París, la llamada 'Ciudad de la Luz', es uno de los destinos turísticos obligados, allí podemos encontrar desde clásicas obras de arte, hasta sitios históricos con una belleza inigualable. Por ello, muchos artistas la usan de inspiración para sus obras, o bien, se vuelve parte importante de dicha obra.
En Magnet tenemos una fijación especial por los time-lapses, una técnica de vídeo que nos hace recorrer sitios a gran velocidad, lo que nos permite tener una visión que sería imposible si estuviéramos ahí. Pero ahora, tenemos una extraña y magnifica combinación que usa a París como sede de un hyper-lapse, un vídeo que combina el ya conocido time-lapse pero con HyperZoom, algo que hace que el viaje sea aun más frenético.
Bonjour Paris
Este vídeo es obra de Tyler Fairbank, un fotógrafo neoyorquino famoso por experimentar con las diversas técnicas de vídeo, donde su mayor virtud es la edición y el montaje que consigue en sus vídeos, algo que se ve muy pocas veces, ya que la mayoría de los fotógrafos que crean time-lapses lo hacen sólo uniendo los vídeos y aumentando la velocidad, pero lo que hace Tyler es fascinante, aunque exista un sector de fotógrafos que critican su trabajo al no ser completamente "orgánico".
Lo que hace Tyler en sus hyper-lapses es jugar con los acercamientos, los cambios de tomas y ángulos, además de hacerlo a una velocidad que nos hace cambiar de escenario en sólo segundos, así que prácticamente no podemos parpadear si no queremos perdernos parte del vídeo.
Por supuesto el resultado es fantástico, pero lo más increíble es la forma de unir los vídeos, ya que trata de dar seguimiento, que no se perciban los cortes, por ello el vídeo parece que fue grabado en una sola toma, pero con saltos imposibles de un lugar a otro.
En este vídeo titulado simplemente como 'Bonjour Paris', daremos un recorrido por los mejores monumentos y zonas de la ciudad en sólo dos minutos, lo que resume un trabajo de dos semanas de caminar y hacer una gran cantidad de tomas, esto sin contar el trabajo de edición.
En Magnet | Cuando visites París, mira hacia abajo y pon mucha atención en el diseño de sus aceras