El pasado mes de marzo, trece jugadores de la Tercera División gallega, once de ellos del Laracha, fueron expedientados por los insultos que profirieron contra el árbitro del partido Laracha-As Pontes, Rubén Extremadura Hernández, en Twitter. Ésa suele ser la relación más habitual de los árbitros de fútbol con las redes sociales, leer cómo los aficionados, y hasta jugadores y entrenadores, se quejan en ellas de los supuestos errores cometidos arbitrando un encuentro.
Sin embargo, esto puede estar a punto de cambiar si más gente sigue el ejemplo de Mohammed Al-Hakim, árbitro de la Allsvenkan, la primera división de Suecia, que como recogía The Guardian recientemente, ha abierto una página de Facebook para comentar sus decisiones y para acercar al resto de la comunidad futbolística la labor del árbitro.
Al-Hakim, el pionero
Mohammed Al-Hakim es un árbitro en ascenso en Suecia, de sólo 30 años, que ha seguido varios cursos de la FIFA para arbitrar competiciones internacionales, y cuando abrió la página de Facebook, explicó que:
"Creo en la apertura y el diálogo. La idea principal es que quiero crear interés y creo que la familia del fútbol puede beneficiarse por tener una mejor visión y comprensión de la situación de un árbitro. También quiero que la página inspire a más gente a ser árbitros, que es una parte importante del fútbol. Quiero mostrar mi lado del arbitraje y quiero equilibrar la imagen (de nosotros) en los medios. Quiero aumentar la accesibilidad de la familia del fútbol".
Al poco de arrancar su presencia en Facebook, de hecho, reconoció que se había equivocado al no pitar un penalti en el partido entre IFK Norrkoping y AIK, que se había dado cuenta de ello al ver repeticiones de la jugada desde diferentes ángulos por televisión, y que lo que quiere también es aprender a reducir sus equivocaciones en el campo. Mohammed Al-Hakim ha abierto su página con el beneplácito de la liga y los árbitros suecos, ¿pero podría su experimento repetirse en otros países?
En Inglaterra, por ejemplo, no parece posible. En declaraciones a The Guardian, un representante de PGMOL, la asociación de árbitros británica, aseguraba que "nosotros no podemos impedir que nuestros árbitros abran perfiles en las redes sociales, pero les aconsejamos que no lo hagan. El ejemplo sueco suena interesante, pero aquí tenemos a un joven árbitro que, tal vez, intenta hacerse un nombre. Suecia no es una liga global como la nuestra". De hecho, el experimento de Al-Hakim no ha durado demasiado, pues cerró su página de Facebook hace unos días porque no tenía tiempo para atender el enorme interés que había suscitado.
¿Y en España?
En la Liga española tenemos unos cuantos árbitros bastante mediáticos, sobre todo porque, al retirarse, pasan a engrosar la nómina de comentaristas de los programas de fútbol de televisión o radio. Joaquín Ramos Marcos o Rafa Guerrero son dos ejemplos muy conocidos, pero ninguno de los dos tiene presencia en redes sociales. Ni siquiera la tiene el Comité Técnico de Árbitros, que sí dispone de de una web oficial. Es posible, sin embargo, encontrar en Facebook al Comité Técnico de Árbitros de Las Palmas, pero es de los pocos ejemplos que encontramos en el fútbol español.
Y en el fútbol, en general. De hecho, sorprende lo reacios que son los colegiados a entrar en redes sociales (o igual no soprende tanto, teniendo en cuenta lo que tienen que soportar a veces desde el público en los partidos), cuando en el rugby no hay mayor problema. Uno de sus árbitros más famosos, el galés Nigel Owens, tiene perfil en Facebook y en Twitter, y no sólo es conocido por ser abiertamente homosexual sino, sobre todo, por sus reprimendas a los jugadores en el campo, diciéndoles que "esto no es fútbol". Hasta hay una página en facebook, Ask the Rugby Referee, en el que varios árbitros solucionan dudas con el reglamento que puedan tener los aficionados.
El caso del rugby es, curiosamente, una excepción entre los árbitros deportivos. La presencia de los colegiados del baloncesto en redes sociales es también nula, aunque sí es posible encontrar en Facebook al Comité Vizcaíno de Árbitros de Baloncesto, por ejemplo. Los árbitros de la NBA también se mantienen alejados de internet, y más teniendo en cuenta el escándalo de amaño de partidos en el que se vio envuelto uno de ellos, Tim Donaghy, hace unos tres años, y esa distancia de las redes sociales se mantiene también en el béisbol y la NFL.
Un "árbitro" virtual
Curiosamente, mientras los árbitros de fútbol se mantienen alejados de las redes sociales, sí que disponen de una app que les permite rellenar las actas del partido directamente en su móvil, sin necesidad de lápiz y papel. Se llama Referee Pro y se empezó a probar en 2012 en México, en la final de la Liga de Fútbol Indoor. En tres años, se ha utilizado en unos 500 partidos amateur tanto en ese país como en España.
La idea detrás de esta app era, en palabras de sus responsables, facilitar la labor del árbitro, por un lado, y por otro, permitir una mayor conectividad entre los jugadores y los aficionados: "El fútbol amateur es el deporte más popular del mundo, jugado por casi 500 millones de personas en todo el mundo. Así que, al igual que los runners, que utilizan pulseras de fitness para ver cuánto han corrido, Referee Pro permite a los jugadores ver su rendimiento a lo largo del tiempo porque estadísticas como goles marcados, tiempo el campo y tarjetas amarillas se cuentan auomáticamente".
Hay una app para los árbitros, pero éstos no han entrado todavía en la era de las redes sociales. La única presencia que encontramos de ellos, en general, en Twitter o Facebook son las quejas de los seguidores de un equipo al que creen que le han "robado" el partido.
Imagen | Bay Area Bias