Hoy se celebra la Fiesta Nacional en España: es el día en que conmemoramos que Cristóbal Colón descubrió América, pero para muchos es algo más. Distinto, y no necesariamente positivo.
La celebración se ha convertido en motivo de debate en España, Latinoamérica o Estados Unidos, y los argumentos en contra de esa celebración han ido creciendo para convertir este día en uno en el que para mucha gente no hay absolutamente nada que celebrar. ¿Por qué?
En España: Una celebración con connotaciones franquistas
La Fiesta Nacional de España no debería serlo para diversos partidos políticos. En estos últimos días hemos visto cómo diversos portavoces de esas formaciones políticas han realizado declaraciones sobre una celebración con connotaciones negativas.
Para algunos de ellos el contenido de la festividad debería revisarse e incluso plantean eliminar la festividad. Algunos creen que como poco debería modificarse la fecha ligada a esa Fiesta Nacional para asociarla a valores constitucionales o republicanos, algo que evitaría celebrar lo que para muchos no fue solo el descubrimiento de América, sino su violenta colonización.
El Ayuntamiento de Badalona anunciaba también recientemente que no tenía intención de cerrar sus oficinas y de que fuera un día laboral normal, algo que no es nuevo (otros ayuntamientos de menor entidad han realizado un movimiento similar en el pasado) pero que vuelve a poner de manifiesto la protesta contra este tipo de celebración. La medida es, como apuntan en ElDiario.es, simbólica: los trabajadores no podrán completar gestiones debido a que este no es un día hábil a nivel administrativo, aunque sí podrán facilitar información a quienes acudan a esas dependencias.
Las críticas también han llegado este año de partidos políticos como Unidos Podemos, PNV, ERC, CDC y Compromís: todos ellos prefieren desmarcarse de esta festividad, a la que califican de ser una celebración"vieja" y "franquista". Precisamente esa última connotación es una de las que más se utilizan para criticar esa celebración, aun cuando ya se celebraba mucho antes (el llamado 'Día de la Raza' comenzaría a festejarse en 1918) y lo ha hecho mucho después (un decreto del 7 de octubre de 1987 declaró que este día se celebraría la "Fiesta Nacional de España" para restringir la fiesta al territorio español.
Ese dato no impide que como decimos estos partidos asocien el también conocido como Día de la Hispanidad (aunque esa denominación no sea la adecuada desde aquel decreto) con el franquismo. El portavoz adjunto de ERC, Gabriel Rufián, recordaba el apelativo del "Día de la Raza" en el que la fiesta reúne "al fascismo más reaccionario". En Convergència también creen que este día festivo no hay nada que celebrar, y abogan por trasladar esa celebración al 6 de diciembre, día de la constitución, aunque también señalan que esa decisión deberían tomarla "aquellos a los que concierne", en referencia a los partidos de ámbito nacional.
En Estados Unidos: ¿por qué existe 'Columbus Day'?
Colón no llegó a pisar el territorio que ocupan los Estados Unidos, pero ese país sigue celebrando el 'Día de Colón' el 12 de octubre, a pesar de que desde hace años se critica una tradición que según sus detractores está conmemorando a alguien que no se lo merece.
La festividad se comenzó a celebrar de forma oficial en ese país en los años 1930 (lo había hecho de forma más intermitente y localizada mucho antes) tras la presión de una congregación cristiana llamada 'Knights of Columbus' y el apoyo del líder italiano Generoso Pope. Roosevelt acabaría declarando el día 12 de octubre como festivo.
Aunque dicha festividad se ha seguido celebrando todo este tiempo sus detractores llevan desmarcándose de esa festividad ya desde el siglo XIX. La crítica al trato de los indígenas por parte de Colón y sus hombres ha sido motivo fundamental de esa oposición, algo que en The Oatmeal reflejaban con varios datos que revelaban algunos de los horrores que Colón provocó tras el descubrimiento. De hecho allí le calificaban como "el padre de la esclavitud transatlántica", y afirmaban que Colón fue un "esclavista sexual, un asesino de masas, y un adalid del imperialismo sociópata".
Esos datos son contrarrestados por otros que discuten el rigor histórico de tales acusaciones o su alcance. Los críticos de Colón, afirman sus defensores y los de esta festividad, confunden diversas colonizaciones europeas y los sucesos que tuvieron lugar en distintos territorios. Mientras que en unos se produjeron colonizaciones violentas, en otros se nos recuerda cómo la Corona de Castilla incluso estableció las primeras leyes que prohibían la esclavitud en 1512. Las llamadas leyes de Burgos declaraban a los indios del continente americano hombres libres con todos los derechos de propiedad, que no podía ser explotado aunque eso sí, como súbdito debía trabajar a favor de la corona.
La crítica sobre el trato a los indígenas durante las décadas siguientes al descubrimiento se combinan con las críticas al propio Colón, al que se le califica como alguien cuya ambición no se detenía ante nada. Muchos de estos hechos, argumentan quienes critican este día festivo, no se han extendido hasta hace relativamente pocos años, y han sido ignorados por la gran mayoría de personas que celebran la festividad sin pensar en lo que realmente están celebrando y que simplemente dan continuidad al mito de Colón como gran descubridor (aunque esto también se ponga en tela de juicio).
En Hispanoamérica: no se puede celebrar un genocidio
La mayoría de países hispanoamericanos que celebran este día lo hacen con el llamado "Día de la Raza", aunque el nombre varía en países como Chile ("Día del Encuentro de Dos Mundos"), Argentina ("Día del Respeto a la Diversidad Cultural") o Venezuela y Nicaragua ("Día de la resistencia indígena").
En todos ellos la ambigüedad respecto a esta festividad también es patente. La celebración conmemora el encuentro y fusión entre los pueblos indígenas de América y los colonizadores españoles, pero los argumentos en contra vuelven a incidir en los efectos colaterales que tuvo el descubrimiento. España y otras potencias europeas provocaron según esas críticas un genocidio, destruyendo millones de vidas y también culturas precolombinas que se verían mermadas para siempre.
Esa catástrofe demográfica a la que aluden los detractores de esta celebración no ha logrado ser aclarada por parte de los expertos, y de hecho muchos historiadores argumentan que fueron las enfermedades -y no los ejércitos españoles- las que diezmaron aquella población.
La viruela fue una de las principales causas de las muertes de indígenas. Solo en México la población disminuyó de 25,2 millones de personas en 1518 a 700.000 en 1623 según el estudio de Cook y Borah de la Universidad de California en Berkeley, y la enfermedad fue igualmente virulenta en el resto de territorios a los que llegaron los colonizadores.
En el momento de la colonización, la población estimada del continente americano rondaba los 110 millones de personas, mientras que España y Portugal no llegaban a los 10 millones. El impacto de los soldados españoles fue sin duda importante, pero la magnitud del exterminio parece apuntar según muchos a la viruela y otras enfermedades.
Muchos son los estudios que en las últimas décadas han coincidido en esas conclusiones, e incluso historiadores como Henry Kamen apuntaba a un argumento destacable: a los españoles no les interesaba el exterminio de los nativos ya que "hacerlo, evidentemente, habría socavado su institución básica, la encomienda".