dirigible

El Colossea es uno de los yates más grandes del mundo pero no es lo más curioso que ofrece. Su cabina de mando se transforma en un dirigible que puede desacoplarse del casco y levantar el vuelo. Su precio: 1.000 millones de dólares

El Pathfinder 1 afronta su fase clave: "Ahora debemos demostrar que puede volar de manera fiable".

Su objetivo: cubrir una travesía histórica ya en 2026.

El Airlander 10 volará en España.

Sus 200 metros de envergadura dejan en ridículo a los 88 del Antonov An-225, el avión más grande del mundo.

Un megayate para surcar los mares... y los cielos. Suena a ciencia ficción, pero es la propuesta que ha puesto sobre la mesa el estudio italiano Lazzarini.

Sus creadores ven un futuro con los cielos de la ciudad llenos de estos platillos volantes transportando contenedores de carga.

Un dirigible con una pila de combustible de hidrógeno de 1,5 megavatios.

En su interior cabe la Estatua de la Libertad.

Las ventajas son muchas, y los obstáculos (que los hay) parecen relativamente fáciles de superar.

¿El renacimiento del Zeppelin o simples castillos en el aire?

Puede que la compañía no esté tan lejos de crear algo parecido muy pronto: una patente de 2016 así lo indica.