Si hasta ahora lo habitual era que un teléfono móvil ganara funcionalidad de navegador GPS, con el nuevo navegador Dash, es el GPS el que incorpora un chip WiFi y GPRS para poder estar permanentemente conectado a Internet.
De esa conexión permanente a Internet del navegador GPS Dash es de donde procede su mayor interés. Puede no solo recibir información que hasta ahora no era habitual en los navegadores, sino enviarla a otros equipos y que éstos se beneficien de esos datos que nuestro vehículo envía en tiempo real (velocidad y posición, de forma anónima) y siendo una realidad. Imaginemos por ejemplo un atasco del que somos informados inmediatamente por otros coches (por el tiempo que están tardando en recorrer una determinada distancia) y que nos permite corregir nuestra ruta y salvarnos de la pérdida de tiempo.
Con este navegador Dash, las búsquedas locales cobran una fuerza increíble. No solo sabremos si tenemos una gasolinera cerca, sino que podemos recibir el precio que tiene en ella el combustible en el que estamos interesados.
El navegador Dash también tiene componente social, no podía ser menos, pero precisamente de ese lado cae su gran inconveniente: hay que tener equipos Dash cerca para aprovechar muchas de sus mejores funcionalidades.
Como gadget, debemos citar su pantalla de 4.3 pulgadas con resolución de 480 x 272 píxeles, autonomía de dos horas con todas las conexiones activas y función de texto a voz.
El precio del navegador Dash es de 400 dólares, con un coste extra al mes de 10 dólares, que nos da tarifa plana para estar permanentemente conectados a Internet.
Vía | Techcrunch | Crunchgear. Más información | Dash.
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