Con la categoría de smartwatches haciendo una pausa para aclararse sobre cómo enfrentarse al mercado, llega a las tiendas el nuevo Apple Watch Series 2. Sí, es prácticamente idéntico por fuera al modelo original, pero por dentro ha cambiado lo suficiente para pensar en él como una segunda generación que se centra en lo que sí se sabe que está funcionando en el mundo de los wearables: la cuantificación y medición de nuestra actividad.
Con más espíritu deportivo que su antecesor por la inclusión de GPS y resistencia al agua, el Apple Watch Series 2 pasa por la mesa y actividades de prueba de Xataka. ¿Habrá conseguido demostrarnos de lo que es capaz y convencernos? En Xataka ya tenemos ya el análisis completo del Apple Watch Series 2.
Apple ha rectificado: de reloj de moda a smartwatch deportivo
Si hiciéramos un "encuentra las siete diferencias" entre el Apple Watch de primera generación y el nuevo modelo que acaba de llegar al mercado, es probable que nos quedáramos en blanco marcando las X en las dos imágenes.
El exterior del nuevo Apple Watch es idéntico al modelo del año pasado, según el material o color que escojas; en peso y grosor también estamos prácticamente en la misma situación. Esto significa que llevar el Apple Watch Series 2 no es nada incómodo una vez que lo llevas en la muñeca, teniendo unas dimensiones aceptables incluso la versión de 42 mm, pero es considerablemente grueso. Incluso aumenta muy ligeramente en esta segunda generación, quedándose como lo más llamativo a nivel de apariencia.
Con su diseño ya conocido y nada destacable, Apple sigue confiando en las correas intercambiables como el alma de personalización y toque de distinción de su Apple Watch. Con el espíritu deportivo a nivel de uso que Apple le ha dado a la nueva versión, tanto las correas de silicona como las de nylon son las que mejor encajan. Si ya tenías correas que usaste en la generación anterior, son plenamente compatibles.
Apple Watch Series 2 | |
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Pantalla | AMOLED 1000 nits |
Resolución | 272x340 (38 mm) / 312x390 píxeles (42 mm) |
Protección | Vidrio ion-X (Aluminio) y Zafiro (Acero) |
Dimensiones | -- |
Peso | -- |
Sistema operativo | WatchOS 3 |
Compatibilidad | iOS |
Procesador | Apple S2 (dual core) |
Memoria interna | 2 GB (no ampliable) |
RAM | -- |
Conectividad | GPS, BT 4.0, Wifi n, podómetro y sensor cardíaco |
Resistencia agua | Sumergible hasta 50 metros | Batería | 273 mAh (38 mm) / -- mAh (42 mm) |
Precio | Desde 439 euros |
Según el modelo que escojas, aluminio o acero, te llevarás una correa de serie u otra. Ampliar las posibilidades de combinación no es barato si optas por correas oficiales de Apple, pero eso es algo habitual en el mundo de los fabricantes de wearables con sus accesorios originales.
Preparado para sumergirlo y poder nadar con él
El cambio o novedad más relevante en el nuevo Apple Watch 2 es la resistencia al agua mejorada. No hay nada más frustrante para quien usa un reloj que mide su actividad que tener que desprenderse de él cuando acude a la piscina o incluso en algunos modelos, para una simple ducha.
El nuevo Apple Watch Series 2 se lanza de lleno a competir con otros relojes deportivos con GPS (a nivel de consumidor, todavía no puede competir con los dedicados) gracias a la posibilidad de sumergirlo hasta 50 metros. Esto hace posible que realicemos natación sin problema, o que en verano podamos mantenerlo puesto mientras vamos a la playa o la piscina por ocio.
El sistema que ha diseñado Apple para conseguir que se pueda sumergir su nuevo Apple Watch es cuando menos peculiar. Cuando le indicamos al Apple Watch que vamos a sumergir el reloj, que hay que hacerlo por medio de la actividad Natación en la aplicación de entrenamiento (podemos especificar si es en piscina o aguas abiertas), la pantalla queda bloqueada (no podemos hacer nada con ella) y podemos ver el símbolo de una gota de agua en la parte superior.
Para poder detener una actividad de natación, por ejemplo, pulsamos a la vez la corona y el botón lateral. Para seguir con la actividad, lo mismo. Una vez acabada la sesión debemos girar la corona lateral, bastante (algo que hace que no se pueda desactivar el modo de natación de forma accidental), momento en que el agua que ha quedado almacenada en el altavoz del reloj se expulsa gracias a la vibración de la membrana del altavoz, para lo que se emiten un par de pitidos. Lógicamente esta acción hay que hacerla una vez fuera del agua y con las manos no muy mojadas pues será complicado deslizar las opciones en la pantalla capacitiva del reloj.
En caso de que queramos meternos al agua sin que la actividad quede registrada, hay un acceso directo al modo específico deslizando desde abajo en la pantalla. Tras pulsar la gota, la pantalla queda bloqueada y el sistema protegido para que podamos sumergirnos lo que queramos. Pero la información en pantalla sí que aparece y detecta perfectamente el giro de muñeca, por lo que aunque no podamos tocar la pantalla para activarla, sí que podemos girarla. Para volver al estado normal basta con girar la corona y sonará el pitido que nos asegura que el agua de los altavoces se ha retirado correctamente.
Nadando con el Apple Watch Series 2
La función de medición de la actividad de natación ha sido cuidada especialmente por Apple. Es el principal argumento para que el Apple Watch pase de ser resistente a las salpicaduras a completamente sumergible y por ello, poder ser usado como reloj deportivo en sesiones de natación, algo que no podemos encontrar salvo en relojes deportivos especializados.
Hay dos modos de medir la actividad de natación: en piscina o en aguas abiertas. Si optamos por la primera, podemos indicar de forma precisa la longitud de la piscina en la que haremos el ejercicio, de manera que los largos queden registrados de forma exacta. También en cada actividad de natación se recoge información de la distancia, ritmo, calorías consumidas y frecuencia cardíaca. Aquí Apple destaca también por esa posibilidad de medir las pulsaciones con el reloj incluso debajo del agua.
Pero hay más. Gracias al acelerómetro, el Apple Watch Series 2 identifica el estilo de natación, y lo hace de forma bastante precisa. Cuando se trata de natación en aguas abiertas, el GPS es el encargado de realizar mediciones y grabar nuestra ruta de la misma manera que en una carrera o cuando usamos el entreno de bicicleta.
Un smartwatch que por fin sirve para algo más que tener notificaciones
Aunque el nuevo Apple Watch Series 2 no altera en nada su diseño, sí que hay que conocer que sus controles físicos cambian. No es algo único del nuevo reloj sino algo que ha llegado realmente con watchOS 3.
Lo ridículo que resultaba usar el único botón físico (además de la corona) para usos minoritarios como ocurría antes de watchOS 3, es ahora un acertado acceso directo a las aplicaciones que tenemos en ejecución.
Al pulsar una sola vez ese botón accedemos a una especie de multitarea donde las aplicaciones que hayamos decidido que permanezcan allí van actualizando su información en segundo plano, por lo que podemos acceder a ellas de forma inmediata y encontrándonos que no hay que esperar a que los datos se tengan que actualizar.
En esa ejecución en segundo plano podemos mantener hasta 10 aplicaciones al mismo tiempo. Si superamos ese número debemos acceder a la opción correspondiente (Mi reloj --> Dock) en la aplicación Watch en el iPhone y eliminar alguna de las actuales. También se pueden eliminar desde el propio Apple Watch lanzando hacia arriba.
Lo que no me gusta del manejo diario del Apple Watch con WatchOS 3 es que los vistazos desaparecen. Yo los hubiera dejado, pero también es cierto que, si lo tienes bien configurado y asimilas la nueva manera de manejarse con el botón lateral, es una forma cómoda de hacer prácticamente lo mismo.
La combinación del uso de este botón para acceder de forma rápida a aplicaciones "en segundo plano" con WatchOS 3 y el mejor procesador del Apple Watch Series 2 da como resultado que el problema de origen de la primera versión, el retardo desesperante para que una aplicación se ejecutara (incluso las nativas de Apple), ya no está presente. No os puedo decir que en todos los casos la ejecución de las aplicaciones sea inmediata, pero los varios segundos que se tardaba hace un año en lanzar por ejemplo Amazon en el reloj de Apple es ahora cuestión de solo un par.
Esa mejora de velocidad de funcionamiento se aprovecha tanto en el nuevo Apple Watch Series 2 como el modelo Series 1, que ha renovado su procesador por uno nuevo de doble núcleo.
Esta base sería ideal para el crecimiento del Apple Watch como smartwatch. Hay un amplio abanico de aplicaciones para él, ya funcionales y que son una realidad, pero todavía encontramos que muchas de ellas no aportan realmente nada con su presencia en la pantalla de un reloj. Curiosamente las que más son precisamente de medición de actividades.
Hay maneras para que podamos considerar al nuevo Apple Watch Series 2 como un reloj avanzado donde sacar partido de aplicaciones en la pantalla del propio reloj y no un mero chivato de notificaciones, que era lo que en realidad había acabado siendo el Watch original para muchos usuarios, pero aquí Apple está en manos de los desarrolladores.
La batería progresa adecuadamente
Hablar de GPS en un smartwatch se asocia habitualmente a una penalización en la batería. Pero vamos mejorando y por ahora, en este Apple Watch Series 2 no debes temer en un descenso de la misma porque el reloj la incluya de serie.
La aceptable autonomía de la primera generación tras las actualizaciones del sistema operativo, que en mi caso, con un uso bastante intenso a nivel de notificaciones rondaba los dos días sin problema alguno, se mantiene en este Apple Watch Series 2.
En nuestra primera prueba salimos a correr con el nuevo Apple Watch y el modelo de la generación anterior (ambos actualizados a WatchOS 3) y tras una hora de actividad con el GPS a pleno rendimiento, la batería del Apple Watch Series 2 descendió un 10%. Midiendo la misma actividad pero usando el GPS del iPhone, la primera versión del reloj se quedó en un 9% de batería gastada.
Nuestra experiencia, salvo que seas corredor de largas distancias o uses el Apple Watch Series 2 para travesías en bicicleta de varias horas cada día, nos dice que podemos llegar con un 35-40% de batería restante si incluimos una hora de actividad con el GPS activado. Es la media que hemos obtenido estos días de prueba del nuevo Apple Watch Series 2.
La inclusión del GPS también reduce algo la autonomía máxima haciendo ejercicio. Con el modelo anterior conseguimos algo más de 7 horas de medición de ejercicio hasta que se agotó la batería. Con este Apple Watch Series 2 la cifra se ha quedado en 5 horas y media. Es una cifra inferior a la de los relojes deportivos exclusivos pero muy positiva para el tipo de reloj del que estamos hablando.
También mejora esta generación del Apple Watch la carga inalámbrica. El cable larguísimo y el sistema de inducción magnética sigue siendo una molestia para la carga cómoda si no tienes una buena base de carga. Pero al menos el tiempo para una carga completa se ha reducido algo.
En nuestras pruebas, desde un 3% de batería, conseguimos la carga plena en unas dos horas, lo que se traduce en casi una hora menos que con el primer modelo. En todo caso nos parece una cifra todavía muy alta para un dispositivo que no todo el mundo deja por las noches cargando.
Salir a hacer ejercicio sin teléfono encima
¿Merece la pena optar por el Apple Watch Series 2 en vez del Series 1 que ha mejorado el procesador y recibe también WatchOS 3? Todo dependerá de lo esencial que sea para ti poder salir a hacer ejercicio sin el smartphone encima. Es la ventaja que tiene el nuevo Apple Watch respecto a la generación anterior, y algo que ya era habitual en el ecosistema Android Wear.
La inclusión del GPS en el smartwatch permite que las actividades que queremos registrar no dependan como hasta ahora del teléfono móvil. La implementación es muy acertada y transparente para el usuario. En todas las situaciones en que hemos probando el Apple Watch Series 2 sin teléfono conectado, la detección de satélites para usar el GPS ha sido inmediata. Es un variable de la ecuación de la que podemos olvidarnos completamente.
Si complementamos con la ya existente posibilidad de llevar música almacenada en el reloj y la conexión de auriculares inalámbricos, el Apple Watch Series 2 ha conseguido un buen posicionamiento como reloj deportivo.
Respecto a la música, no todo son buenas noticias. El Apple Watch es aprovechable para ello sin smartphone de por medio si tienes Apple Music o música comprada en iTunes.
Pantalla más brillante
Sin variar ni tecnología del panel (sigue siendo AMOLED) ni tamaño o resolución, la pantalla del Apple Watch Series 2 ha dado un importante paso adelante en calidad. El motivo no es otro que un brillo el doble que en la generación anterior.
La pantalla del Apple Watch original se veía de manera excelente en interior, pero en exteriores sufría. Con una pantalla más brillante, Apple refuerza este elemento ahora que querremos verlo más a menudo en exteriores por el buen funcionamiento como smartwatch pero también como reloj deportivo.
Un elemento que se mantiene intacto de la primera generación del Apple Watch (ahora Series 1, por si lo quieres buscar ya que es 100 euros más barato) es el sensor de frecuencia cardíaca.
Situado en la parte inferior, da valores ajustados a la realidad pero como pasa con la inmensa mayoría de pulsómetros de muñeca por luz, cuando hacemos ejercicio intenso donde se combina sudor sobre la piel o bastantes vibraciones, la medición falla. O más bien deja de realizar mediciones.
Lo recomendable es llevar más ajustado el reloj a la muñeca cuando realizamos actividades que vayan más allá de un paseo, pero ni en esos casos funciona cuando por ejemplo estamos realizando un descenso en bicicleta a alta velocidad y con vibraciones, o corremos a ritmo fuerte.
En la función deportiva del nuevo Apple Watch 2 tiene un papel importante la aplicación de Ejercicio. Con ella accederemos a la medición y registro de diferentes actividades como Bicicleta, Correr, Andar, Andar en cinta, Correr en cinta, Bicicleta estática, Elíptica, Remo, Stepper y las nuevas de nadar en piscina o aguas abiertas. En todas estas actividades podemos indicarle el objetivo del ejercicio, que puede ser por tiempo, consumir un número concreto de calorías, distancia o directamente libre.
Si el ejercicio que vamos a realizar no está incluido en los principales y para los que hay acceso directo, podemos optar por la cesta de otros, donde podemos meter los que queramos. Cuando acabamos una de esas sesiones se nos da la oportunidad de asignar una actividad o deporte concreto, desde curling a pesca. Sí, como lees.
Aunque Apple ha mejorado sustancialmente la función de medición de actividades gracias al GPS, principalmente en la inclusión de la ruta en un mapa o exactitud de la distancia recorrida en carreras o bicicleta, todavía la encuentro varios pasos por detrás no solo de relojes deportivos dedicados sino también de clásicos de la medición de actividades como Fitbit.
Echo mucho de menos la detección automática de una actividad y por qué no, la de sueño. Ahí tanto el propio Fitbit como marcas de referencia deportivas han trabajado en ofrecer la mejor información y la más aprovechable para quien usa el reloj como elemento esencial para comprender cómo entrena en diferentes actividades.
Que Apple quiere medir el ejercicio que hacemos pero optando por su "filosofía" de hacerlo sencillo para el usuario queda perfectamente reflejado en la información que podemos analizar tras cada ejercicio. Apple "procesa" la información como hace con las fotos en un iPhone, y pese a disponer de los datos concretos de nuestra actividad, por ejemplo no hay un detallado traslado de las pulsaciones y zonas en las que trabajamos cuando corremos. Todo se queda en calorías consumidas, distancia, desnivel acumulado (no hay altímetro, ojo), tiempo empleado, ritmo medio y por kilómetro, así como la frecuencia cardíaca media. Nada de la evolución de ésta.
Con el GPS podemos tener un mapa detallado de la ruta seguida e incluso el tiempo y datos meteorológicos del día del entreno. Pero es información que solo se puede consultar en el iPhone y que además (y lógicamente) se basa en los mapas de Apple. Si de otras aplicaciones estabas acostumbrado a diferentes leyendas de colores para el ritmo de tus carreras, en el mapa que saca Apple viene también recogido.
Si queremos ir más allá, como pasa con los controles manuales de las fotos en el iPhone, Apple deja esa faceta en manos de las aplicaciones de terceros.
Dicho lo que menos nos gusta, hay que darle una buena palmada en la espalda a Apple y felicitarlo por el motor háptico del Apple Watch. No solo es muy cómodo para conocer con mucha discreción y sin molestias las notificaciones, sino que cuando estamos haciendo ejercicio es una motivación e información muy valiosa que recibe un corredor cuando alcanza determinados hitos en su ejercicio, como puede ser cada kilómetro que recorre.
Nuevo Apple Watch Series 2: la opinión y nota de Xataka
Que el mercado del smartwatch y los wearables en general no está siendo lo que los principales fabricantes pensaban está claro. Samsung no para de dar vueltas sobre su modelo Gear para tratar de acertar. Y ahora Apple hace lo propio con su Watch Series 2.
Puede parecer el mismo pero todo el foco como objeto de moda y algo personal que Apple puso en la promoción de la primera generación se ha esfumado y ahora el Apple Watch busca ser un smartwatch con poderío como reloj deportivo. A su modo.
Para conseguirlo se ha reforzado en justo lo que necesitaba: GPS integrado para no depender del teléfono a la hora de recoger la máxima información posible de nuestro ejercicio, y resistencia al agua de verdad. Poder sumergirlo hasta 50 metros le da un valor extra incluso más allá de poder medir un ejercicio como la natación. Hace que no tengamos que quitárnoslo más que para cargarlo. Lástima que la información y valor que saca el usuario deportista sea tan pobre para todo el potencial del hardware.
En lo demás, Apple por fin ofrece un rendimiento acorde con lo esperado, batería aceptable pero sin nada que destacar, y un ecosistema amplio pero todavía poco sustancial.
8,3
A favor
- Ya
- lo puedes mojar, ahora hacer natación es posible
- La mejora de la velocidad general de todo lo que hacemos con el reloj
- Pantalla muy brillante y precisa en el toque
- Controles físicos que por fin se aprovechan para algo útil
- Tener información de la ruta sin depender del GPS del teléfono móvil
En contra
- Autonomía justa y carga inalámbrica muy larga
- Bastante grueso y dependiente de las correas para darle personalidad
- Ecosistema de terceros poco aprovechable todavía
- Limitada la información valiosa tras un ejercicio
El reloj ha sido cedido para la prueba por Apple. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas
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