"¡Olvida la muerte y busca la vida!" son las palabras de ánimo con las que Gilgamesh, la estrella de la epopeya de 4000 mil años de antigüedad, se marca el primer eslogan heróico de la historia.
Al mismo tiempo, este joven rey resume las reflexiones sobre mortalidad y humanidad que residen en el corazón del poema épico más antiguo del mundo. Si bien han cambiado muchas cosas desde entonces, los temas de esta epopeya siguen siendo muy relevantes para los lectores modernos.
Dependiendo de cómo la quieras entender, la historia de Gilgamesh se puede considerar como una biografía basada en el mito de un rey legendario, una historia de amor, una comedia, una tragedia, una aventura emocionante o incluso una antología de historias sobre el origen de la civilización.
Todos estos elementos están presentes en la narración y la diversidad textual solamente se ve superada por su refinamiento literario. Si tenemos en cuenta la antigüedad de la obra, sorprende ver cómo este poema épico consigue mezclar de forma magistral complejas dudas existenciales, imágenes vivas y personajes dinámicos.
La historia comienza con Gilgamesh reinando en la ciudad de Uruk como un tirano. Para mantenerlo ocupado, los dioses mesopotámicos le crean un compañero: Enkidu, un hombre salvaje y peludo.
Gilgamesh se propone humanizar a Enkidu y para ello le encomienda a una semana de sexo con la sabia sacerdotisa Shamhat (cuyo nombre en el lenguaje acadio sugiere tanto belleza como voluptuosidad).
Gilgamesh y Enkidu se vuelven inseparables y se lanzan a la búsqueda de fama y gloria eternas. Las peripecias de los héroes enfadan a los dioses, que hacen que Enkidu tenga una muerte temprana.
La muerte de Enkidu es un momento crucial en la narrativa de la historia porque el amor fraternal entre Gilgamesh y Enkidu transforma al protagonista y la muerte de Enkidu le deja solo y temiendo a su propia mortalidad.
El héroe se disfraza con la piel de un león y viaja hasta encontrar a Utanapishtim, un anciano que sobrevivió a la gran inundación (muchas veces se le compara con el personaje de Noé de la Biblia). Después de realizar un viaje peligroso por las aguas de la muerte, Gilgamesh finalmente encuentra a Utanapisthim y le pide el secreto de la inmortalidad.
En uno de los primeros anti-clímax de la historia de la literatura, Utanapishtim le dice que no lo tiene y la historia finaliza con Gilgamesh volviendo a casa a la ciudad de Uruk.
Mindfulness mesopotámico
Lo de Gilgamesh y sus aventuras solamente puede describirse en términos superlativos: durante sus viajes legendarios, el héroe se enfrenta a deidades y monstruos, encuentra (y pierde) el secreto de la eterna juventud y viaja hasta los confines del mundo.
A pesar de los elementos fantásticos de la historia y de su protagonista, Gilgamesh no deja de ser un personaje muy humano que experimenta los mismos desamores, limitaciones y pequeños placeres que confirman las características universales de la condición humana.
Gilgamesh explora la naturaleza y el significado de ser humano y se pregunta muchas cosas que siguen siendo motivo de debate hoy en día: ¿Cuál es el significado de la vida y del amor? ¿Qué es realmente la vida y si la estoy viviendo de forma correcta? ¿Cómo podemos asumir la brevedad y la incertidumbre de la vida y cómo podemos afrontar las pérdidas?
El texto proporciona muchas respuestas, permitiendo al lector reflexionar sobre las mismas junto con el héroe. Uno de los mejores consejos viene de parte de Siduri, la diosa de la cerveza (sí, una diosa de la cerveza), que le sugiere a Gilgamesh que se centre menos en prolongar su vida y que le aconseja que disfrute de los pequeños placeres de la vida, como pueden ser la compañía de los seres queridos, la buena comida y la ropa limpia. Puede que lo que en realidad esté haciendo sea darle consejos de un tipo de mindfulness mesopotámico.
El poema épico también le ofrece al lector un supuesto práctico muy útil sobre qué no hacer si te encuentras en la excepcional circunstancia de tener que reinar en la antigua ciudad de Uruk. En la antigua mesopotamia, el rey se tenía que comportar correctamente si quería mantener la paz en la tierra y en el cielo.
A pesar de la importancia de sus obligaciones reales, Gilgamesh parece que lo hace todo mal: mata a Humbaba, el guardián medioambiental protegido por los dioses y saquea su valioso bosque de cedros. También insulta a Ishtar, la hermosa diosa del amor y acaba con el poderoso Toro del Cielo.
Encuentra la clave para la eterna juventud, pero la pierde poco después por culpa de una serpiente que pasaba por allí (aprovechando para explicar cómo la serpiente "vuelve a nacer" tras mudar su piel). A pesar de estos contratiempos, Gilgamesh busca la fama y la inmortalidad, pero lo que encuentra es el amor de su acompañante, Enkidu, así como una comprensión profunda de los límites de los seres humanos y de la importancia del sentimiento de comunidad.
Recepción y recuperación
El Poema de Gilgamesh era extremadamente famoso en la antigüedad y su impacto se puede ver en muchas narraciones literarias posteriores como en los poemas homéricos y en la biblia hebrea. Sin embargo, en nuestros días hasta los lectores más eruditos de la literatura antigua tendrían problemas para resumir su contenido o incluso para nombrar a sus protagonistas.
¿A qué se puede deber esta amnesia en la cultura moderna alrededor de una de las obras más importantes de la literatura antigua?
La respuesta está en cómo se ha recibido la historia a lo largo del tiempo. Mientras que muchas de las grandes obras de la antigua Grecia y de la antigua Roma han sido estudiadas de forma continua a lo largo del desarrollo de la cultura occidental, el Poema de Gilgamesh procede de una época en el olvido.
La historia tiene su origen en Mesopotamia, una zona de la antiguedad situada en el Oriente Próximo que se corresponde aproximadamente a los países modernos de Irak y Kuwait, así como a partes de Siria, Irán y Turquía. A Mesopotamia se la conoce como "la cuna de la civilización" por su sistema de agricultura y sus ciudades tempranas.
La historia de Gilgamesh se escribió en escritura cuneiforme, el sistema de escritura más antiguo que se conoce. Los fragmentos más antiguos de la historia de Gilgamesh proceden de cinco poemas sumerios y existen otras versiones de textos escritos en elamita, hitita y hurrita. La versión más conocida es la versión babilonia estándar, escrita en acadio (un idioma que utilizaba la escritura cuneiforme y que funcionaba como el lenguaje diplomático durante el segundo milenio a. C.).
La desaparición del sistema de escritura cuneiforme hacia el primer siglo d. C. aceleró la caída de Gilgamesh hacia el anonimato.
Durante casi dos milenios las tablillas de arcilla que contenían las historias de Gilgamesh y sus compañeros estaban perdidas y enterradas junto a otros miles de textos en escritura cuneiforme bajo las ruinas de la gran Biblioteca de Asurbanipal.
El redescubrimiento moderno del poema fue un momento decisivo para comprender cómo era el Oriente Próximo en la antigüedad. El primero en traducir la tablilla XI del poema fue el académico George Smith del British Museum en 1872 tras haber aprendido la escritura cuneiforme por su cuenta. Smith descubrió la presencia de una historia sobre una inundación en la antigua Babilonia que tenía un sorprendente paralelismo con la historia sobre la inundación en el Génesis de la Biblia.
Muchas historias cuentan (aunque puede ser algo apócrifo) que cuando Smith empezó a descifrar la tablilla se puso tan nervioso que tuvo que quitarse toda la ropa. Desde que comenzara el proceso a mediados del siglo XIX, la recuperación del catálogo de literatura cuneiforme continúa a día de hoy.
En 2015, la publicación de un nuevo fragmento de la tablilla V por Andrew George y Farouk Al-Rawi fue noticia a nivel internacional. El descubrimiento del este fragmento coincidió con el aumento de la sensibilidad mundial ante la destrucción de antigüedades en Oriente Medio durante el mismo año. El Washington Post hacía una comparación entre la "historia conmovedora" del hallazgo y la destrucción y el saqueo que se estaban produciendo en Siria e Irak.
Ecología antigua
La nueva sección de la tablilla V contiene aspectos ecológicos que se corresponden con las preocupaciones modernas sobre la destrucción del medioambiente. Por supuesto, existen posibles anacronismos si intentamos predecir las preocupaciones medioambientales en un texto antiguo redactado miles de años antes de la revolución industrial
Sin embargo, no hay duda de que hay mucha susceptibilidad en la representación de la fauna y flora en el poema, sobre todo si tenemos en cuenta el largo historial de cómo hemos tratado al medioambiente y a los animales que lo habitan.
En Gilgamesh, la naturaleza es un lugar de belleza y pureza, así como el hogar para una fauna y una flora abundantes. El esplendor y la grandeza del bosque de los cedros se describe de forma poética en la tablilla V:
(Gilgamesh y Enkidu) se maravillaban ante el bosque,
Observando la altura de los cedros …
Contemplaban la Montaña de los Cedros, la morada de los dioses, la tarima del trono de las diosas …
Dulce era su sombra, llena de placeres.
Cuando los héroes hacen una pausa para admirar la belleza del bosque, su interés no es puramente estético. Gilgamesh y Enkidu son conscientes del valor económico de los cedros y el texto proporciona una imagen clara del conflicto entre intereses comerciales y ecológicos.
Dónde leer Gilgamesh
Desde que Gilgamesh reapareciera en la conciencia popular durante los últimos siglos, la versión babilonia estándar del poema está disponible en muchas traducciones y la original fue confeccionada por el cura, escribano y exorcista, Sin-leqi-unini hacia el año 1100 a. C.
El texto predilecto para los académicos es el libro de Andrew George en inglés The Babylonian Gilgamesh Epic: Introduction, Critical Edition and Cuneiform Texts (2003).
A pesar de ser una obra de mucho prestigio en todos los aspectos, con sus dos tomos es demasiado extensa y al lector más casual le resultará más fácil la versión The Epic of Gilgamesh: A New Translation (1999) del mismo autor. La versión que mejor se lee entre todas las interpretaciones modernas es la de David Ferry Gilgamesh: A New Rendering in English Verse (1992) porque le da una interpretación poética y potente al material original.
Al igual que la serpiente que le roba a Gilgamesh la planta de rejuvenecimiento, el Poema de Gilgamesh ha envejecido bien: los temas de la historia tratan las tensiones entre el mundo natural y el civilizado, el poder del amor verdaderos y las dudas sobre en qué consiste una buena vida. Todas estas cuestiones son tan relevantes como lo eran hace 4.000 años.
Autor: Louise Pryke, Profesora de Lengua y Literatura del Antiguo Israel, Universidad de Macquarie.
Este artículo ha sido publicado originalmente en The Conversation. Puedes leer el artículo original aquí.
Traducido por Silvestre Urbón.