A lo largo de los últimos años los científicos se han devanado los sesos buscando la mejor forma de llegar a Marte, la manera más eficiente de posarse en su superficie, cómo obtener energía, materiales de construcción, agua y comida una vez estemos allí y, por supuesto, las características que debería tener nuestro hábitat. Hay sin embargo otra cuestión igual de crucial: ¿Cómo debería ser el equipo encargado de fijar un asentamiento en el planeta rojo? O para ser aún más precisos, ¿cuántas personas harían falta si queremos tener éxito? ¿Influiría su carácter?
En los EEUU hay un equipo que tiene la respuesta.
Y spoiler, sus cálculos arrojan una cifra sorprendentemente baja.
Importa el cómo, pero… ¿Y el cuántos? Esa es la idea que subyace a la investigación desarrollada por un grupo de científicos de la Universidad George Mason (GMU), en Fairfax, Virginia, junto a colegas de otras instituciones. En vez de centrarse en estrategias de vuelo espacial y amartizaje, desarrollo de materiales o técnicas de cultivo en condiciones tan extremas como las de Marte, sus expertos se han hecho una pregunta clave: si queremos establecer una colonia en el planeta rojo, ¿cuántas personas tendrán que conformar el equipo? ¿Y cómo deben ser?
¿Y su conclusión es? Pues sorprendentemente baja. Los investigadores han divulgado un artículo, pendiente aún de revisión por pares, en el que aseguran que necesitaríamos una veintena de personas. "Descubrimos que una población inicial de 22 era el mínimo requerido para mantener un tamaño de colonia viable a largo plazo", detalla su estudio, colgado ya en Arvix. "Contrariamente a lo que sostienen otras publicaciones, el mínimo de personas con todos los tipos de personalidad que puede dar lugar a una sentamiento sostenible es de decenas y no centenares".
Su cálculo choca con otras investigaciones previas que han abordado la misma cuestión. Hace apenas tres años de hecho la revista Scientific Reports publicaba un artículo firmado por Jean-Marc Salotti, de la Universidad de Burdeos, en el que se manejaba una cifra bastante superior de colonos. Aunque reconocía que se trataba de "una estimación", sujeta a cierto grado de incertidumbre, su conclusión es que el mínimo de colonos necesario para la supervivencia en el planeta rojo es 110.
¿Cómo deben ser esos colonos? Esa es la otra gran cuestión que se han planteado los investigadores. Además de determinar cuál es el número mínimo de personas para una colonia viable, los científicos han indagado en cómo deben ser, que combinación de personalidades facilitaría la misión. Para sus cálculos tuvieron en cuenta cuatro perfiles básicos de personalidad: agradable, sociable, reactivo y neurótico, categorías que trazaron valorando cuestiones como la resiliencia.
Los mejor parados fueron los primeros, individuos que, precisa Space.com, se caracterizan por mostrar "el menor grado de competitividad, baja agresividad y sin fijación por las rutinas estrictas". Sus características son opuestas por ejemplo a los "neuróticos", personas muy competitivas, una actitud interpersonal agresiva y una capacidad limitada para adaptarse a cambios o el aburrimiento. "Descubrimos que el tipo de personalidad agradable tenía más probabilidades de sobrevivir".
¿Y cómo llegaron a esas conclusiones? Con una combinación de herramientas. Los investigadores utilizaron cuestionarios cubiertos por gente con experiencia en situaciones extremas, como personal que ha estado en la Estación Espacial Internacional (ISS) o ha vivido incluso durante meses en hábitats reducidos del Ártico. También recurrieron a simulaciones informáticas.
Parte de sus datos los obtuvieron a través del ABM, siglas en inglés de "modelado basado en agentes", una herramienta que permite a los expertos simular acciones e interacciones entre agentes autónomos, ya bien sean personas o colectivos.
¿Y qué escenario valoraron? Una cuestión clave. A la hora de aplicar su modelo el equipo de la GMU partió de un escenario concreto: que el asentamiento marciano ya se había levantado y era capaz de aportar comida, agua y oxígeno, por lo que los colonos no tenían que ponerlo en marcha. Otra de sus características, precisadas por Space.com, es que disponía de un generador nuclear capaz de garantizar un flujo de electricidad constante durante al menos siete años.
Los investigadores realizaron demás varias pruebas: completaron cinco simulaciones que se correspondían a períodos de 28 años y analizaron diferentes tipos de colonias, con poblaciones que iban de 10 a 170 individuos. Su propósito: alcanzar la cifra mínima viable. Su resultado es más bajo que el de otros estudios, pero lo más curioso es que el equipo comprobó que la base podría mantenerse con apenas una decena de colonos. Eso sí, solo durante un año y medio, el tiempo necesario para reconfigurarla y recibir una nueva misión de abastecimiento.
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