El proyecto de las gafas inteligentes de Google que arrancó hace una década acaba de llegar oficialmente a su final. La compañía de Mountain View, que había decidido dejar atrás a la versión dirigida al consumo masivo, acaba de anunciar que ya no venderá la alternativa para empresas, la única que había conseguido sobrevivir hasta la actualidad.
La noticia ha sido dada a conocer en la propia página web del producto. Hasta hace pocas hora se podía navegar por las distintas secciones de la misma, pero ahora todo ha sido reemplazado por un breve mensaje informativo. “A partir del 15 de marzo de 2023, ya no venderemos Glass Enterprise Edition”, se lee en parte del texto publicado por Google.
Adiós Google Glass Enterprise
Con este movimiento por parte del gigante del buscador, los usuarios de las Google Glass Enterprise tendrán que tener en cuenta algunos cambios. El soporte de la compañía, que consiste en enviar dispositivos de reemplazo en determinados casos, expirará el próximo 15 de septiembre. Las gafas seguirán funcionando, pero ya no recibirán actualizaciones.
La aplicación Meet on Glass preinstalada en las gafas también perderá el soporte en la mencionada fecha límite, por lo que “podría dejar de funcionar en cualquier momento”. Las aplicaciones de terceros, por su parte, seguirán recibiendo actualizaciones y soporte siempre y cuando los desarrolladores decidan continuar trabajando en ellas.
Google presentaba a sus gafas inteligentes empresariales como un dispositivo destinado a ayudar a los trabajadores de industrias como logística y la fabricación. La idea era que pudieran hacer su trabajo más eficientemente al tener las manos libres, pero sin dejar de recibir determinada información directamente en su campo de visión.
La última actualización de este producto contaba con un SoC Qualcomm Snapdragon XR1 y un nuevo motor de inteligencia artificial. Este conjunto de elementos pretendía hacer frente a dos de los problemas de las generaciones anteriores: la autonomía y el rendimiento. Además, tenían una cámara de mejor calidad y conectividad WiFi, Bluetooth y USB-C.
Pese a las mejoras anunciadas, su precio inicial de aproximadamente 1.500 euros podría haber sido un punto negativo a la hora de conquistar clientes empresariales. Lo cierto es que, como decimos, Google ya no venderá este tipo de gafas. El sueño de las Google Glass ha llegado a su final.
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