23 de julio. La cita con las urnas está fijada y en Xataka nos hemos propuesto desgranar qué propuestas presentan los principales partidos políticos para las próximas elecciones generales de nuestro país.
En este caso, hablaremos de movilidad y, más concretamente, atenderemos a los planes que los candidatos tienen entre manos en relación al coche eléctrico, la industria que lleva aparejada y el fomento (o no) del mismo. Esto es todo lo que encontramos en sus programas electorales.
Las propuestas para las elecciones sobre el coche eléctrico
Para comprender mejor cuáles son los proyectos relacionados con el coche eléctrico y todo lo que llevan aparejado a su alrededor, hemos acudido a los programas políticos de PSOE, PP, Sumar y Vox, así como a las declaraciones de sus líderes
Como veremos, el coche eléctrico tiene diferentes pesos en cada uno de ellos pero sí adelantamos que, por norma general, se habla más de propuestas generales que de proyectos cerrados y de dinero. Es, por tanto, una aproximación a las líneas generales del discurso de cada uno de los partidos políticos.
PSOE: impulsar la industria y potenciar la transición al coche eléctrico
El partido del Gobierno es uno de los que más referencias hace al vehículo eléctrico en su programa electoral. Sin embargo, carece de propuestas demasiado específicas o ambiciosas, pues en la mayor parte de las ocasiones de habla en términos muy generales.
Una de las grandes defensas que hace el PSOE en su programa electoral está relacionado con el Plan de Recuperación que utiliza los fondos europeos para potenciar, entre otros, el PERTE VEC al vehículo eléctrico y conectado.
En relación a esto, el PSOE lleva por bandera que habrá una segunda convocatoria del programa, aunque es algo en lo que ya se venía avanzando desde hace tiempo (se habló de aprobarlo en junio) y que las elecciones han frenado. Además, se subraya la intención de mantener un diálogo abierto a este respecto con la industria del automóvil.
En términos de fiscalidad, se especifica que se trabajará para que "la clase media y trabajadora" pueda adquirir vehículos eléctricos. Sin embargo, en el mismo punto no se establece ningún otro tipo de compromiso como la posibilidad de reducir el IVA de estos automóviles, lo que ha sido solicitado por parte de la industria.
Del mismo modo, también se hace referencia a sacar adelante un plan de ayudas a la compra para el transporte y los conductores profesionales que fomente "la transición hacia los vehículos cero emisiones, tanto camiones como autobuses, así como para reducir la edad del parque de vehículos profesional".
Por último, ya en el terreno más práctico, se habla de "redefinir el modelo de carreteras para adaptarlas a los retos de la digitalización y la sostenibilidad y a los vehículos del futuro". En este sentido, desde el PSOE aseguran que impulsarán "un plan de electrificación de la Red de Carreteras del Estado, que asegurará que cualquier vehículo eléctrico pueda circular sin limitaciones por nuestra red".
Además, relacionado con estos cambios, también se especifica que se buscará dotar a toda la red de la conectividad suficiente para que puedan circular por las carreteras todos los vehículos conectados y autónomos.
PP: mirando a la industria y sin mención directa al coche eléctrico
Las referencias directas al coche eléctrico son nulas en el programa del PP. En este caso, todo lo que podemos encontrar relacionado con el tema lo encontramos en su propuesta por impulsar un "Plan para la Automoción España 2030".
Este plan contempla recuperar la mesa de automoción que ha dejado de ser convocada. Este foro se creó con la idea de reunir a todos los sectores de la industria, incluyendo a los sindicatos y los diferentes partidos políticos. Con ella, asegura el PP, se buscará la "progresiva descarbonización del sector, la implantación de infraestructuras de recarga de acceso público, la renovación de los vehículos más antiguos del parque móvil y otras medidas de producción industrial".
Para encontrar los principales puntos del mencionado Plan para la Automoción España 2030 tenemos que retraernos a marzo, cuando el Núñez Feijoo hizo referencia a las líneas maestras del proyecto durante un evento organizado por Faconauto.
Entre las promesas anunciadas aquel día encontramos "un impulso real al proceso de electrificación", con mejoras en el Plan MOVES III, una bajada de impuestos y reducciones en el IRPF. Sin embargo, no se pusieron cifras a estas promesas. Para apoyar esta electrificación, se especifica que el objetivo es mejorar la infraestructura de carga del país.
Por el camino, se aspira a que estos cambios suponga "apostar por un modelo de transición ecológica y energética que sea progresivo, busque una evolución en el tiempo y no penalice a los usuarios de automóviles, a la producción ni al empleo".
Sumar: Fin a los coches de combustión en 2040
Sumar es el único partido de los cuatro que pone fecha al vehículo de combustión. En su programa electoral leemos que el objetivo es que "en 2040 no circulen en España vehículos con motores de combustión interna". Es decir, que sólo lo hagan vehículos eléctricos
La propuesta de Sumar, para la que quieren sacar adelante una "Ley de Financiación del Transporte Colectivo, Público o de Bajas Emisiones, para avanzar en una movilidad sostenible que reduzca el uso del vehículo privado (especialmente en las ciudades)", dejaría fuera también a los híbridos y el uso de combustibles sintéticos, como sí ha aprobado la Unión Europea.
Además, se señala que para facilitar la transición al coche eléctrico, se creen "exenciones y penalizaciones fiscales con criterios de progresividad que para consolidar los sectores motores de la transición ecológica", entre los que cuentan los vehículos eléctricos. Con estos cambios (a los que no se ponen cifras), también se buscaría desincentivar la compra de vehículos movidos por combustibles fósiles.
Entre las propuestas para facilitar el acceso al vehículo eléctrico, también se menciona que se trabajará por simplificar las ayudas a la compra, introduciendo criterios progresivos por renta. Además, se promoverá la instalación de puntos de carga, atendiendo a criterios sociales y territoriales.
En el transporte de mercancías, también se apoyará la movilidad eléctrica con el impulso de "cargadores ultrarrápidos en las principales rutas comerciales del país y diseñando ayudas específicas para la electrificación dirigidas a profesionales autónomos del sector del transporte".
En lo que se refiere a industria, Sumar propone una reconversión de la misma "hacia la cadena de valor completa de la electromovilidad". Aseguran que tratarán de impulsar "la adaptación de fábricas de automóviles y furgonetas, camiones, autobuses y trenes, pero también el impulso de la adaptación de la industria auxiliar".
En este paquete incluyen la producción y reciclaje de baterías, así como la creación de "un consorcio público y privado para el desarrollo de una macroplanta de minerales críticos en nuestro país, un proceso tecnoindustrial de enorme futuro para el que existe un mercado emergente de enormes proporciones".
VOX: el único propósito de mantener la combustión
Si la posición de los tres partidos anteriores es la transición más o menos intensa hacia el coche eléctrico, VOX apuesta por impulsar la industria directa y auxiliar relacionada con los vehículos de combustión para garantizar "la convivencia natural de todos los vehículos, de combustión, eléctricos e híbridos".
En su programa electoral no hay demasiados apuntes al coche eléctrico pero sí se recalca que se trabajará en Europa para dar marcha atrás a la prohibición de vender vehículos con motores de combustión a partir de 2035. Una prohibición que tiene sus matices, con la aprobación de los combustibles sintéticos neutros en carbono, en lugar de emisiones.
En el resto del programa político no hemos encontrado ninguna otra medida en la que se presente una posición sobre el coche eléctrico o su posible transición al mismo.
Más allá del coche eléctrico
Además de las referencias sobre el coche eléctrico, los partidos políticos también enfrentan la movilidad con algunas propuestas que vale la pena recoger.
Apuesta del PSOE por el transporte público y el tren
El PSOE, por ejemplo, asegura que ofrecerá transporte público urbano totalmente gratuito para niños y estudiantes hasta los 24 años. En estos momentos, el Estado paga los descuentos a nivel nacional que se están ofreciendo este verano en los trenes y gran parte de las rebajas en ámbito municipal y regional. Una medida a la que el propio Pedro Sánchez ha querido dar voz durante su campaña electoral.
Además, el partido de Pedro Sánchez también especifica que fomentará la adquisición y el uso de las bicicletas eléctricas, aunque no se apunta a qué tipo de acciones se llevarán a cabo para ello. Esta decisión va de la mano de "diseñar ciudades sostenibles para las personas y no para los automóviles", como se puede leer en el programa.
Todo ello vendrá determinado por la Ley de Movilidad Sostenible, que espera su aprobación después de haber mostrado las líneas generales del proyecto el pasado mes de diciembre. Para sufragar todas estas promesas, se creará un fondo estatal para priorizar las inversiones en transporte público "en la red local y autonómica de autobús, metro, metro ligero, ferrocarril o tranvía", entendiendo que "el protagonista de nuestra movilidad diaria debe ser el transporte público".
En cuanto al uso del tren, desde el PSOE se comprometen a aumentar las inversiones en nuevas redes de cercanías y la modernización de las líneas ya existentes. Se espera aumentar el número de trenes que presten servicios ferroviarios de servicio público y recuperar el uso de trenes nocturnos, así como potenciar los trenes transfronterizos.
En cuanto a la alta velocidad, el partio se compromete a hacer llegar la alta velocidad a Asturias y Almería en 2026 y mejorar las conexiones de Extremadura, Navarra, La Rioja, Cantabria y la Y vasca. Entre estos planes destaca la culminación de la variante de Olmedo (Valladolid) que lleva años de retraso. Por último, aspiran a que los corredores Atlántico y Mediterráneo estén terminados antes de 2030, año marcado por la Unión Europea.
Todas estas promesas vienen acompañadas de una apuesta por el uso de la bicicleta, fomentando su uso en ciudad y fomentando la creación de infraestructura ciclista segregada, así como la creación de carriles bici junto a las carreteras.
Por último, se habla de seguridad vial y el objetivo de conseguir cero muertes en la carretera, un proyecto que también tiene en marcha la Unión Europea. Sin embargo, desde el PSOE apuestan por las carreteras 2+1, una infraestructura con un carril por sentido, separadas por un tercero pensado exclusivamente para adelantar.
El Partido Popular también mira al tren y el transporte intermodal
Además de las referencias al coche eléctrico, en el programa del PP también podemos encontrar algunas promesas relacionadas con la movilidad general de nuestro país.
En el programa para estas elecciones encontramos la promesa de modernizar las estructuras viarias, así como la explotación y conservación de las mismas. No se especifica, sin embargo, nada de posibles peajes para su mantenimiento que Juan Bravo, portavoz económico del Partido Popular, ya adelantó que es algo que está aprobado por el Gobierno actual. En las carreteras de alta capacidad, se buscará impulsar la conectividad 5G.
Sí se especifica que se trabajará por conseguir una Tarjeta de Movilidad Ciudadana, que integre en un mismo sistema los transportes autonómicos y municipales, con el objetivo de facilitar la movilidad entre los diferentes tipos de transportes.
Relacionado con esto último, el PP también promete mejorar el servicio de cercanías "en todas las comunidades autónomas", así como una apuesta por el transporte a demanda desde los pequeños municipios contemplando un coste reducido para los usuarios.
Por último, también se especifica que se trabajará por seguir impulsando los corredores ferroviarios Mediterráneo, Atlántico y Central, con una modernización y mejora de la infraestructura ferroviaria, especificando que se prestará especial atención a la conexión con Extremadura. También a los trenes transfronterizos que busca impulsar la Unión Europea.
Sumar, en defensa de la ciudad de los 15 minutos
Además de las referencias al coche eléctrico, en el programa electoral de Sumar también encontramos otro tipo de referencias relacionadas con la movilidad. La primera de ellas señala directamente a la Ley de Cambio Climático y Transición Energética para incluir el objetivo de reducir en un 55% las emisiones en 2030 y alcanzar las emisiones nulas en 2040.
Para alcanzar estos objetivos, se busca priorizar el transporte público, los desplazamientos a pie y el uso de vehículos eléctricos. En cuanto a la aviación y el transporte marítimo, se apunta al despliegue de combustibles renovables de cero emisiones como el hidrógeno 100% renovable "que vayan más allá de los mínimos exigidos por la UE, aprovechando así el elevado potencial de generación de hidrógeno renovable del que dispone España".
También se especifica que, para el transporte aéreo, se limitarán aquellos trayectos en distancias "que puedan ser fácilmente sustituibles por tren". En este sentido, también se habla de potenciar el tren nocturno y transfronterizo. Se buscará mejorar las conexiones multimodales con puertos y aeropuertos.
En el ámbito local, el partido de Yolanda Díaz quiere que el transporte público sea "una alternativa con la misma disponibilidad y calidad del coche". Para conseguirlo, aseguran que impulsarán la financiación estatal del transporte público, mejorando las frecuencias y la disponibilidad del servicio, con especial atención al mundo rural.
En este impulso al transporte público también se hala de "tarifas asequibles y adaptadas a la renta, priorizando incrementar el uso y el aprovechamiento, en especial, de la red ferroviaria de media y larga distancia". En esta línea, se promete una prórroga de "los bonos de transporte para aquellos trayectos en los que hayan tenido un impacto positivo en el uso del servicio", aunque no se especifican más detalles.
En el impulso al transporte público también se buscará lanzar un billete único que abarque "todos los modos de transporte, incluidos los servicios de alquiler de bicicletas públicas, con modalidades de pago asociadas a la renta y a la disponibilidad de medios de transporte privados". El objetivo es destinar al transporte público el 0,25% del PIB. En este billete se deberían contempla reducciones "para desplazamientos recurrentes, al trabajo o a los centros de estudio, con la cofinanciación de las comunidades autónomas y la Administración local".
Sí se hace referencia a que se tratarán de promover alternativas al vehículo privado con "políticas públicas para reducir la necesidad (o hacer que no sea la única opción)" en los trayectos "con fines de ocio, culturales o deportivos".
A ello deberían influir positivamente el fomento de "territorios de 30 minutos" y "ciudades de 15 minutos". Para ello, se espera crear conexiones intermodales, con especial atención a las infraestructuras ciclistas. En los espacios más locales, se aspira a promover los trayectos a pie y en bicicleta.
VOX: sin zonas de bajas emisiones
Al contrario que los partidos de izquierda, que han hecho de las bajas emisiones una de sus banderas, en VOX proponen el camino antagónico, con la eliminación de cualquier tipo de restricción a la circulación de vehículos impuesta en las ciudades.
Desde el partido de Santiago Abascal aspiran a terminar con cualquier medida que siga esta sintonía, a las que califican de "medidas injustas" y que son las causantes de impedir "a los españoles desplazarse en el medio de transporte que libremente elijan por no contar con los recursos económicos suficientes para adquirir un vehículo propulsado por las fuentes de energía que más interesan y que imponen las agendas globalistas".
Por lo demás, en el programa de VOX no encontramos ninguna otra referencia relacionada con la movilidad, la promoción del uso del tren, la mejora y expansión de infraestructuras en carreteras y vías férreas o menciones al uso de la bicicleta.
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Foto | Anastasiia Tarasova
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