Sam Altman coincide con Bill Gates en un tema clave para el futuro de la IA: lo importante es hacer las preguntas adecuadas

  • Sam Altman y Bill Gates están convencidos de que la clave para la innovación no está en adquirir conocimiento. Está en hacer las preguntas adecuadas

  • El CEO de OpenAI abre la puerta a un nuevo perfil profesional para la IA: un diseñador de preguntas para que la IA pueda responderlas

Sam Altman
Sin comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Jensen Huang y Mark Garman lo avanzaban hace algunos meses: ya no será necesario que los ingenieros sepan programar porque la IA lo hará por ellos. Lo que algunas de las voces más relevantes en el desarrollo de la IA, incluido Sam Altman, están tratarnos de transmitir es que lo que realmente se valorará en el futuro no son los conocimientos que se tengan, sino saber hacer las preguntas adecuadas.

"Habrá un tipo de habilidad que seguiremos valorando mucho, pero no será tanto la capacidad intelectual pura como antes", señaló el CEO de OpenAI durante una entrevista en el podcast ReThinking de Adam Grant. "Determinar qué preguntas hacer será más importante que conocer la respuesta".

Hacer las preguntas correctas

Las declaraciones, casi filosóficas, de Sam Altman hacen referencia a la importancia de saber hacer las preguntas adecuadas a la IA que sean capaces de mostrar el camino a nuevas soluciones y productos.

"Solíamos valorar la cantidad de conocimiento que uno tenía en su cerebro, y si era un recopilador de datos, eso lo convertía en una persona inteligente y respetada. Ahora, creo que es mucho más valioso ser un conector de puntos... Si uno puede sintetizar y reconocer patrones, tiene una ventaja", confirmaba Adam Grant, psicólogo, profesor en la Universidad de Pensilvania y presentador del podcast. No obstante, esa idea del aprendizaje a partir de realizar las preguntas adecuadas no es nueva.

Bill Gates contaba en uno de los artículos de su blog personal que una de las claves para la resolución de problemas no reside exactamente en tener la respuesta, sino en hacerse las preguntas adecuadas al abordarlo y encontrar las respuestas oportunas. "Desde que era adolescente, he abordado cada gran problema nuevo de la misma manera: comenzando con dos preguntas. Utilicé esta técnica en Microsoft y todavía la uso hoy. Hago estas preguntas literalmente todas las semanas sobre COVID-19", escribió Bill Gates.

Un nuevo perfil profesional: diseñador de preguntas

La reflexión de Sam Altman deja abiertas dos vías para esta nueva habilidad. La primera de ella, y más evidente, es la de un nuevo perfil profesional que, como el de ingeniero de IA, trabaja en la implementación de la IA diseñando preguntas a las que los chatbots tendrían que dar respuesta.

De hecho, ese ya es un perfil que comienza a valorarse mucho entre las empresas que lideran el desarrollo de modelos de IA. "Si no le haces una buena pregunta a una herramienta de IA generativa, no vas a obtener una buena respuesta. Es basura que entra y basura que sale", aseguraba Lydia Logan, vicepresidenta de educación global y desarrollo de la fuerza laboral de IBM en declaraciones a CNBC.

Según afirmaba la directiva de IBM, este perfil ya comienza a cotizarse con salarios muy altos en las empresas de EEUU. "No puedo enfatizar esto lo suficiente: esta es una habilidad que se puede utilizar prácticamente en cualquier lugar [en el contexto de la IA]. Es una habilidad que puede abrir la puerta a muchas oportunidades", afirmaba Logan.

Preguntar denota curiosidad

Por otro lado, la capacidad de hacer las preguntas adecuadas también se engloba en un concepto más amplio como una habilidad blanda (soft skills), asociada a la curiosidad, capacidad de adaptación y actitud de aprendizaje activo. Tal y como Mark Zuckerberg recordó durante su entrevista con Emily Chang de Bloomberg, las empresas cada vez valoran más las habilidades por encima de las titulaciones y conocimientos.

El motivo es sencillo, el futuro por descubrir que plantea la IA exige la máxima capacidad de adaptación y capacidad de aprendizaje para moverse en un terreno en el que los conocimientos quedan obsoletos rápidamente, por lo que las empresas valoran mucho más esa habilidad en los empleados que van a contratar.

Así lo confirma el informe 'Competencias laborales más demandadas para 2025' que cada año elabora la plataforma de empleo Randstad, en la que la mentalidad de crecimiento aparece como la habilidad con más demanda para los candidatos.

Sam Altman aseguró que la IA podría acabar asumiendo las tareas administrativas repetitivas de la mayoría de los lugares de trabajo, pero se mostraba convencido de que esta tecnología no podrá reemplazar por completo el intelecto humano y el pensamiento creativo. El CEO de OpenAI afirmó que las personas tendrán que ayudar a la tecnología a aprender a desarrollar el pensamiento crítico para fortalecer los argumentos y generar nuevas ideas basadas en los datos disponible.

"Sin duda, mi mayor alegría profesional ha sido tener que razonar de forma realmente creativa sobre un problema y encontrar una respuesta que nadie había descubierto antes. Lo que espero que suceda en realidad es que habrá una nueva forma de trabajar en los problemas difíciles", señaló Sam Altman durante su entrevista.

Con esa afirmación, el directivo de OpenAI define el ejemplo perfecto de un contexto de resolución de problemas mediante el proceso de pensamiento aristotélico de los primeros principios que pasa por cuestionarse todo desde el inicio.

En Xataka | El secreto de Sam Altman para generar ideas: escribirlas en un cuaderno, arrancarlas y desecharlas hasta dar con la clave

Imagen | Imagen | Flickr (TechCrunch)

Inicio