Aunque las imágenes por satélite llevan años usándose para recopilar información relevante sobre zonas a vista de pájaro, obtenerlas no es rápido ni económico para tareas privadas o determinados usos. De ahí la importante de los drones como elementos capaces de realizar a demanda y de forma mucho más asequible fotos de zonas determinadas para trabajar sobre esas imágenes.
En el Reino Unido, Kimberly Fornace, del London School of Hygiene and Tropical Medicine, ha finalizado un estudio que coloca a este tipo de vehículos aéreos como un elemento importante cuando se trata de luchar contra determinadas enfermedades contagiosas.
En su estudio, los drones han sido los encargados de realizar fotografías aéreas de zonas donde había que mantener una información constante sobre cambios en los hábitats del mosquito y monos, dos portadores de un tipo de malaria que afecta a humanos. Con esos datos y los que se recopilaban en hospitales sobre casos de malaria, los investigadores relacionaron esos cambios en las zonas de la naturaleza con brotes o velocidad de expansión de la infección en humanos.
Por ahora las pruebas se han realizado en una determinada zona, pero sus desarrolladores confían en que el sistema de trazado en tiempo real de mapas de la situación en zonas con epidemia de enfermedades infecciosas sea determinante para un mejor control de las mismas. Este sistema, con las limitaciones lógicas por el mal tiempo o la poca autonomía de los equipos usados, tiene limitado su uso a zonas concretas y pequeñas o donde las imágenes por satélite no son posibles.
Más información | ScienceDaily.
Ver 2 comentarios