Inspección de Trabajo obliga a Amazon a contratar 4.000 repartidores: un golpe de efecto contra el modelo de 'falsos autónomos'

Inspección de Trabajo obliga a Amazon a contratar 4.000 repartidores: un golpe de efecto contra el modelo de 'falsos autónomos'
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Enrique Pérez

Editor Senior - Tech

Editor especializado en tecnología de consumo y sociedad de la información. Estudié física, pero desde hace más de diez años me dedico a escribir sobre tecnología, imagen y sonido, economía digital, legislación y protección de datos. Interesado en aquellos proyectos que buscan mejorar la sociedad y democratizar el acceso a la tecnología. LinkedIn

El círculo se estrecha contra el modelo de 'falsos autónomos'. Una semana después de la importante sentencia del Tribunal Supremo, Inspección de Trabajo ha decidido obligar a Amazon a dar de alta a unos 4.000 trabajadores de Amazon Flex que se encontraban como repartidores autónomos.

Según informa el sindicato UGT, quien denunció hace un año la forma de reparto de Amazon, la compañía ha regularizado un total de 2.100 trabajadores en Madrid y 1.905 en Barcelona.

4.000 trabajadores y más de 6 millones en cuotas

Este proceso de regularización supone un coste de 6,16 millones de euros por cotizaciones impagadas y cuotas no satisfechas al Régimen General de la Seguridad Social durante los años anteriores. Por el momento únicamente en las dos grandes ciudades se ha forzado a dar de alta a los trabajadores, pero se espera que Inspección de Trabajo continúe la inspección en el resto de provincias.

Los trabajadores que han sido dados de alta utilizaban su propio vehículo para el reparto de paquetes través del servicio Amazon Flex. Según explica Cinco Días, la Administración reclama 3,2 millones a Amazon Spain Fullfillment y 0,99 millones de euros a Amazon Road Transport Spain.

La sentencia del Tribunal Supremo es clara respecto a la figura del 'rider'. En el caso de Glovo, estableció que "la relación existente entre un repartidor (‘rider’) y la empresa tiene naturaleza laboral". Una postura que la mayoría de expertos consideran aplicable a otras empresas del sector como Deliveroo o la propia Amazon con Flex.

A finales de septiembre, la CNMC consideró a Amazon como un operador postal y por tanto debía modificar parte de la actividad para cumplir con las exigencias de la normativa de mensajería y paquetería.

En respuesta a Xataka, desde Amazon España explican que "estamos en completo desacuerdo con la resolución y presentaremos una apelación. Asimismo, estamos cooperando plenamente con las autoridades laborales en su investigación". A lo que añaden que "desde Amazon, estamos orgullosos de poder ofrecer una amplia variedad de oportunidades en toda España en la red de distribución, incluyendo un pequeño porcentaje de autónomos que colaboran con nosotros repartiendo paquetes de forma independiente, con la opción y la flexibilidad de realizar entregas en las franjas horarias que mejor les convengan y obtener así ingresos adicionales".

Imagen | Amazon

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