En marzo de 2014, la policía de Sussex (Reino Unido) comenzaba un programa piloto que consistía en utilizar drones de vigilancia alrededor del Aeropuerto de Gatwick. ¿Por qué? Según ellos, porque "en ciertas circunstancias proporcionan una alternativa más rápida, más segura y más barata que las patrullas de agentes". En marzo de 2015 recibían financiación adicional para comenzar a experimentar con los drones en otros ámbitos policiales.
Finalizado el programa piloto, el Consejo Nacional de Jefes de Policía (NPCC) de Reino Unido lo tiene claro: los drones "pueden ser eficientes y efectivos" cuando se utilizan para actividades policiales. De los 43 cuerpos de policía locales que existen en UK, un cuarto ya ha mostrado interés por incorporar estos vehículos aéreos no tripulados a su flota "como alternativa a los helicópteros, perros policía e incluso a los propios oficiales en algunos casos", según explica el Daily Mail.
Esto no significa que vayamos a ver mañana mismo drones en manifestaciones. Tras la publicación de la noticia en The Times, el primer medio que se hizo eco, el NPCC ha aclarado que por ahora algunos departamentos están estudiando por su cuenta "si son tan efectivos y menos costosos" que las alternativas tradicionales, "como las patrullas aéreas o a pie". De momento todo está en fase de pruebas y la policía, a nivel nacional, está elaborando unas pautas para su uso.
Los posibles usos policiales de los drones
Steve Barry, responsable de todo lo relacionado con drones en el Consejo Nacional de Jefes de Policía, explicaba una posible aplicación de estos mismos en un caso real: "Si alguien entra en tu cobertizo y luego escapa, y luego hay docenas de cobertizos donde puede estar escondiéndose, los drones pueden ser la solución perfecta. Pueden ser más rápido que los perros". Otro caso que menciona es, por ejemplo, el poder tener imágenes en vídeo de una situación antes de que las autoridades decidan cómo proceder.
El uso de drones por las autoridades británicas se contempla ahora en operaciones de "alto riesgo", entre las que por ejemplo se encuentran las protestas, operaciones anti-terroristas, secuestros y la búsqueda de personas desaparecidas. Barry, eso sí, insiste en que la idea no es desplegar drones en casos de poca importancia: "el crimen de bajo nivel no justificaría que se utilizara un dron sobre los jardines de las casas de la gente".
Por ahora, eso sí, tan sólo la policía de Sussex y otros seis cuerpos (entre los que no se incluye la Policía Metropolitana de Londres) tienen licencia para operar estos dispositivos, según Quartz. En declaraciones a dicho medio, Renate Samson, responsable del colectivo Big Brothers Watch a favor de la libertad de expresión y en contra de la vigilancia masiva, pide prudencia y cree necesario que se establezca "unas normas apropiadas y una conversación" con el público antes de que se comiencen a usar en entornos reales a nivel nacional.
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