Blackberry Bold 9900 es, sobre el papel, la mejor Blackberry clásica del mercado. Digo sobre el papel, a la vista de sus características técnicas: un cuerpo metálico, una pantalla táctil más grande de lo convencional y sin olvidar su teclado QWERTY físico. Como las Blackberry de toda la vida.
Además hay que contar con que se trata de un modelo de la familia “Bold”, las Blackberry de gama más alta. Su modelo anterior fue la 9780, mi teléfono personal desde hace algo menos de un año. Podríamos decir que las diferencias entre 9780 y la nueva BB 9900 son escandalosas: es como pasar de una HTC Magic a un Nexus S, o de un iPhone EDGE a un iPhone 4.
Las razones son varias, pero principalmente se centran en el interior. La Blackberry Bold 9900 es una Blackberry clásica adaptada a tiempos modernos, donde manejarla es una delicia en comparación con otros terminales de RIM. Uno de sus puntos fuertes, el teclado, es una de las piezas que más nos ha gustado.
Empezamos el análisis.
Blackberry Bold 9900, análisis
Blackberry Bold 9900, clásica pero moderna
Muchos se quejaron de que RIM no sabía cómo adaptarse a estos tiempos modernos en los que Androides e iPhones copan prácticamente todas las noticias. Las pantallas táctiles se han convertido en un componente vital en los teléfonos actuales.
Sin embargo, una de las grandes ventajas de los terminales Blackberry es precisamente el teclado físico. ¿Qué hacer? Fácil: teclado físico y pantalla táctil capacitiva en un mismo terminal. Y funciona. Vaya si funciona.
El teclado de Blackberry 9900 es, sin lugar a dudas, el mejor teclado físico de móvil que haya probado jamás. Esta afirmación tan categórica se basa en dos aspectos: en primer lugar, el tamaño de las teclas es mucho mayor que en otras Blackberry, ya que el terminal en sí también es algo más ancho. Las teclas además utilizan un mecanismo diferente al de, por ejemplo, mi Bold 9780: diría que se asemejan más a un teclado mecánico de ordenador que a uno de membrana. De hecho, las pulsaciones suenan mucho más. ‘Cla cla cla’. Mi novia sabía sin mirarme cuándo estaba escribiendo en la 9900, con lo que imaginaréis que es bastante más ruidosa que otras BB.
El teclado es, en términos de estructura, como el de cualquier otra Bold pero con un tacto sensiblemente diferente, algo más grande y más preciso. Es perfecto, y reconozco que me está costando horrores volver a la 9780 y sus teclas tan diminutas. Al menos en comparación con las del nuevo terminal, claro.
Pero la Blackberry 9900 no sólo vive de teclado físico. La pantalla táctil es de 2.8 pulgadas. ¿Pequeña? Bajo mi punto de vista, suficiente, apoyada sobre una resolución de 640×480 píxeles que se notan, y mucho, respecto de otras Blackberry. Daros cuenta que la 9780, por ejemplo, funciona en 480×360 píxeles, y la Curve 8520 que tanto se ha vendido para el público joven apuesta por una escuetas 320×240. No nos olvidamos de que se trata de 2.8 pulgadas capacitivas y multitáctiles.
Teclado y pantalla son, sin duda alguna, los dos características que destacaría del exterior de la Blackberry 9900. Pero hay otra más.
Un interior adaptado a tiempos modernos
Más grande y con mayores posibilidades. Si la 9900 no hubiera dado un salto de calidad en el hardware, no sería lo que es.
Blackberry 9900 fluye como cualquier terminal Android o iPhone de gama alta. Hablo del sistema operativo, con una velocidad entre aplicaciones perfecta, un navegador web que mejora mucho la experiencia de anteriores Blackberry (nefasta experiencia, bajo mi punto de vista) y una velocidad general con la que otras BB sueñan.
Me refiero, por ejemplo, a cambiar entre aplicaciones. En otras Blackberry, el menú de aplicaciones abiertas (mantener presionado el botón BB) se abría algo lento en el momento en el que teníamos unas cuantas abiertas en background. En la 9900 es suave y rápido. Renderizar una página web para adaptarla al formato 4:3 de la pantalla podría llevar varios segundos, dependiendo de la cantidad de información de la propia web. En la Bold 9900, gracias en parte a la inclusión del nuevo sistema operativo BB OS 7 que trae un navegador mejorado, todo es más rápido.
Otras diferencias significativas son, por ejemplo, el tiempo de arranque que se minimiza enormemente (aproximadamente una tercera parte del tiempo de la 9780 con BB OS 6); la gestión (instalación, desinstalación o actualización) de aplicaciones que ahora ya no bloquea el teléfono; o la aplicación de la cámara que ahora funciona como siempre debió hacerlo: de forma rápida, tanto en la ejecución inicial de la aplicación como en el posterior tratamiento de la imagen y almacenamiento interno.
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Continuará, mañana.
Blackberry Bold 9900 ha sido cedida para la prueba por parte de RIM. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.
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