Desde el inicio de este curso escolar, los niños de Babcock Ranch, Florida han ido al colegio en un autobús escolar un tanto especial, sin un conductor humano. Una empresa de conducción autónoma consideró pertinente realizar sus pruebas piloto aprovechando el inicio del curso. Ahora la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) de Estados Unidos, le ha prohibido seguir operando.
Babcock Ranch es una pequeña comunidad al suroeste de Florida, un lugar tranquilo, bien señalizado y con la infraestructura adecuada para que un vehículo autónomo realice sus pruebas. Es por eso que la empresa Transdev decidió realizar aquí sus pruebas piloto. Sus vehículos sin embargo no son coches al uso, sino pequeños autobuses escolares con capacidad para transportar a unos cuantos niños junto a un supervisor.
¿Qué puede salir mal en un flota de autobuses escolares sin conductor? Transdev informó que han practicado las rutas durante meses sin niños. El vehículo tampoco circula a más de 13 kilómetros por hora y las distancias son realmente cortas. Hasta ahora no se ha producido ninguna incidencia, tampoco se van a poder producir porque las autoridades ya han prohibido a Transdev seguir operando con niños.
Un autobús escolar no es sólo un vehículo
Según informó la NHTSA el pasado viernes, Transdev debe cesar su actividad en Florida inmediatamente. Califican el programa piloto de "ilegal" y aseguran que Transdev no reveló la información pertinente al gobierno cuando solicitó permiso para usar sus vehículos autónomos en florida. La clave está en que un autobús escolar no es cualquier vehículo autónomo.
El autobús escolar autónomo de Transdev.
Las autoridades han indicado que Transdev recibió la autorización en marzo de 2018, con el fin de probar temporalmente el vehículo para demostraciones. Pero no se indicó que se trataba de un autobús escolar como tal y que harían la prueba incluso con niños dentro de él. Los autobuses escolares, como era de esperar, cuentan con regulaciones de seguridad específicas no solamente por transportar personas, sino también por transportar a menores.
Para volver a operar Transdev tendrá que pedir autorización de nuevo a las autoridades. Pero esta vez deberán recibir el permiso tanto para poner en vías publicas un vehículo autónomo, como para transportar personas y en especial menores. Esto último lo van a tener más complicado con un vehículo sin conductor, a pesar de que un supervisor vaya dentro del vehículo siempre.
Regular la conducción autónoma y la IA en su pleno auge
Dejando de lado la posible irresponsabilidad que se haya cometido al transportar a menores en un vehículo autónomo en pruebas, entra en juego el dilema de la regulación de la conducción autónoma y la inteligencia artificial. Una idea generalizada que se tiene actualmente es que la intervención por parte de las autoridades, cuanto menor sea de momento mejor. Con esto se busca no impedir el crecimiento y desarrollo que está teniendo actualmente.
En Estados Unidos por ejemplo la propia administración recalcó que no van a regular casi la conducción autónoma de momento. La intervención para prohibir las operaciones de Transdev en Florida es una excepción. Así pues, en Estados Unidos que es el país donde más pruebas de este tipo se están haciendo junto a China, las autoridades se limitan a conceder permisos a todas las empresas que cumplan unos mínimos de seguridad.
Que Transdev haya tenido que cesar su actividad por obligación de las autoridades puede infundir un mayor temor o precaución de cara al futuro, y buscar regular mejor la industria para evitar situaciones similares. Y regular este sector o el de la IA en general ahora mismo es una locura para muchos, como por ejemplo para el responsable de inteligencia artificial en Facebook.
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