Google Home y Amazon Echo, dos años después: éste es el uso que les estoy dando

Parece que fue ayer y hace ya dos años que los altavoces inteligentes desembarcaron en España. Ha habido tiempo suficiente para que los catálogos de Google, Amazon e incluso el de Apple crecieran con nuevas propuestas, han llegado otros fabricantes y a nivel de usuarios han dejado de ser una novedad, lo que no implica que ni mucho menos que su utilidad haya descendido. ¿Los seguimos usando como antes o los chistes ya no nos hacen tanta gracia?

Cuando llegaron consultamos a personas de a pie por sus elecciones y la evolución de su uso, desde el interés inicial al actual. Un año después volvimos a preguntarles cómo había cambiado su experiencia y ahora, dos años más tarde, volvemos a ellos nuevamente para conocer qué ha cambiado. O si no ha cambiado nada.

Aitor Ríos de Miguel

El jefe de cocina Aitor Ríos tiene 40 años y, aunque le gusta la tecnología, no es ni mucho menos un experto. En su momento nos contó que compró el Echo Dot (49,99 euros) de 3ª generación por curiosidad.

En este tiempo ha crecido la familia en todos los sentidos, tanto la humana como la de Amazon: hace unos meses compraron una segunda unidad, esta vez con reloj (ahora mismo no disponible, disponible el Echo Dot 4º gen con reloj por 69,99 euros), Echo Wall Clock (29,99 euros) y otro dispositivo de Amazon muy útil, el Fire TV (29,99 euros).

"El Echo Dot nuevo lo pusimos en el dormitorio (ya que te muestra la hora) y pasamos el que teníamos a la sala. El reloj está en la cocina, y es muy práctico para llevar tiempos de cocciones. Y el Fire TV lo tenemos en la tele de la habitación, que es vieja y era la forma más fácil de añadirle Netflix, Prime tv y demás apps típicas de una Smart TV

Los Echo Dot los seguimos usando básicamente para lo mismo. Controlar los enchufes, la calefacción (tenemos un termostato Netatmo de Iberdrola)), la luz y la Conga 3490 Elite , todos ellos dispositivos que tenemos de tipo smart. Ahora que andamos con la peque en brazos todo el día es muy práctico. También los usamos para escuchar música.

La opción de poder reproducir la música a la vez en los dos Dot con volúmenes independientes está muy bien. Y para manejar el Fire TV y la tele. Hace poco compramos una LG que tiene la opción de ser controlada por Alexa, y aunque es un control muy básico, está bien tener la opción de manejarla por voz.

Les damos un uso muy básico pero los usamos muchísimo, y nos hacen la vida mas fácil. La verdad es que no me he puesto a profundizar en la domótica, así que no le veo muchas limitaciones. Si es cierto que echo en falta más opciones de automatización al estilo HomeKit de Apple. Pero también es cierto que el precio de los componentes que usamos no tiene nada que ver con los compatibles con Apple. "

Manuel Mateos

Manuel Mateos, de 28 años y desarrollador de software de profesión, es un amante de la tecnología y experimentador nato. De hecho el año pasado comenzó a desarrollar skills para el ecosistema de Amazon. Poseía un Echo Dot y un Echo Spot (129 euros) y en este tiempo la familia de dispositivos conectados también ha crecido: ahora posee un Fire Stick HD (59 euros) y un Bose Home Speaker 500.

"Que mis últimas adquisiciones tengan Alexa es accidental y casi anecdótico. He dejado de usar prácticamente todo excepto la skill del sonido de lluvia, la del tiempo y la del resumen de noticias; sigo usando los accesos a Spotify Connect pero no lo utilizo para mucho más. Ahora mismo no tengo nada de smart home y la verdad es que, habiendo dejado de hacer cosas con ello, no las echo de menos. De hecho el acceso a Alexa del mando del Fire Stick ni siquiera lo utilizo.

Reconozco que es un gimmick bastante guay el control por voz pero hay bastante trabajo por delante a la hora de hacerlo más natural y menos programático, y personalmente termino bastantes veces frustrado porque no me entiende cuando le pido música o cuando le digo que haga algo.

Me reafirmo en lo que dije: creo que es importante que Amazon potencie todo un poco más, porque mucha gente los va a acabar usando como meros streamers de música. Y no me gustan los Echo Dot con el nuevo diseño de bola, pero esto es opinión personal"

Rubén Márquez

Nuestro editor del medio de videojuegos Vidaextra Rubén Márquez es un periodista apasionado de la tecnología, por lo que compró su altavoz Amazon Echo (ahora disponible la 4º generación por 99 euros) en cuanto salió al mercado para investigar.

"Lo compre por la gracia inicial y un uso puntual como altavoz, a eso es a lo que ha sobrevivido el Echo en mi salón. La única que sigue dándole cierto uso es mi mujer, cuya pasión por la repostería y la música van siempre de la mano, así que lo único que sigue indicándome Alexa es si esa tarde comeré banoffee o tarta Guinness.

El problema probablemente sea más mío que del cacharro. Lo de los asistentes por voz sigue sin convencerme de la misma forma que no lo ha hecho Siri en todos estos años. Cuestión de práctica y de ponerse en serio con ello, imagino, pero sigue pareciéndome más cómodo buscar algo en internet por mi cuenta o colocar una alarma que recordar la frase exacta que debo decir, esperar a que el asistente espabile y confiar en que el proceso se haya configurado correctamente.

Prometo que algún día me pondré con ello, ya más por curiosidad que por necesidad. Por ver hasta dónde han crecido los asistentes y descubrir qué puedo hacer realmente con ellos si pongo un poco de interés. Hasta entonces, Alexa seguirá siendo sinónimo de merendola y poco más."

Álvaro SanJuan

Álvaro SanJuan es filólogo y como el mismo dice, "muy de Apple", pero no le gustaba el HomePod. Así que "ni se lo planteó" con la oferta de altavoces que había con Alexa en su momento. En el Black Friday de hace dos años compró un Echo Spot y un Echo Dot.

"Me los compré a mitad de precio, les veía muchas posibilidades y creía que los iba a usar un montón... y así es. El Echo Dot lo tengo en el despacho y Echo Spot lo tengo en la mesilla. Este último comencé utilizándolo para la alarma, vamos, como despertador. Pronto configuré una rutina para que me despierte a tal hora, ponga Cadena Ser y encienda la luz. Pero como no duermo solo, nos despertaba a los dos. Ahora solo lo tengo como reloj y para visualizar datos en la pantalla como la información del tiempo

Los uso mucho, por ejemplo para preguntarles por la temperatura, la previsión del tiempo, la temperatura de casa (lo tengo conectado con el termostato) y luego sobre todo para domótica: que encienda la calefacción si tengo frío, para que limpie la casa al tenerlo conectado con el robot aspirador, para encender y apagar luces sin moverme del sofá, para dejarlo todo apagado cuando me voy de casa...

Me parece bastante útil, incluso también los uso para escuchar música porque los tengo conectados con Spotify, aunque tampoco es que sean aparatos como para escuchar música... principalmente porque Alexa es un poco tonta a la hora de comunicarse con ella con la voz. No solo los uso mucho sino que los recomiendo. Además Alexa es más lista que Siri, reconoce y entiende mejor que el de Apple.

Cosas que no me gustan: a veces es complicado de configurar, por ejemplo con un Wi-Fi nuevo o cuando se va la luz; que no se pueda cambiar la voz y el nombre y siempre sea la de una mujer, la señora sumisa. Que pongan un hombre también. "

Patricia Fernández de Gubieda

Interiorista, editora y coordinadora de Decoesfera, Patricia Fernández de Gubieda de 44 años nos explica que aunque no le gusta especialmente la tecnología, la ve algo necesario y facilitador. Además, lo suyo son las tendencias en arquitectura de interiores y decoración, por lo que considera que ha de estar al tanto de estos gadgets que forman parten de la casa.

Tenía un Google Home Mini (ahora disponible 2º generación por 59 euros) y ahora han comprado una segunda unidad.

"Calculo que mi uso es muy parecido al que hacía inicialmente: el tiempo, la radio, temperatura... pero no tenemos nada conectado tipo domótica. Mi uso es escaso, pero el resto de la familia son más tecnológicos. Mi hija juega al juego de adivinanzas Akenaton y mi marido sigue intentando emplearlo para las listas de la compra, pero es horrible.

Hemos intentado decirle lo que va faltando y es un caos, claramente lo hacemos mal. Además Borja (mi marido) ha intentado conectar ambos, en plan si estás en el salón avisar o hablar con el del cuarto y tampoco ha sido capaz. Además, lo de OK Google a veces resulta un poco incómodo. La verdad es que en casa de mi padre hay Alexa y es más natural nombrarlo así"

Manuel Santos

En este tiempo con sus dos Google Home Mini, Manuel Santos (ahora con 24 años) ha terminado sus estudios de ingeniería informática, una carrera muy vocacional para alguien tan amante de la tecnología y la innovación como este sevillano.

"Tengo uno en mi habitación y otro en el salón. El de mi cuarto lo uso principalmente como centro domótico: enciendo mi flexo con él, tengo alarma configurada para que lo encienda y reproduzca música y el tiempo de ese día.

El del salón actualmente apenas lo uso, la situación actual hace imposible reunirme en casa por lo que reproducir música en reuniones no tiene lugar. Si lo uso para alguna consulta antes de salir de casa o alguna duda que tengamos.

A pesar de no utilizarlos 24h, me sigue pareciendo algo super útil y, es cierto, que los uso menos ante la falta de dispositivos conectados. Los que tenia se estropearon y no los he repuesto."

David Bujedo

Camarero de profesión, la tecnología es la pasión de David Bujedo (32 años), que ha ido renovando sus altavoces inteligentes en estos años y domotizando su casa.

"Tras varios años con los asistentes inteligentes, he acabado con dos Amazon Echo y con un Google Home, un Nest hub (89 euros) y tres Home mini, uno de ellos con el micrófono desactivado constantemente ya que cuando está activo es como si se silenciara constantemente y es molesto tener al asistente diciendo “se ha desactivado el micrófono”, “se ha vuelto a activar el micrófono”. Desconozco el problema, ya que el botón externamente está bien, algún día habrá que ponerse a destriparlo para ver si doy con el problema.

"Ahora mismo el menos utilizado, pero no por ello no hay semana que no se use, son los Amazon Echo, sigo enamorado del modo susurro de este dispositivo, es perfecto para cuando hay algún miembro más de casa durmiendo. Viene bien para interactuar con el reloj de pulsera de Fitbit, ya que Google no se sincroniza con este modelo de reloj a través del asistente. En cambio, sigo la mayor parte de las veces reproduciendo música desde los dispositivos de Google.

Respecto a la domótica de la casa, la sigo usando con ambos asistentes, pero la mayor parte de las veces uso el “Ey Google”, ya que con mucha diferencia escuchan mejor el Nest Hub y el Google Home con ruido de fondo, que los mini. Incluso el dispositivo “pequeño” de Amazon creo que tiene mejor micrófono e incluso mejor altavoz que los “pequeños” de la familia de Google.

En base a mi experiencia, Alexa y Google Assistant me vienen bien ya que dispongo de otros dispositivos “exclusivos” de cada asistente, la pequeña trampa para atarte a sus empresas si quieres pagar el precio por una mayor comodidad."

Carlos Herranz

El farmacéutico Carlos tiene 44 años y, pese a gustarle la tecnología, no es su pasión. Tiene un Google Home (99 euros) en casa porque se lo regalaron a su mujer, así que comenzarlo a probarlo. Dos años después...

"Tengo que reconocer que le di varias oportunidades al Google Home durante los meses que estuvo en casa. Lo vinculé con la cuenta de Spotify para poner música. Intenté (sin éxito) poder controlar unas luces y unos enchufes inteligentes con el altavoz (aquí no sé si es culpa de Google, del fabricante de dispositivos, torpeza personal o un poco de todo). De vez en cuando le hacíamos preguntas. Y, al final, le acabé dando el uso que merecía: lo regalé."

Sí, dicen que no debes nunca regalar un regalo que te han hecho… Pero siendo sinceros, Google Home se había acabado convirtiendo en un bonito objeto de decoración al que había que limpiarle el polvo. Pero no lo usábamos. No fuimos capaces de sacarle todo el potencial que no dudo pueda tener.

Unos amigos andaban buscando, en las navidades pasadas un altavoz inteligente para uno de sus hijos, que se había encaprichado de ellos en el último momento. Así que procedí a desvincularlo de todas mis cuentas, a reiniciarlo con la configuración de fábrica y se lo di a estos buenos amigos para que hicieran feliz a su hijo. Desconozco, la verdad, el uso que le están dando. Pero a poco, ya será más que el que le di yo."

María Llanos

También conocida como "Merirocket", la directora del área editorial de lifestyle de Webedia España en medios como Trendencias, Directo al Paladar o Vitónica. Le gusta la tecnología, pero el que más pilota en casa es su marido, los ingeniero y maker. En su momento compró el Echo Spot y el Google Home Mini.

"No ha habido mucha novedad, sigo encantada pidiendo que me apague las luces y me las encienda. Y preguntando la hora, escuchando música y la radio. Quizá esperaba más con el tiempo y no ha ido a más. Ni Alexa ni Google Home, ni yo. Te digo esto y me planteo firmemente comprar otro más para el despacho y otro para mi otra casa. Aunque sea muy poco lo que hago, ese poco se me hace muy cómodo. De hecho ahora tengo TV y robot aspirador que se pueden conectar con Alexa, pero no lo he hecho.

Una cosa que por ejemplo me ha pasado con Alexa y no me ha respondido, le preguntas casos de COVID en tu ciudad y no te da info, en el caso de la pandemia podía haber servido de información y tiene cuatro cosillas malas."

Fernando Jiménez Parras

El arquitecto de 44 años Fernando Jiménez Parras recibió como regalo de Reyes un Echo Dot hace un par de Navidades, un buen pretexto para comenzar a experimentar con dispositivos conectados. Aunque experto en construcción, la domótica le pilló de nuevas.

"No hemos experimentado novedades significativas. Fundamentalmente lo usamos para poner música (vía Spotify), controlar la tele (sube y baja volumen, pausa reproducción, cambia de canal, apaga... aunque es verdad que no siempre se llevan bien y no te hace caso), también lo usamos para hacer alguna búsqueda rápida (¿qué actriz hizo tal película?), pero de vez en cuando te sale por peteneras y te contesta lo que le da la gana. Y finalmente las niñas algunas veces juegan al trivial, o las adivinanzas...

Para mi la limitación fundamental es que a veces entiende lo que quiere y contesta lo que le viene en gana. Y que la conectividad con servicios externos (Smarthings de Samsung para la tele, por ejemplo, o el propio Spotify) en ocasiones falla, así que si para que silencie la tele tengo que decírselo varias veces, prefiero buscar yo el mando.Si no funciona con naturalidad, si no es fácil de conectar con otras cosas, si falla, lo lógico es que pasemos de ello."

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