológicos más competitivos y despuntar del resto en apenas 18 meses no es sino resultado de un trabajo esmerado. Sin duda, esta buena acogida responde a una gestión audaz, aprovechando el día de ofertas más popular del año. Su flota se presenta como la oportunidad idónea para renovar teléfono por una buena temporada, un regalo para familiares, hijos que van a tener su primer teléfono o amigos que están deseando probar con mejores cámaras de fotos.
Una marca que no sólo ha apostado por telefonía, sino que también está empezando a vender accesorios en su página web como los realme Buds 2, auriculares con cable que acaban de ponerse a la venta. O incluso carcasas para el realme X2 y el X2 Pro. La ocasión ideal para quienes buscamos algo más disruptivo que un simple teléfono con buena relación calidad/precio.
Imágenes | web oficial de realme.com
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