Parrot también ha querido mostrar sus novedades en el CES 2015 que está ya celebrándose en Las Vegas, y a través su división senseFly -empresa en la que compraron una gran participación en 2012- han presentado el eXom, un dron en el que los sensores son protagonistas.
Este es un dron que puede volar de forma totalmente autónoma, sin ser controlado remotamente y sin necesidad de GPS. Para esos vuelos autónomos hace uso de sistemas de visión integrada y de sensores de proximidad a través de ultrasonidos para estabilizarse y corregir su posición.
Junto al eXom Parrot ha ampliado su familia de minidrones: en la familia Jumping Sumo se ha incorporado un "rover" equipado con faros y un modelo todoterreno que dispone de un eje para superar obstáculos, mientras que en la familia Rolling Spider contamos ahora con el Mechanical FireFly, un minidrone volador con faros para la exploración de áreas poco iluminadas.
Sin embargo el senseFly eXom sigue siendo destacado: su citado sistema de cinco sensores para esa visión artificial permiten al operador comprobar la dirección en la que está orientado este dron sin necesidad de tener que girar la cámara del eXom manualmente. La idea es similar según Parrot a la utilizada en las pantallas y cámaras para aparcar que se instalan en vehículos con equipamiento de este tipo.
El senseFly eXom también integra una cámara que permite la captura de vídeo e imagen en alta resolución e incluso de datos térmicos sin intercambiar las cámaras que proporcionan esa capacidad. Según los responsables de Parrot, este dron está especialmente orientado a tareas de reconocimiento industrial y representación topográfica detallada. No se conoce el precio y disponibilidad del dispositivo.
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