Qualcomm presentó ayer su nuevo Snapdragon 8 Elite, su procesador estrella para teléfonos móviles. Junto al mismo, presentan unas horas más tarde las plataformas Snapdragon Cockpit Elite y Snapdragon Ride Elite, soluciones que incorporan las últimas tecnologías de Qualcomm aplicadas al mundo del coche conectado.
La compañía tiene bastante claro el potencial que puede llegar a alcanzar un coche a nivel tecnológico si se equipa con el hardware necesario, y estas dos plataformas son las mejores muestras de a dónde podría llegar la automoción en los próximos años.
La compañía ofrece una solución integral para los fabricantes de automóviles llamada Snapdragon Digital Chassis, compuesta por cuatro pilares: Snapdragon Auto Connectivity, Snapdragon Cockpit, Snapdragon Ride y Snapdragon Car-to-Cloud. Las novedades recientes están centradas en dos de estos elementos clave: Snapdragon Cockpit y Snapdragon Ride.
Estas incorporan ahora la nueva CPU Oryon, tres veces más rápida que en generaciones anteriores. El salto en NPU es bastante mayor, 12 veces más rápida que la generación previa. Pero, ¿en qué se traducen estos números?
Los coches están repletos de pantallas, cada vez tienen más. Estas pantallas renderizan gráficos, cargan interfaces y tienen que cargar sistema operativo, tal y como lo haría un móvil. Las nuevas plataformas de Qualcomm permitirán a los fabricantes de coches seguir avanzando en interfaces de usuario cada vez más rápidas.
También abren la puerta a resolución 4K en pantallas de hasta 16 pulgadas dentro del habitáculo, así como audio segmentado por zonas mediante IA. Estas plataformas se encargan también de procesar la información de los sensores, permitiendo una lectura de mayor resolución -lectura de señales, peatones, elementos de la calzada, etc.-
Imagen | Qualcomm
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