Qué agradecidas son las buenas sorpresas. En tiempos donde los titulares se desgañitan con ampulosas sentencias, donde el “tren del hype” arrasa con todo y cada nuevo juego, peli o libro es un acontecimiento histórico irrepetible, justo en ese instante es donde más se celebra lo auténtico. Aquello que ha pasado completamente fuera de tu radar y te deja embobado. Para bien, claro.
Da la casualidad que esto mismo puede aplicarse a dos ejemplos del mismo universo creativo: la nueva película ‘Dungeons & Dragons: Honor entre ladrones’, primera producción basada en D&D en más de una década y la nueva novela ‘Hija del destino’, el retorno a Dragonlance tras la misma cantidad de años. Una cuidada edición en tapa dura sin sobrecubiertas, ilustrada por Philipp Urlich y acompañada por un mapa a todo color de Jared Blando, como mandan los cánones, que nos da una perspectiva cenital de toda la región del Ansalon "actual", tras la Guerra del Caos.
La película de marras ha sorprendido a propios y extraños por su honestidad, por tomarse con humor lo que antaño era imposible de tomárselo: lo esquizofrénica de una partida de rol entre cuatro amigos donde lo más natural es que mueras empalado por un semiorco que a la vez está de malas pulgas porque un Kenkus le ha robado el arma. La novela que nos ocupa supone el retorno de Margaret Weis y Tracy Hickman por todo lo alto, el punto de partida para una gran guerra y una nueva trilogía.
Los destinos de Dragonlance
Margaret Weis y Tracy Hickman son unos auténticos veteranos en el arte de la trilogía. Autores originales del nacimiento de Dragonlance con ‘El retorno de los dragones’ (1984), estos dos buenos amigos novelizaron las primeras partidas de tablero por una necesidad esencial: por un lado, un lore al que acogerse para todos los jugadores; por otro, la acuciante necesidad de trovadores que dieran forma literaria al mundo que estaban creando los diseñadores de D&D.
Destina Rosethorn ha perdido a su padre en la Guerra de la Lanza y, con él, su reinado y sus muchos privilegios
En España, por aquellos días nos dejábamos los ojos mientras en horario infantil sonaba Parchís cantando eso de “el amo del calabozo, nos dio poderes a todos”. Una serie que se quedó en el aire, de tal “violenta” que resultó a los comités éticos de la época. Lo que ellos no sabían es que ya teníamos en nuestra librería de confianza un buen puñado de hojas para alimentar el fuego de nuestra imaginación. Hasta los librojuegos de Timun Mas llegaban a las guarderías. La generación “Dragonlance” había nacido y los dados comenzaron a girar, imparables, sin prever el resultado de la siguiente partida.
Como fuera, han pasado 40 años desde que estos dos estadounidenses se conocieran camino a una entrevista de trabajo y muchas cosas han cambiado, pero en absoluto ese pulso por narrar buenas historias a partir de un punto de partida de lo más arquetípico: huérfano que viaja en búsqueda de un artefacto y, por el camino, vive mil aventuras al lado de sus compañeros y, ante todo, amigos.
Si ya has leído alguna de las novelas anteriores ya sabes lo que te espera: un buen reencuentro entre Tass, Tika Majere y Caramon
‘Hija del Destino’, como buena secuela directa de otra trilogía, ‘Destinos’, arranca con un buen puñetazo en el estómago, como no podría ser de otra forma: Destina Rosethorn ha perdido a su padre en la Guerra de la Lanza y, con él, su reinado y sus muchos privilegios. Su padre, como Caballero de Solomnia, murió sirviendo al héroe Sturm Brightblade. Y Destina ha decidido que eso no va a ocurrir, ni hablar. Por supuesto, para evitar una muerte del pasado debe recuperar dos artefactos poderosísimos que le harán dar vueltas por todo Krynn.
Y el último en saber algo de este artilugio fue Tasslehoff Burrfoot, Tass para los amigos. Sí, el mismo Tass que luchó en la Guerra de la Lanza, a punto de morir un buen puñado de veces, salvado por los pelos por Raistlin Majere. Si ya has leído alguna de las novelas anteriores ya sabes lo que te espera: un buen reencuentro entre Tass, Tika Majere y Caramon, por lo pronto. Y un mal que puede arrasar con la vida y cambiar el devenir de la historia para continuar.
Trece años después… y un nuevo dragón
Pero quizá una de las mayores virtudes de esta novela reside en su forma de narrar: siguiendo la tradición pausada y detallista, el humor negro y la pantomima incidental, ‘Hija del destino’ no necesita apoyaturas externas. Sí, cualquier lector celebrará ciertos recuerdos y ciertos eventos —retornar a Krynn después de 13 años es un auténtico acto de nostalgia—, pero esta nueva epopeya puede disfrutarse como objeto individual.
Retornar a Krynn después de 13 años es un auténtico acto de nostalgia
Al fin y al cabo, aquí está todo lo que hizo mítico el universo D&D y convirtió a la franquicia en una mina de oro. Los dragones, por ejemplo: el juego creado por Gygax y Arneson saben que cuando aparece un dragón hay que santificarse, es un acontecimiento clave, un punto álgido. Y esta novela no defrauda en ese sentido —no podemos contar más sin destripar la trama—.
Por otro lado, ‘Hija del destino’ también se convierte en el perfecto espejo para entender el pasado. La otra cara de la moneda. Una oportunidad para revivir eventos desde una perspectiva diferente, al paso actualizada. Los bosques de siempre y las campañas de siempre y una oportunidad única. Tanto los que perdonásteis todo a Raistlin como los que no tendréis aquí para horas de debate.
Y es que quienes vimos decaer en tiempo real la popularidad de las novelas —las cuales, para muchos, bajaron enteros en calidad—, mientras los jugadores sobrevivían al yermo de la eterna sequía entre ‘Baldur’s Gate II’ y su tercera entrega, encontramos aquí un asidero para despertar, como los dragones dormidos, ante un universo que comienza. Nuevo porque la línea del tiempo se ha quebrado pero no ha alterado ni un ápice del potencial de Tass y sus Compañeros.
Destina hace honor a su legado y transmite todo ese carisma que se le espera a un gran protagonista
Para los avezados, recordemos que Dragonlance es un escenario que se ha mantenido ajeno a la quinta edición de D&D. Hace poco más de un año que Fizban el Fabuloso inauguró formalmente D&D 5e y Unearthed Arcana: Heroes of Krynn trajo todas las novedades necesarias a D&D 5e. ‘Hija del Destino’ es, por la misma necesidad de hace 40 años, la literatura que recordaremos sobre Destina.
Y ya os podemos garantizar que Destina es brutal. Hace honor a su legado y transmite todo el carisma de un gran protagonista, con sus matices, sus flaquezas y fortalezas. Dragonlance no podría estar en mejores manos. Eso sí, tenemos una terrible noticia que daros antes de cerrar este artículo: en cuanto cierres la última página vas a estar desesperado por continuar la trilogía. Menos mal que Minotauro ya ha confirmado la llegada —probablemente con traducción de Patricia Nunes Martínez— de los siguientes volúmenes.