Era una historia demasiado buena para ser cierta. Ninguna pareja de entrañables ancianos se escapó de la residencia para acudir al macrofestival Wacken Open Air y sentir así los acordes del metal y menear la cabellera plateada. Una anécdota perfecta para funcionar como combustible de muros de redes sociales, con comentarios como “el rock nunca muere” o “yo haré lo mismo cuando sea mayor” que recorrieron ayer miles de perfiles en Alemania, España y otras partes del mundo, ya que muchos medios se hicieron eco de la noticia viral que, en realidad, se trataba de un cúmulo de imprecisiones que suscitaron el error.
Dos ancianos se escapan de una residencia para acudir a un macrofestival de metal https://t.co/vTp3Fa16Bs
— El Español (@elespanolcom) 6 de agosto de 2018
Según el bulo, la policía, después de alertada por los residentes del centro, dieron “con la pareja de jubilados a las 3 de la madrugada del viernes en el festival de música Wacken Open Air”. El medio Deutsche Welle recogió que “la portavoz de la policía Merle Neufeld les aseguró que los ancianos estaban ‘desorientados y aturdidos’ y que ‘se resistieron a abandonar el festival’”, cosa que indignó a muchos internautas, que vieron en esto el carácter aguafiestas de los agentes de seguridad.
Para redondear el tema, algunos medios decoraron la noticia afirmando que cuando los ancianos llegaron a la casa compartieron “su experiencia con el resto de compañeros de la residencia”. Como le ha comentado la Policía de Itzehoe a El País, todo empezó con "una nota de la Policía que decía que dos personas mayores de una residencia del distrito de Ditmarschen estaban de camino a Wacken (el pueblo en el que se celebra el festival de heavy metal) y no querían subirse a un taxi para regresar a la residencia".
Los hombres de “avanzada edad” tenían 58 y 59 años, ambos sufren una enfermedad mental, y se acercaron a la avenida principal del pequeño municipio alemán de menos de 2.000 personas en el que se estaban celebrando conciertos, pero gratuitos y para los locales. Las fiestas de verano. No se sabe si son fanáticos de Judas Priest, Danzig o Sepultura, pero lo que es seguro es que no tenían entradas para el festival.
Estaban desorientados y según el comunicado policial recogido por la cadena NDR, “aparentemente habían perdido el autobús de regreso a casa" que normalmente tomaban. Tras discutir con ellos se les llevó de vuelta a la residencia en torno a las seis de la mañana.
#translationtime
— Wacken Open Air (@Wacken) 6 de agosto de 2018
„Assisted wacken. No discrimination of seniors“
Of course not, we might add. Because you’re never too old too rock. #wacken #metalfamily #respect #buildingbridges https://t.co/szE7iQ7BWY
Pero en la nota de prensa no se precisaba el Wacken al que se aludía, y medios nacionales interpretaron la fuga de dos “ancianos” a este lugar el recinto privado, y no como la localidad. Además el propio festival compartió en Twitter una captura con dos ancianos metaleros diciendo que “no se discriminaría a los fans seniors”, lo que pudo ayudar a la confusión.