El pasado mes de junio Tesla anunciaba que despedía al 9% de la plantilla para "reducir costes e intentar ser rentables". Esos recortes parecen no haber sido suficientes, porque un nuevo plan de despidos está en marcha ahora.
La empresa ha anunciado que despedirá al 7% de la plantilla actual y en el mensaje interno a sus empleados advierte de que el futuro será "muy difícil" para una empresa que parecía haber remontado al solucionar los problemas de producción de su Model 3.
Tesla se aprieta el cinturón, vienen curvas
Tras los despidos del pasado verano la plantilla de Tesla pasó de unos 46.000 empleados a unos 41.000, y estos nuevos recortes harán que esa plantilla se reduzca en unas 2.900 personas lo que haría que el número de empleados superase ligeramente los 38.000.
Elon Musk, CEO de Tesla, explicaba en el blog de la empresa cómo "Tesla necesita hacer estos recortes además de incrementar la tasa de producción del Model 3 y de hacer muchas mejoras de la ingeniería de fabricación en los próximos meses".
La preocupación del creador de Tesla era patente al destacar que "no hay otra forma" de lograr garantizar su futuro. Las estimaciones de Musk apuntan a beneficios GAAP en el cuarto trimestre, pero no tan destacables como las del tercer trimestre.
"Este trimestre, como ocurrió con el 3T, las ventas de las variantes más caras del Model 3 (esta vez en Europa y Asia) nos permitirán con suerte, pero con grandes dificultades, esfuerzo y algo de suerte, dirigirnos a conseguir un pequeño beneficio", explicaba en el anuncio publicado en el blog de Tesla.
Las acciones de Tesla están cayendo en estos momentos cerca de un 7,5% en preapertura tras un anuncio que demuestra el complicado momento por el que atraviesa la empresa.
El reto está en el Model 3
Musk explicaba cómo 2018 ha sido el más difícil de toda la historia de Tesla, pero también el más exitoso. Así, el CEO explicaba cómo "vendimos casi tantos coches en todo 2017 como en el último trimestre de 2017".
Aún así reconocía como "nuestros productos son todavía demasiado caros para la mayoría de la gente" y apuntaba a los objetivos que tienen en especial con el Model 3, que "necesitamos ofrecer al menos en su variante de gama media en todos los mercados".
Musk reconocía que de momento el precio del Tesla más barato es aún alto: el Model 3 de autonomía media (264 millas) cuesta 44.000 dólares y el estado de la economía en EE.UU. hará que suban casi 2.000 dólares más en los próximos meses.
Para el creador de esta empresa lo único que se puede hacer es reducir el número de empleados a tiempo completo en "aproximadamente" un 7%, pero señala que "el año pasado crecimos en un 30%, que es más de lo que podemos soportar".
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