En las últimas semanas han aparecido una serie de noticias que nos han hecho revisar el calendario: ¿estamos en 2018 o más bien en 1938? Puede que ya supiéramos que hay una corriente antiinmigratoria y xenófoba en Europa, lo que no esperábamos es que uno de sus países más importantes, Italia, pudiese empezar a aplicar políticas y hacer proclamas contrarias a los Derechos Humanos mientras el resto de la Unión mira para otro lado.
Porque sí, aunque siempre ha habido guerras y catástrofes (2018 no es una excepción: ahí están los refugiados rohingya, Yemen, Venezuela), parece que estamos ante una tendencia global en la que florecen distintos retrocesos civiles que suponíamos superados. Para no perder de vista de qué eventos hablamos hemos querido recopilar esas noticias de los últimos seis meses en todo el mundo que nos hacen preguntarnos si estamos ante un nuevo paradigma deshumanizado.
1) Italia y los refugiados
El nuevo Ministro de Interior y vicepresidente Matteo Salvini dijo “no” a la entrada del barco de rescate Aquarius cuando, según las políticas comunitarias, era su deber darle acogida en sus puertos. Tras la solución de acogida de estos 600 migrantes garantizada por el Gobierno español, Italia ha vuelto a cerrar sus fronteras a otro barco de la ONG alemana Lifeline con más de 200 rescatados. Italia probablemente peleará para imponer una política de tolerancia cero ante estas embarcaciones.
2) Batalla contra las ONGs
Las embarcaciones de las ONG "no tocarán más suelo italiano", ha dicho Salvini estos días. Acusa a los barcos de ser los intermediarios de las mafias, de estar compinchados con ellas para permitir la entrada de irregulares. Nos enteramos de esto cuando el país realizó un secuestro judicial preventivo del barco Proactiva Open Arms, como ya hiciera con muchos otros. Las Organizaciones cuentan que cada día lo tienen más difícil para operar en esta zona del mediterráneo.
3) Y los censos de gitanos
En otro alarde de xenofobia, estas palabras de Matteo Salvini hicieron pensar a muchos en las listas raciales de la población que han traído consecuencias nefastas para la historia de la humanidad. "Los extranjeros que permanezcan de forma irregular en Italia serán expulsados. Los gitanos italianos, por desgracia, hay que quedárselos". La medida no es novedosa: el Gobierno de Berlusconi aprobó un proyecto similar en 2008 justo antes de ver cómo era censurado por el Parlamento europeo.
4) Estados Unidos y los "niños en jaulas"
BREAKING: Border Patrol @CBP just gave us this video of the detention facility we toured yesterday in McAllen, Texas. We weren't allowed to bring in cameras, or interview anyone. To be clear: this is government handout video. pic.twitter.com/Zjy80qIZFZ
— David Begnaud (@DavidBegnaud) 18 de junio de 2018
En abril de 2018 Estados Unidos implementó una política de “tolerancia cero” ante cualquier ingreso ilegal al territorio de su país. Esto, además de frenar las concesiones de asilo y ponerlo mucho más difícil en las fronteras, está llevando al enjuiciamiento de aquellos que intenten pasar al otro lado. Como hemos visto en los medios, miles de niños están siendo separados a la fuerza de sus familias, quedando retenidos en centros que parecen más bien campos de concentración.
5) EE.UU. dice 'no' a los Derechos Humanos de la ONU
Estados Unidos ha retirado su participación del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, un organismo para luchar contra las violaciones de los derechos más básicos de la ciudadanía de distintos países del planeta. Los norteamericanos acusan a la institución de hipócrita por permitir abusos de Rusia, China, Cuba o Venezuela mientras que son el azote constante de Israel. Es lo mismo que esgrimieron para salirse recientemente de la Unesco. Varios Estados miembros del Consejo también creen que el órgano debe reformarse, pero EE.UU. ha sido el primer Estado en abandonar su seno.
6) Adiós, neutralidad de la red
Ahora sí que sí que sí. Estados Unidos ha permitido que las operadoras ofrezcan diferentes calidades o velocidades de conexión a Internet dependiendo del servicio en base a criterios propios. Esto, que sólo permitían hacer hasta ahora regímenes totalitarios, va a perjudicar a los estadounidenses, a los que visitemos webs albergadas en servidores estadounidenses (que son muchas), a la libre competitividad entre páginas y podría incluso contagiar a los legisladores de otras zonas del planeta.
7) Irán sigue con el velo puesto
La ley vigente desde la Revolución Islámica de 1979 impide a las mujeres iraníes quitarse el velo en público. Se trata de una norma desfasada contra la que han protestado miles de jóvenes y mayores en los últimos meses. Irán, lejos de replantearse su doctrina, ha arrestado a 29 de ellas por “perturbar el orden social”, y siguen en prisión a la espera de juicio con fianzas que rondan los 90.000 euros.
8) El pueblo húngaro revalida a Orbán
En abril los húngaros apoyaron en las urnas la tercera legislatura consecutiva de Viktor Orbán. Es una mala noticia para Europa no sólo por ser un referente del euroescepticismo, por ser otro grupo político más antiinmigratorio como los que están triunfando en el continente, sino porque Orbán encarna con más fuerza en cada mandato un autoritarismo al estilo de Putin o Xi Jingping, laminando poco a poco los derechos electorales de la oposición, controlando la prensa y reformando la constitución. Es decir, llevando al país cada día más lejos de la democracia.
9) También están contra los inmigrantes
Desde junio ya estaría. El Parlamento húngaro ha dado luz verde, pese a las advertencias de Bruselas, a la llamada Ley Stop Soros (expulsando a esa organización internacional privada por los Derechos Humanos) y a una reforma de la Constitución contra la reubicación de refugiados. Europeos sí, personas de cualquier otra parte del mundo, no.
10) Bélgica: registrando viviendas en busca de 'sinpapeles'
En enero algunos diputados europeos y distintos trabajadores de ONGs nacionales pusieron el grito en el cielo con el último proyecto de ley del país. El NV-A intentó sacar adelante una legislación que permitiese a la policía registrar viviendas particulares en busca de inmigrantes ilegales con la mera aprobación de un juez de instrucción, cosa que permitiría que el procedimiento se convirtiese en rutinario. Bélgica, con Theo Francken como cabeza visible, también está desafiando a la UE con discursos y gestos antiinmigratorios muy preocupantes.
11) China: adiós al anonimato, hola 1984
Desde este mes China ya aplica de forma experimental un programa de “crédito social” por el que los derechos de un ciudadano, vigilado casi en todo momento por cámaras, pueden mermar hasta prohibirle salir del país, conseguir un préstamo bancario o lograr un trabajo. Un comentario antigubernamental en tus redes sociales pueden llevarte a perder puntos. No hay ahora mismo paradigma que nos acerque más a la pérdida del derecho a la intimidad y a la libertad ideológica que este planteamiento.
12) Y deja de ser una autocracia para convertirse en una dictadura
Desde marzo el Partido Orgánico de China ha eliminado el límite de dos mandatos presidenciales para ostentar el cargo de Secretario General. Es decir, que Xi Jinping y otros futuros líderes chinos podrán mantenerse en el puesto de forma vitalicia. Si bien China no es una democracia, este gesto lleva al país aún más lejos de ese objetivo. También preocupa cómo está aumentando el culto mesiánico a Jinping (como ya harían con Mao) y cómo se reprimen y persiguen más duramente las críticas al Gobierno.
13) Quim Torra, Cataluña y los discursos racistas
El independentismo catalán no tiene en su nuevo presidente de la Generalitat, Torra, un ejemplo de tolerancia demasiado bueno. Entre sus mensajes acerca del catalanismo ha llegado a hablar del ADN catalán, que se mezcló en su día con “la raza del socialista español” y que ha mutado hoy a una especie nueva. También ha dicho de quienes vivían en Cataluña sin identificarse como independentistas que son “carroñeros, víboras, hienas. Bestias de forma humana, sin embargo, que emiten odio”. En su país también habría “gente que ya se ha olvidado de mirar al sur y vuelve a mirar al norte, donde la gente es limpia, noble, libre y culta. Y feliz". Es decir, una exaltación racial que deshumaniza al prójimo, especialmente a los españoles.
14) España contra tuiteros y raperos
No importa saber que estamos en uno de los países más respetuosos con los Derechos Humanos del mundo. Sigue siendo inquietante ver cómo las instituciones públicas españolas, y muy especialmente la Audiencia Nacional, persiguen mensajes que deberían estar protegidos por la libertad de expresión o que, en todo caso, deberían ser denunciados por los afectados, no por el Estado. No lo decimos nosotros, lo dice Amnistía Internacional en una denuncia de las restricciones "desproporcionadas" cometidas en los últimos tiempos.
