Nokia Lumia 800, primeras impresiones

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26 Octubre 2011

Carlos Zahumenszky

No estábamos todos en el mundo de la telefonía. Después de Apple, Samsung o Motorola aún nos quedaba el gran tapado, Nokia. Hoy, la finlandesa celebra por fin su evento anual más importante. En Xataka nos hemos acercado hasta el Centro de Convenciones London Excel para ofreceros todos los detalles de su nuevo buque insignia, el Nokia 800 o Nokia Lumia 800.

Ya en la presentación, el CEO de Nokia, Stephen Elop, presentaba el nuevo teléfono como ‘el auténtico Windows Phone’. No vamos a entrar a discutir al bueno de Elop, pero una cosa está clara, el Nokia Lumia 800 es el smartphone que mejor integra el sistema operativo de Microsoft hasta la fecha y, además, un terminal de los que enamoran a primera vista.

Comencemos por el diseño del Nokia Lumia 800. Su carcasa está elaborada en un único bloque de policarbonato ya del color final que va a tener el terminal. En otras palabras, que si se nos ralla, la marca no tendrá otro color como si se tratara de una superficie pintada. El tacto de esta resina patentada en exclusiva por Nokia es fascinante. Es suave, pero no se parece al plástico y es completamente a prueba de huellas.

Toda la electrónica se inserta desde la base y después se acopla la pantalla desde arriba. No hay tornillos visibles, ni juntas ni ranuras que acumulen suciedad. Si no fuera porque funciona, casi parece que estamos cogiendo un objeto de resina maciza con un cristal pegado. Las únicas conexiones están en la parte superior y son un jack de audio para auriculares y manos libres, un puerto MicroUSB para carga y datos, y la ranura para tarjetas SIM. Estas dos entradas están protegidas mediante tapas por lo que, realmente, sólo queda a la vista el jack de audio. En la parte inferior, una retícula de puntos indica donde está el altavoz.

La pantalla del Nokia Lumia 800 es espectacular. Se trata de una AMOLED mejorada con la tecnología Clearblack exclusiva de Nokia. No sólo se ve perfectamente bajo cualquier tipo de luz, sino que muestra colores vivos y presume de un ángulo de visión estupendo. Con una diagonal de 3.7 pulgadas, parece una 3.9, pero es un efecto óptico derivado de los botones táctiles de Windows, que están integrados con ella.

La resolución de la pantalla es de 480×800 píxeles, el estándar impuesto por Windows Phone. Hay smartphones con más resolución, pero no se echa de menos nitidez. Por último, el Nokia Lumia 800 es el primer terminal en incorporar la nueva cobertura curva de GorillaGlass que hace que la pantalla parezca un azabache incrustado en resina.

Disponible en colores cyan, magenta y negro, físicamente el Nokia Lumia 800 es uno de los terminales más bonitos y con más personalidad que hemos tenido oportunidad de contemplar últimamente. Sencillamente una delicia.

Músculo con algunas ausencias

No todo va a ser belleza. Nokia necesitaba igualar la apuesta para volver a entrar en el mercado smartphone con pie firme. Para ello, ha dotado al Lumia 800 de un procesador Qualcomm Snapdragon 8250 a 1.4GHz, el más moderno de Qualcomm hasta la fecha hasta que salga el 8260, que será igual pero con soporte 4G.

El 8255 es mononúcleo (sin contar la GPU Adreno, claro), pero no os confundais. El Nokia Lumia 800 no necesita dos núcleos. Windows Phone 7 fue concebido para funcionar con mucho menos y la sensación al manejar el teléfono es de que vuela. Los únicos cuellos de botella nos los hemos encontrado al intentar acceder a la saturadísima red del centro de convenciones.

Apoyan al procesador 512MB de memoria RAM y 16GB para almacenamiento. Comoquiera que Windows Phone 7 no admite tarjetas MicroSD, el Nokia 800 viene con 25GB gratuitos en nube mediante el servicio Skydrive de Microsoft.

Completan la configuración una cámara de 8 megapíxeles con una nueva óptica Karl Zeiss equivalete a un gran angular con estabilizador de imagen y doble flash LED. El comportamiento de la cámara parece muy similar al de la del N9 y su funcionamiento parece incluso mejor con el software de cámara de Windows.

Entre los aspectos que menos nos han gustado encontramos, la imposibilidad de conectar facilmente el terminal a un televisor a menos que usemos un multimedia center, ya que no hay ni salida MiniHDMI, ni DLNA. Ambas ausencias son comunes en el sistema operativo de Microsoft, que parece querer alguna otra vía propietaria, a través quizá de Xbox.

En cifras absolutas, el Nokia Lumia 800 no supera a los terminales Android de gama alta, pero otras compañías como Apple ya han demostrado que las cifras sobre el papel no significan nada, y ya les gustaría a muchos de estos Android disfrutar de la integración de hardware y software que muestra el nuevo teléfono de la finlandesa.

En esta primera toma de contacto, hemos encontrado un terminal rápido, sin fallos de software, y con un diseño tan original como inteligente. Por otra parte, conviene recordar que estamos hablando del primer terminal de la familia 800. Aún nos quedan por ver los que vendrán empezando por 9 con mayores prestaciones. Nada nos alegra más que poder dar la bienvenida a la finlandesa en su vuelta al ring de los peces gordos. Ahora sí que estamos todos. Que comience el combate.

Más información | Nokia