Apple suele presumir de sostenibilidad. La saca a relucir al inicio de cada keynote y se escuda en ella para decisiones como la de retirar el adaptador de carga de la caja de los iPhone. Sin embargo, algunas decisiones sutiles de ciertos productos van en línea opuesta a esa defensa. Por ejemplo, la de hacer del HomePod un altavoz que durará mucho menos de lo que podría durar por no haberle puesto un conector auxiliar, o al menos conectividad Bluetooth.
En lugar de eso, el HomePod vive a caballo entre AirPlay y la conexión Wi-Fi, basándose en un chip Apple Silicon para ello. Apple se asegura así de que el HomePod sea un altavoz que forma parte de su ecosistema (y solo de su ecosistema), pero cuando su chip quede obsoleto y su conectividad plantee complicaciones, será muy complicado darle una segunda vida. Con una toma auxiliar ese altavoz podría durar décadas. Lo que llevan en muchos salones cadenas de música de los ochenta, y ahí siguen.
Lo cual da paso a una reflexión que no tiene que ver con el HomePod.
Con fecha de caducidad
Además del auge de la electrónica de consumo, la tendencia de llevar conectividad a cualquier tipo de dispositivo, electrodoméstico o invento alternativo ha derivado en algunas situaciones extrañas. La cuenta de X Internet of Shit se encarga de parodiar al Internet of Things exhibiendo aquellos productos en los que la conectividad resulta un engorro o un absurdo, no una utilidad.
Esa conectividad, a veces de una utilidad discutible, incorporada como argumento de venta más que como mejora objetiva, tiene una contrapartida: la de los dispositivos que empeoran con el paso del tiempo. En ocasiones hasta quedar inusables. Al igual que dispositivos en los que sí tiene sentido la conectividad, pero que quedan expuestos a que su empresa los desactive, en lugar de permitir una conectividad local.
Fue lo que ocurrió con Revolv, un hub domótico que Nest dejó como pisapapeles tras comprar la compañía. Hemos mencionado al HomePod, pero en 2020 fue Sonos quien anunció que dejaría sin soporte sus altavoces de más de diez años. Seguían funcionando perfectamente, pero perderían el acceso a ciertas funciones. La empresa acabó retractándose.
¿Recuerdan a Pebble? Descanse en paz. La empresa, pionera, y los relojes de sus fieles, que acabaron, en el mejor de los casos, requiriendo hechizos y alquimia para seguir siendo mínimamente útiles.
Quienes confiaron en el Logitech Harmony Link se quedaron sin él pocos años después, porque la empresa decidió desentenderse y los dispositivos quedaron inutilizables. ¿En qué momento es aceptable que un mando a distancia dure solo seis años?
Sin fecha de caducidad
En el otro extremo, dispositivos que no tienen Internet, o porque no era una opción cuando nacieron, o porque fueron creados con la decisión consciente de que fueran offline.
Hace unos años vendí mis viejas Game Boy y Nintendo 64 con varios cartuchos de juegos. Ya me llegó el momento del arrepentimiento, no hace falta que lo comenten. La cuestión es que al comprador se le iluminó la cara cuando comprobó cómo todo seguía funcionando perfectamente.

Las consolas ejecutaban los cartuchos de la misma forma en 2017 que en 1999, no requerían actualizaciones de software que las hacían más lentas o les restaban capacidades, no habían dejado de ofrecer ciertas funciones y mucho menos habían quedado como pisapapeles. Seguían siendo exactamente igual de funcionales. Con el paso de los años no habían mejorado, pero tampoco empeorado. Ya es. Los amantes de esta época tienen en la Analogue Pocket a un aliado actual.
Algo similar ocurrió cuando volví a encender el iPod Classic: ahí estaba la discografía de Bob Dylan esperándome, sin impedirme escucharla por alguna actualización pendiente. Tal y como la dejé años atrás.
Lo mismo con otros dispositivos que no tienen Internet o lo tienen como algo de uso opcional. Una PSP, unos altavoces por cable, una calculadora gráfica, un lector de libros electrónicos. Productos que perdurarán porque seguirán funcionando hasta que revienten, no hasta que una empresa se canse de darles soporte.
La tecnología online no es positiva ni negativa, es inevitable e imperativa. Prescindir porque sí de toda tecnología offline, metiendo WiFi y dependencia de servidores ajenos en dispositivos que no deberían requerirla, sí es negativo. Viva la tecnología offline, amigos.
En Xataka | Game Boy, retro review: cómo es jugar a la Game Boy original hoy en día.
Imagen destacada | Xataka.
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incom2
La historia del Pebble no es exactamente así. Fue una puñalada trapera. La compañía fue comprada por Fitbit, que acto seguido canceló la fabricación de los relojes Pebble y dejó tirados a todos los usuarios que los teníamos comprados.
Los empleados de Pebble lograron dejar abierto el firmware y ofrecieron las especificaciones para que terceros pudieran seguir ofreciendo soporte, y de ahí nació Rebble, que actualmente ofrece soporte a los relojes Pebble mal que le pese a Fitbit (que luejo, justicia poética, fue engullida y desmantelada por Google).
vid4extr4
Los iPod tienen DRM y requieren de un iTunes que algún día se irá al cuerno. Sobre todo el iPod Classic "Video" 5G de la portada.
Entiendo la pasión de los becarios de Apple, pero difícil encontrar un ejemplo peor de "tecnología offline". Que puedas simplemente transferir música, puede, pero si quieres sacarle todo el jugo al aparato, dependes de una aplicación que a su vez depende de unos servidores.
crisct
Interesante artículo.
Como lector de hace tiempo, se agradece algo con un poco de calidad y que invite a pensar.
El otro día buscando vaporizadores de hierbas encontré uno que mediante su aplicación y BT podías modificar las presintonias de uso con tus parámetros de tiempo y temperatura favoritas. Nada que no puedas hacer con botones. Y mediante un flasheo de firmware,algo rudimentario y no exento de riesgo. Automáticamente descarté este modelo.
arabatik
Cada vez más aparatos utilizan wifi (casi) innecesariamente, y eso al final acaba repercutiendo en la durabilidad, la filtración de datos y en generar más basura electrónica; deshumidificadores, lavadoras, frigos, hornos, luces, cámaras, purificadores de aire, ventiladores, ... entiendo que hacer que estén conectados puede ofrecer ciertas ventajas, como activarlos desde el exterior de casa, pero realmente huyo de esos sistemas. Prefiero aparatos programables y sin conexión por lo habitual.
Como decía otro lector, felicidades por artículos como este que invitan a reflexionar ;)
sesme83
Bueno tenemos la doble moral ecofriendly de nuestros gobernantes. Donde por un lado te prohíben usar máquinas viejas que funcionan y que no dan problemas para cambiarlo por maquinas modernas super problemáticas y muy pensadas para romperse mediante obsolescencia programada.
Podemos hablar de vehículos como maquinaria como electrónica como en realidad todo lo actual.
Es más estoy seguro que muchas empresas tienen departamentos dedicados a estudiar durabilidad de componentes ajustando la garantía para romper en cuanto se cumpla esta.
Ahora la nueva política de poder reparar que llega con muchos años de retraso y sobre todo encontrar material de calidad para reparar nuestros móviles y dispositivos que siendo muy caros son delicados y en un desliz pueden quedar destrozados.
Doble moral no contamines y no ensucies el planeta pero nosotros dejamos que te vendan chatarra con fecha de caducidad ... mi sega mega Drive sigue funcionando en mi vieja Telefunken de los 90 en 30 años no te tenido que reparar nada y lo más que le tenido que hacer es limpiar algún cartucho que no cargaba o similar.
Y no hablemos de software donde muchas empresas te venden un aparato con ningún soporte existente corrección de errores o actualizaciones críticas incluso con fallos de salida que jamás son corregidos... por no decir lo que cuesta una actualización de mapas en el GPS privativo que lleva tu vehículo...
Y volvemos a mirar a nuestros gobernantes con cara de what viendo que no hacen nada no legislan nada no protegen nada al consumidor y donde en vez de estar defendiendo a sus votantes defienden grandes lobbys y empresas que encima no son ni de Europa donde la calidad de los productos ha perdido el norte desde hace muchos años.
Un saludo disculpar la ortografía
Kolo Raro
Le pasa lo mismo a mi vetusto ZX Spectrum, al Amstrad, Msx, Amiga, Atari, Coleco, etc.
Nunca fallan si les das vidilla de vez en cuando, incluso las viejas cintas de cassette siguen cargando igual de bien, o mal, que el primer día.
Buen artículo, igual le falta a un poco de profundidad en el mensaje pero se agradece.
Saludos.
ven
Algunos comentaristas dando leña a Apple cuando en soporte les pasa la mano por la cara a todos. Pero bueno. Estamos en España, donde junto a Latinoamérica todo lo Android es mejor.
usuario33
Totalmente de acuerdo.
Ahora parece que todo requiere Wifi, BlueTooth, etc.
Estoy pensando en una aspiradora robótica, que requiere que el mapa esté disponible en internet, para que le mandes desde Australia (por ejemplo) que te limpie una habitación de la casa.
Aunque eso pueda ser interesante.... ¿Puede funcionar sin conexión? ¿Y si un día se me cae el wifi? ¿Ya no limpia?. Igual toda la programación la podía hacer con una pequeña pantalla LED y 4 botones en el propio aparato (y así poder tenerla disponible para casi siempre).
imf017
Pero Javier, ¿cómo se te ocurre vender la N64 Pikachu y la GB Color Pikachu? Yo mataría por tenerlas, jejeje.
sanamarcar
No se que estais haciendo en la web pero al abrir articulos en segundo pestaña carga publicidad. Cada vez mas bajo...
kelsen
Eso es la obsolescencia programada de toda la vida, solo que han descubierto que hay algo más eficiente para conseguirla que hacer aparatos de mierda: putearlos por software: que vayan cada vez peor, pierdan funcionalidades, dejen de funcionar con otros aparatos... Y en muchos casos tienes a los de Aliexpress forrándose vendiéndote todo tipo de adaptadores para intentar mantener en uso algunos aparatos.