Los ultraportátiles parece que se comen a pasos agigantados todo el mercado de ordenadores personales. Incluso la crisis parece que ayuda a ver con mejores ojos un equipo con una pantalla y teclado de bastante reducidas dimensiones.
Sin embargo, los portátiles de toda la vida, potentes y con importantes pantallas o ligereza absoluta, siguen siendo básicos. La tendencia últimamente es a mejorar su autonomía y sobre todo, a dotarlos de generosas funciones multimedia. Los reyes a mi parecer son los equipos con pantalla de 16.4 pulgadas con resolución 1080p. Tanto para ofimática y navegación como para reproducción de vídeo en alta definición, son una delicia.
En Xataka hemos estado probando los últimos días dos equipos de Sony. Por un lado tenemos el Vaio de la serie FW, con lector de Blu-Ray y pantalla 1080p como grandes argumentos, y en el otro, un Vaio SR cuyo principal mérito es el equilibrio entre todos sus componentes básicos: calidad de pantalla, teclado comodísimo, autonomía aceptable y peso contenido. Además, Windows Vista funcionaba sin problemas con los 4 GB de RAM del modelo analizado.
El primer equipo analizado se presentaba como un portátil no apto para llevar de un lado para otro. Su peso de más de 3 kilos y la gran pantalla, lo hace más ideal para tenerlo como ordenador principal en casa. No necesitamos una pantalla externa para trabajar con comodidad, y su resolución y brillo son perfectas.
Pero el verdadero motivo de analizar este Vaio se la serie FW era probar qué tal se comportaba como equipo reproductor de alta definición. Y con su Core 2 Duo y 4 GB de RAM, unido a la gráfica dedicada, los resultados han sido muy buenos.
Tanto cuando reproducimos vídeos MKV a 720p/1080p o cuando directamente optamos por un Blu-Ray, todo va con fluidez. Lo único reseñable es el ruido del lector de discos, un mal endémico de todos los portátiles. Cuando lo queremos tener conectado a una pantalla LCD grande (en las pruebas ni se inmutó el Vaio con una Samsung 1080p de 40 pulgadas) queremos disfrutar del cine en casa y no tener que estar pendiente de ruidos no deseados. Pero vamos, tampoco es algo que reste puntos al portátil, pero sí algo que debemos saber y que de momento ningún portátil ha sabido solucionar de los que hemos probado. Para estos casos seguramente un sobremesa multimedia pequeño sea mejor opción.
La autonomía media del modelo que hemos analizado es de 3.4 horas, pero no le hemos dado mucho peso en la valoración final por considerarlo un equipo de sobremesa más que portátil.
Respecto al modelo más compacto, un Sony Vaio de la serie SR, buscábamos comprobar su rendimiento con Windows Vista y la autonomía. En ambos casos hemos quedado satisfechos con los resultados. Vista funciona de forma muy solvente, y la autonomía media en trabajo básico, con pantalla a medio brillo, nos daba siempre más de 3 horas.
A destacar la comodidad del teclado, ya general en los nuevos modelos de Sony, con teclas separadas y buen tacto y recorrido.
Más información | Sony.
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