Resulta que de pronto hemos empezado a leer sobre especificaciones y características técnicas que antaño parecían irrelevantes, pero que en la actualidad con el mundo tablet han ganado especial relevancia. Núcleos, velocidades y frecuencias, megapíxeles, tamaños y resoluciones... y gigas y gigas de memoria RAM.
Todos los dispositivos electrónicos incluyen diferentes cantidades de memoria RAM, uno de los grandes ejes sobre los que gira la informática casi desde sus inicios. Pero ¿qué es la memoria RAM y por qué es tan importante? Porque no es lo mismo uno que dos gigas, a priori cuanto más será mejor... ¿por qué? Vamos a descubrirlo.
¿Qué es la RAM?
La memoria RAM, random access memory, es el componente del ordenador que se encarga de gestionar la información temporal a medida que el resto de componentes la procesan, y es uno de los componentes esenciales de todo equipo informático. La tienen los ordenadores, y también los dispositivos más modernos como smartphones y tablets.
Al contrario que en ordenadores —escritorio y portátiles— donde la encontramos en forma de módulos, en los dispositivos más modernos como smartphones y tablets la RAM se encuentra integrada en pequeños circuitos de tamaño muy reducido, soldados o incluso en algunas ocasiones directamente incluidos en la placa principal. Por ello, es importante elegir bien la cantidad que deseemos al inicio, ya que posteriormente no podremos aumentarla o mejorarla. Nos quedaremos con aquella cantidad inicial, la que el dispositivo tenga al comprarlo.
Al igual que otros tipos de almacenamiento, la memoria RAM se mide en bytes, pues ésta es la unidad de información que un ordenador gestiona. Con el tiempo ha ido evolucionando, y si bien hace algunas décadas lo normal era hablar de kilobytes o megabytes, en la actualidad lo habitual es que un tablet tenga 1, 2 o 4 gigabytes de memoria RAM.
La RAM es memoria flash, si el circuito pierde la corriente energética se perderá la información
Es memoria flash —muy eficiente— y volátil, lo que significa que si el circuito pierde la corriente energética se perderá la información. Justo lo contrario a otros métodos de almacenamiento (discos duros o SSD, tarjetas flash, o el almacenamiento interno de un tablet) donde los datos se mantienen aunque apaguemos el dispositivo. Dado que la RAM suele utilizarse como almacenamiento temporal esto no es un inconveniente para el usuario.
¿Como almacenamiento temporal? ¿Para qué se utiliza realmente la memoria RAM? Existen innumerables ejemplos que describen el funcionamiento de la RAM, y de todos ellos quizá el más reconocible sea el de las aplicaciones que se ejecutan en segundo plano.
Prácticamente la totalidad de dispositivos actuales —sea del tipo que sea— son multitarea, es decir, permiten realizar múltiples trabajos a la vez. Podremos estar reproduciendo música mientras navegamos por la web en nuestro tablet, el cual está conectado a la red WiFi y recibiendo notificaciones push del correo electrónico, Twitter y también Facebook. Cada uno de estos 'trabajos' está ejecutándose en segundo plano y la información que gestiona y el código que ejecuta hace uso de la memoria RAM para procesarse de forma correcta y rápida.
Igualmente, si por ejemplo estamos utilizando un editor de fotografía, los datos relativos a la imagen están almacenándose en la memoria RAM para que el acceso y la modificación sean lo más rápidos posible; o por ejemplo un videojuego hace una gran carga de la memoria RAM por la misma razón, que pueda manejar y gestionar información velozmente.
Todo en un tablet se basa en la memoria RAM, con mayor o menor peso según la aplicación. Y sabiendo esto, ¿cuánta RAM debe llevar mi nuevo dispositivo?
Cuanta más RAM... mejor
En general, cuanta más memoria RAM siempre será mejor. Esto repercutirá ligeramente en el precio —y no en todas las ocasiones—, pero desde luego que será mejor tener 2 GB de memoria RAM a 1 GB, y por supuesto 4 mejor que 2.
Cuanta más RAM... mejor. Y lo notaremos en muchas ocasiones, como por ejemplo cuando estemos ejecutando decenas de aplicaciones simultáneamente —en segundo plano— y el sistema seguirá funcionando de forma eficaz.
También en los videojuegos. Cuanta más RAM tenga un tablet, mayores texturas será capaz de mover, y esto es especialmente importante en los tablets con altas resoluciones. Lo mismo con las imágenes: si por ejemplo estás manejando una imagen de una resolución muy alta (es decir, cuyo 'peso' sea de varias decenas de megas) el dispositivo utilizará la RAM como intermediario.
¿Y qué ocurre cuando la memoria RAM es insuficiente? Es posiblemente uno de esos puntos a los que no te gustaría llegar. Dado que los sistemas operativos están continuamente manejando memoria RAM (utilizan a medida que el usuario abre o maneja aplicaciones), cuando la RAM se llena el propio sistema libera las partes que menos necesita, por ejemplo aquellas que hace más tiempo que no utiliza.
Un ejemplo más práctico: si primero has abierto el navegador Opera pero luego sólo has usado Chrome, cuando tu RAM se llene lo más probable es que desaloje la parte que utilizaba Opera para otros menesteres, como por ejemplo el juego que acabas de abrir.
Los programas task killers no siempre benefician, ya que pueden impedir que recibamos mensajes en el WhatsApp o que las apps tarden mucho en cargarse todo el rato
Todos conocemos el software que libera de memoria, y que trabaja de manera autónoma procurando que el sistema esté siempre lo más libre posible. Más allá del debate sobre si son útiles o no tienen un peligro muy importante, y es que eliminen los procesos que no deberían haber eliminado. Por ejemplo, uno de estos programas pueden detectar que WhatsApp consume mucha memoria, eliminándolo del segundo plano; esto impedirá que recibamos nuevos mensajes hasta que no abramos nosotros la aplicación manualmente. Esto también se puede aplicar a cualquier app que esté ejecutándose en segundo plano, y no sólo a WhatsApp.
En algunas ocasiones habrás notado que cuando abres por primera vez una app —por ejemplo después de un reinicio— ésta tarda un buen rato en abrir, y que luego se inicia de forma casi instantánea. Esto es porque "está metida" en memoria RAM, y por lo tanto no necesita cargar información porque ya la tiene. Los task killers también actúan eliminando este tipo de información para liberar a la RAM, con lo que es posible que al final la experiencia sea que siempre "tarda mucho" en cargar o abrir una determinada app.
Otro punto importante es que las aplicaciones son cada vez más exigentes, y requieren más memoria RAM. Más texturas "pesadas" o complejos procesos que cargan el tablet, por no hablar de los incrementos en la resolución de las pantallas, las nuevas posibilidades multiuso o los versátiles 2-en-1 que añaden nuevas posibilidades y, por tanto, un nuevo y superior nivel de exigencia a los tablets.
Nunca sin mi RAM
Cuanta más RAM, mejor. ¿Siempre? Bueno, generalmente; no siempre es así. Lo ideal es que cada usuario elija adaptándose al uso que le vaya a dar al dispositivo. Y aquí, como vamos a hablar de tablets, vamos a determinar una mínima cantidad de memoria RAM según el tipo de usuario y el para qué quiera el dispositivo.
- El usuario básico y que no se complica. Aquel que avanza a través de la interfaz de usuario con movimientos lentos y pesados, que apenas instala aplicaciones y que quiere un nuevo tablet para leer el periódico por la mañana, alguna partidita al Candy Crush y poco más. Un tablet con 1 GB de memoria RAM para ti es lo ideal, no te compliques. Bueno, bonito y barato, aunque eso sí: intenta no hacer dos cosas a la vez, porque notarás el punto débil.
- El que maneja, pero con mesura. Es capaz de abrir una app para volver atrás en cuestión de décimas de segundo porque se ha olvidado algo, y lo hace con un manejo de índices veloz y ágil. Tiene una generosa cantidad de apps instaladas y utiliza buena parte de ellas, pero borra aquellas que han quedado relegadas a un segundo lugar entre sus favoritas. De vez en cuanto ejecuta algunos juegos para pasar el rato, y es entonces cuando nota que tenía que haber cerrado las treinta y dos apps que ha ido abriendo a lo largo del día, para que el juego arranque mejor. Estará contento con 2 GB de memoria RAM, aunque no se quejaría si tuviese más.
- El trasteador profesional que necesita lo mejor, todos conocemos a uno. Ese que descarga apps nuevas todos los días, las abre, las deja ahí y sólo las borra cuando no tiene más espacio en el tablet. Tiene cuentas en todas las redes sociales del universo y además es tan activo que cada cuatro segundos tiene una nueva notificación, que responde al acto. Pim, pam, pim, pam, pum; se mueve como un rayo entre apps que abre, cambia, contesta, escribe y casi ni le ves. De no ser porque su tablet tiene 4 GB de memoria RAM, sería hombre muerto... o casi.
Como veis depende mucho del uso. El usuario que quiera y necesite lo mejor le gustará tener un tablet con 4 GB de memoria RAM, y ASUS ha pensado en ello con el ASUS ZenPad S 8.0, el nuevo tablet de la compañía taiwanesa que pone esta cantidad de RAM en el mercado.
Un tablet Android que se presenta con una pantalla LED de 8.0 pulgadas y resolución 2K (2048x1536 píxeles) que agradecerán la presencia de los 4 GB de memoria RAM integrada, junto con los 64 GB de almacenamiento interno (ampliable mediante microSD con 128 GB más). Es un tablet pequeño de sólo 6.6 milímetros de grosor y está dominado por un procesador Intel Atom Z3580 de cuatro núcleos con tecnología de 64 bits capaz de mover los juegos más exigentes del mundo Android.
También dispone de conector USB Type-C, el reversible, Bluetooth 4.0 y WiFi hasta 802.11ac, cámaras de 8 y 5 megapíxeles y un par de altavoces frontales con tecnología DTS HD Premium Sound y Sonic Master.
Si quieres saber más sobre este modelo puedes visitar la web del ASUS ZenPad S 8.0.
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