Cuando Adobe anunció la compra de Figma por 20.000 millones de dólares en septiembre del año pasado sabía que, como es habitual en este tipo de operaciones, estaría sujeta a la aprobación de distintos reguladores. Más aún si tenemos en cuenta que Figma había sido calificada como la startup de diseño más importante del mundo por Forbes y, por si esto fuera poco, era un rival de la firma de Photoshop.
Los meses han pasado y la Autoridad de Competencia y Mercados (CMA) del Reino Unido, así como la Comisión Europea (CE) han emitido sus conclusiones preliminares. Ambas entidades, aunque tienen enfoques ligeramente diferentes, coinciden en que la adquisición de Figma por parte de Adobe puede perjudicar a la competencia. Veamos qué implicancias tiene este escenario y cómo podría impactar en el acuerdo.
La postura de la CMA
Desde la CMA aseguran que el acuerdo, y tal como y está en este momento, limitará la competencia en los mercados de diseño de productos, edición de imágenes e ilustración digital. esta conclusión preliminar se desprende de varias observaciones que han surgido de una investigación dirigida por un grupo independiente. Por ejemplo, se señala que Figma, hoy por hoy, es competencia de Photoshop e Illustrator.
Si la aplicación web pasa a formar parte de Adobe, las mencionadas aplicaciones ya no tendrán que lidiar con uno de sus principales competidores. Este punto, precisamente, es el que parece estar relacionado directamente con el siguiente: la reducción de la innovación y el desarrollo de nuevos productos competitivos. El grupo cree que, si el acuerdo no existiera, Figma podría seguir esforzándose para crear nuevas herramientas creativas.
A la CMA le interesa particularmente esta operación ya que, según sus cálculos, Figma está presente en el 80% del mercado del diseño de productos profesionales británico. Ahora bien, como parte del proceso de escrutinio y antes de emitir una conclusión final, el organismo ha propuesto una serie de cambios que podrían permitir que el acuerdo siga adelante. Uno de ellos es evitar la compra total de la compañía por parte de Adobe.
También se contempla la posibilidad de que la firma californiana realice desinversiones en los mercados con “operaciones superpuestas” que puedan reducir la competencia. Aquí hay varios mercados en el mapa, aunque la CMA parece estar centrándose en las soluciones que apuntan al diseño todo en uno, edición vectorial y edición de trama. Toca esperar para saber qué productos podrían verse afectados por esta alternativa, si es considerada.
La postura de la CE
La Comisión Europea, por su parte, emitió su conclusión preliminar hace una semana, pero creemos que es importante también recogerla en este artículo. Para la CE, “la operación puede reducir significativamente la competencia en los mercados mundiales”. En este sentido, señala dos importantes ejes como los afectados. Por un lado, las herramientas de diseño de productos interactivos, donde entienden que Figma es líder y Adobe un importante competidor.
“Es probable que la transacción cree un actor dominante al combinar estas posiciones en el mercado”, explican. También añaden que tal operación hará que Adobe deje de ofrecer Adobe XD, una aplicación de diseño que, esencialmente, apunta al mismo público que Figma, así como cualquier otro tipo de sucesora. Aquí cabe señalar que, aunque el acuerdo no está finalizado, Adobe ya ha decidido discontinuar Adobe XD.
Por otro lado, al igual que la CMA, apuntan hacia las herramientas de edición vectorial y de trama. Para la CE, la ausencia del acuerdo entre Adobe y Figma podría traducirse en un esfuerzo por esta última para entrar a los mercados actualmente dominados por Photoshop e Illustrator. Y claro, al existir el presente acuerdo, esta posibilidad se diluye, lo que se traduce en una disminución de la competencia para la compañía de San José.
Y ahora, ¿cómo sigue la historia?
Tanto la CMA como la CE, cada una por su parte, estarán recibiendo los comentarios de las partes y contemplará los cambios en el acuerdo para abordar sus preocupaciones (si es que los hay). La CMA emitirá su conclusión final el 25 de febrero, mientras que la CE hará lo propio unos días antes, el 5 de febrero. Pero estos no son los únicos desafíos regulatorios que enfrenta la operación: El Departamento de Justicia de Estados Unidos, según Bloomberg, está preparando sus propias observaciones al acuerdo.
Lo que está sucediendo nos recuerda a la compra de Activision Blizzard por parte de Microsoft. El gigante de Redmond no consiguió cerrar la operación en los tiempos pactados inicialmente y se vio obligado a realizar varias concesiones, entre ellas la venta los derechos de los juegos en la nube de Activision Blizzard a Ubisoft. No quiere decir que Adobe se enfrente a una situación de similares características, pero varios especialistas coinciden en que los reguladores están adoptando una postura más firme frente a compras y fusiones.
Imágenes: Adobe | Figma